En esta vida y en las que siguen.

Capítulo 5

Emily's POV

_ ¿Por qué las haría? Es decir, no hemos hecho nada malo, ¿verdad? Nada absolutamente fuera de lo ordinario que nos pongan como sospechosas, yo no creo que no nos debería llevar al recinto o a la cárcel. ¡La cárcel! No deberíamos estar en la cárcel porque no somos unas malhechoras nosotras nunca....

_ ¡Emily! -gritó Sue haciéndome callar de inmediato. - Debes tranquilizarte, estoy segura que el oficial solo quiere recolectar mas información sobre el hecho, ¿no es verdad? 

El oficial nos miraba a ambas alternando su miraba entre Sue y yo con un gesto de extrañeza, no me sorprendía a decir verdad. Cualquiera que nos observara desde un tercer ángulo vería a una chica alta respirando muy rápido, una mas calmada con las manos cruzadas delante de ella y un oficial de policía con cara de haber chupado un limón. 

_Así es señoritas, coméntenme como es que llegaron a este almacén de... -dijo volviendo a abrir la puerta del almacén revisando que es lo que contenía dentro. -...carnes.

Le explicamos como es que habíamos llegado aquí, lo que estuvimos haciendo antes y durante todo el asalto.

_Ahora se dirigen a casa puedo suponer. -Preguntó el oficial. 

Ambas asentimos y después de que nos inspeccionaran para asegurar de que estábamos sin ningún daño, por fin éramos libres para irnos. 

Terminé de pagar por mis cosas y tras una corta caminata en silencio llegamos al auto.

_Eso fue realmente aterrador. -comentó Sue. 

_Estoy de acuerdo contigo, afortunadamente no hubo ningún muerto. -Respondí aliviada.

_Un asalto en Amherst, es muy raro en este lugar. -Susurró Sue con un tono de preocupación en su voz.

Ambas nos quedamos con un aire intranquilo rondando al rededor pero no intenté, ni Sue tampoco, quebrarlo en absoluto. 

En el camino de vuelta yo no hablaba, solo me dedicaba a manejar mientras Sue me daba instrucciones hacia su casa.

_Te veo mañana, ¿verdad? -Preguntó Sue. 

Mi mente intentaba recordar para dar una respuesta a su pregunta ya que había olvidado si haríamos algo debido al incidente del supermercado. 

_Museo? Mañana? -Volvió a preguntar Sue moviendo sus manos frente de mi mirándome fijamente como si pudiera transferirme sus pensamientos con la mirada. 

De repente me pegó de golpe y recordé que habíamos planificado una salida antes de que sucediera el asalto.

_¡El museo, claro! Nos vemos allá. -Respondí al fin aliviada de haber recordado. 

Puede que el incidente del supermercado me haya hecho olvidarme de la salida pero puedo jugar que antes de esto yo estaba muy emocionada, realmente tengo muchas ganas de verla de nuevo así sea en un museo donde realmente no podemos llevar una conversación tan extensa debido a que no podemos hacer mucho ruido. Aún así, ya quería que fuese mañana.

Sue rodó los ojos al darse cuenta que me había perdido en mis pensamientos para después darme una sonrisa de "¿qué voy a hacer contigo?" y se dio la vuelta hacia la puerta del auto para bajar. 

_¡Espera! -dije alarmada. Realmente no sé para que la hacía esperar pero algo dentro de mi solo no la quería dejar ir. 

Sue me miró expectante, quieta aunque podía notar algo de alarma en sus ojos. Busqué una excusa rápidamente y pude notar que sobre sus labios yacía un mechón de sus cabellos. Lentamente llevé mi mano hacia su rostro y los puse a un lado mientras mis nudillos rozaban su mejilla. Quienquiera que haya visto esta escena desde fuera quizás hubiera visualizado un movimiento rápido y descuidado pero en esta atmósfera que habíamos creado Sue y yo, el tiempo pasaba muy lento. Lo suficiente como para poder sentir los latidos de su corazón cambiar y acelerar ante mi toque. Al momento que mis nudillos pasaron por su mejilla, sus ojos se cerraron suavemente y podía jugar que el aleteo de sus pestañas pudo haberme mandado a volar hacia otro continente.

