8. ¡Nadie toca mi nave!

3 2 1
                                    

Bessy frenó casi en seco cuando un arpón que atravesó la rampa de salida, enganchando a Bessy

—¡¡Malditos animales!! —Gritó Maya. —¡Bájala antes de que la arranquen!

—¿¡Quieres que los deje entrar!? —Gritó Jhonny.

—¿¡Tienes una idea mejor!? —Regañó mientras pateaba rápidamente el rifle del suelo a donde estaba Farru. — Farru, posición de... ! —Al voltearse, no vio a Farru a simple vista. No tuvo tiempo de buscarlo cuando escuchó cómo la compuerta se empezaba a doblar por la fuerza del arpón que trataba de arrancarla — ¡Ahg! ¡Jhonny, te dije que la bajes! ¡Apaga los propulsores! ¡Prepara el motor de gravedad!

—¡¡Ok, ok!!

La compuerta de la nave bajó al instante, sellando la salida con el campo de fuerza provisional y permitiendo la entrada de sus invitados inesperados. Con la visión clara del exterior, vieron una nave tan grande como Bessy pintada de colores oscuros con franjas amarillas marcando contraste con un cañón de arpón en el costado. Del techo de la nave enemiga salieron tres personas armadas con rifles de energía de un elevador. Rápidamente, el trío atacante, de un salto cayó sobre la cadena del arpón para caminar por este hasta llegar a Bessy. El trío atravesó el escudo; los escudos provisionales no eran para evitar que algo entrara, sino como un apoyo que contendría el oxígeno del interior y permitiría el uso de los motores de gravedad dentro de las naves. El líder del trío levantó su visor y respiró profundo.

—Aaah... Otro abordaje exitoso. —Mencionó satisfecho. Sus dos acompañantes apuntaron sus rifles hacia Maya, la cual se mantuvo inmóvil. El líder de esos piratas era un Amartano, de piel verdosa, dos metros y aparentemente algo delgado. Era difícil saberlo con el traje puesto, pero lo que sí podía ver eran las venas amarillas que recorrían su rostro. Este Amartano se acercó a Maya al ver que ya tenían todo controlado.

—¿Dónde está? —Preguntó el pirata.

—¿Quién?

—Tú sabes quién, el famoso héroe que salvó a un Geekit de morir aplastado por su propia nave...~~

Ya quedaba bastante claro cómo los localizaron. Debieron seguirlos desde el crucero, esperando para también robar lo que consiguieron. La gente del hangar era muy chismosa.

—¡Oh! ¡Piratas, por favor, no me hagan nada...! —Maya alzó la voz casi como en un grito de súplica. — ¡Solo soy una joven contratista que quiere ganarse la vida...! ¡Con muchos hermanitos esperándome en casa! — Maya retrocedió unos pasos mientras dejaba su pistola y Multiherramienta en el suelo, no muy lejos. Su tono era algo... ¿Exagerado? —¡Llévense todo! ¡Pero por favor, no me hagan nada!

Los piratas solo se rieron. En definitiva, había sido un abordaje exitoso. Maya se acostó boca abajo en el suelo con las manos en la nuca.

—Je... ¡Es lindo ver a jóvenes tan cooperati...!!

De la nada fue sometido bajo una enorme presión. El motor de gravedad se encendió, ejerciendo por solo un momento la presión de 200 kg. Esta presión repentina hizo que los piratas cayeran al suelo, excepto el capitán que inclinó una rodilla. El motor de gravedad se apagó, dejando que Maya alcanzara su Multiherramienta rápidamente para levantarse de un salto, dando un rodillazo a la cara del capitán pirata. El golpe expulsó al capitán fuera de la nave. Maya enganchó su Multiherramienta al techo para girar en ella e impulsarse para caer sobre uno de los piratas, tomó el rifle y rápidamente se fue tras el cargamento de Mara. Pero de ahí salió Farru empuñando el rifle que le había tratado de pasar, tiró la palanca y, con postura firme, disparó contra el tercer pirata que apenas se ponía de pie. La bala, al contacto, generó una pequeña explosión que sacó al tercer pirata de la nave.

—¡Cuidado o lastimarás a Bessy! —Exclamó Maya.