Pero como todo lo bueno y maravilloso de la vida, esos momentos terminan. 

Sue respiró profundo y abrió sus ojos. -Te veo mañana. -me dijo antes de darme un beso rápido en la mejilla y bajar rápidamente del auto.

_Te veo mañana. -dije con mi mano en la mejilla que Sue había besado, casi en un susurro porque ella me había quitado el aliento. 

*****

Narrador POV

Emily estaba de camino a casa, aún se sentía algo atontada por haber pasado su día con Sue. Despreocupada manejaba por las calles ya vacías debido a que la tormenta se había tornado aun mas fuerte. No estaba lejos de casa, quizás a solo unos cinco minutos.

Frenó en un semáforo y de repente su tranquilidad fue reemplazada por un presentimiento extraño. Algo no andaba bien.

Ella podía sentir como es que los vellos de su nuca se levantaban a medida de que este presentimiento crecía y de pronto tuvo la necesidad de mirar hacia los lados a pesar de tener la certeza que no había algún auto cerca.   

Miró hacia los lados y también levantó la mirada hacia el espejo retrovisor, justo cuando sus ojos encontraron el espejo un fuerte trueno se escuchó y una figura encapuchada apareció de la nada. Los latidos de su corazón se aceleraron, tomó la palanca de cambios y, a pesar de la luz del semáforo, ella arrancó lejos de allí. 

Su lado razonable quería pensar que quizás era una persona cruzando la calle y se quiso convencer de ello.

Sin embargo una parte de ella estaba segura de que de alguna manera, Emily podría estar en peligro. Volvió a botar estos pensamientos lejos de ella con la excusa de que sus padres siempre le habían dicho que desde pequeña Emily se sentía como la protagonista de una película y que debía entender que no todo lo que pasaba se tenía que relacionar con ella aunque fervientemente nunca dejó de creer que si. 

Emily presionó el acelerador, quizás yendo sobre el límite de velocidad esta vez pero lo único que quería era llegar a casa. 

Finalmente cuando visualizó su casa respiró mas aliviada y aparcó el auto.

_¿Mamá? -Preguntó al entrar a la casa. 

_Estoy aquí Emily. -Su voz se escuchó desde el segundo piso. 

Subiendo las escalaras de dos en dos toda la tensión por fin se disipó al sentirse segura en casa.

Si, Emily se sentía segura. 

O eso creía. 

****

Durante la noche Emily y Sue no podían dormir, ambas pensando en como habían podido ser tan tontas como para no pedirse el número o si quiera el apellido o alguna red social donde seguirse. Era la primera cosa en la lista de mañana de ambas ya que esperaban no perder comunicación ya que ambas se irían de este pueblo pronto. 

Lamentablemente el segundo encuentro nunca se llegó a dar. 

Por la mañana Emily tuvo un gran problema con el auto que intentó arreglar pero no pudo solucionar así que después de ducharse y alistarse se fue transporte público pero parecía que al chofer le habían pagado por ir muy lento así que cuando finalmente llegó, 40 minutos mas tarde, Sue ya no estaba.

Sue había estado a las 3 en punto como habían quedado, sin embargo después de los primeros 20 minutos tuvo el presentimiento de que tal vez Emily la había dejado plantada así que se fue. 

Se fue lento, siempre mirando hacia atrás esperando poder vislumbrar alguna señal de Emily pero no fue así.

No tenían sus números, no sabían siquiera sus apellidos para buscarse en redes sociales. 

Quizás eso era todo lo que la vida tenía para ellas. 

O quizás no.