El capitán regresó acompañado de otros dos piratas, abriendo fuego al instante contra los carroñeros. Maya y Farru tomaron cobertura atrás del cargamento de Mara.

—¿Amigos tuyos? —Dijo Jhonny desde la radio.

—¡No es el momento! —Maya revisaba el rifle de energía; no tenía ni idea de cómo usarlo.

Farru le quitó el arma, le quitó el seguro y rápidamente comenzó a disparar con gran habilidad contra los piratas.

— ¡Invierte! —Gritó Maya.

Jhonny invirtió la gravedad. Maya dio una vuelta cayendo sobre sus pies en el techo, mientras Farru cayó de espaldas como el resto de piratas, excepto el capitán que quedó colgando por sus botas magnéticas.

—Solo lo diré una vez... ¡Lárguense. De. Mi. Nave! —Gritó a todo pulmón, empuñando su Multiherramienta en forma de Martillo.

El motor se volvió a apagar y Maya, a punta de patadas y golpes con su Multiherramienta, destruyó las armas de los piratas, mientras rápidamente los sacaba de Bessy, bateándolos con el martillo.

—¡Y yo decía que los contratistas eran fáciles! —Exclamó el capitán mientras se acomodaba para apuntar a Maya.

Nuevamente, la gravedad se activó e invirtió, empujando al capitán al suelo por la presión. Maya esta vez no le dio tiempo a girar, cayendo de pecho al suelo. Se levantó y tomo el láser de su espalda para rápidamente arrojarlo contra el capitán, la gravedad aumentó haciendo que el capitán no se pudiera levantar al ser casi aplastado. Maya se acercó arrastrándose para tomar el láser, acomodarlo y dispararlo apuntando al arpón hasta derretirlo y liberar a Bessy. El calor del láser acabó quemando levemente al capitán al estar tan cerca del rayo.

—¡¡Sácanos de aquí, Jhonny!!

Los motores de Bessy rugieron con fuerza, activando los propulsores que los hicieron escapar del lugar. La gravedad se aligeró, pudiendo Maya levantar el láser. El capitán, antes de poder pensar en levantarse, fue retenido por el filo de la sierra giratoria de la Multiherramienta, puesta peligrosamente cerca de su cuello.

—Entregar a ese idiota hubiera sido mucho más fácil. —Dijo el capitán, ya asumiendo lo que pasaría. — Esto... Tendrá consecuencias.

Maya no le respondió, mirándolo con desprecio. Bajó su mirada hasta las botas del capitán para, con dos cortes limpios en los tobillos, inutilizarlas. El capitán se sorprendió; estaba convencido de que le cortaría el cuello, pero...

—¿Estás...?

Con una fuerte patada, Maya lo sacó de su nave, permitiendo que Jhonny subiera la rampa.

—Si no los detectamos hasta ahora, debieron usar camuflaje. Revisa las fluctuaciones del Éter para saber si nos siguen... —Maya finalmente se quitó el casco y respiró profundo, limpiándose el hilo de sangre que salía de su nariz, provocado por los cambios de presión gravitacional de hace un momento.

—Cof! Cof!

Maya volteó, viendo a Farru que apenas se estaba recuperando de las maniobras con el motor de gravedad, se le notaba mareado.

—¿Por qué...? —Preguntó Farru.

—¿Por qué no lo mate? Simple, un carroñero no mata gente; eso es lo que mi viejo me enseñó....

Maya empezó a caminar hacia Farru.

—Eso no... Por qué... ¿Me protegiste?

Maya suspiro.

—Primero: Nadie, daña a Bessy. —Señaló al agujero atrás de ella hecho por el arpón. — Segundo: Odio a los piratas; ya tenía previsto enemistarme con ellos en algún momento, y tercero: La regla número 1 de un capitán es cuidar de su tripulación, así que mientras seas el soldado de la nave exploradora B-55-Y... Te cuidaré.

Farru soltó una pequeña risa; parecía que, después de todo...

—¡Pero...! —Maya pisó el pecho de Farru, acercando la sierra a su cuello. — ¡Tu posición en esta tripulación ya no está asegurada!

—¡...!

—Tú y yo... Tenemos mucho de qué hablar.... 

Ola CosmicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora