Una gran punzada de dolor en mi cabeza me despertó, pero inmediatamente cerré los ojos con fuerza. Dios, pensé que se quitaría durmiendo. Gruñí y me levante de la cama tratando de ignorarlo; tenía que buscar a Rick, tenía que contarle lo sucedido.
El resto de la noche lo había buscado, pero cuando lo encontré no me dejo hablar y me mando inmediatamente a mi celda; se veía bastante frustrado. Todavía me quedaba Michonne, pero no la encontré por ningún lado. El estrés y el miedo hicieron que mi cabeza empezara a doler.
Apenas salí la luz del sol impacto contra mi rostro, aparte mi mirada y me lleve la mano al lado derecho de mi cabeza.
Baje las escaleras lo más rápido que pude antes de caerme o desmayarme, lo cual ya me había pasado cuando tenía cinco años. La puerta de enfrente empezaba a tornarse borrosa, me frote los ojos, pero no hubo ningún cambio.
Los llantos de Judith empezaron a inundar todo el bloque. Rick debía de estar ahi, pero sentía como mi cabeza estaba a punto de estallar. Camine tambaleante hacia la celda de dónde provenía el llanto de Judith, quite la manta que cubría la puerta débilmente.
-¿R-rick...?- murmure, no aguante más, y todo se volvió negro.
{Narra Carl}
-¡Carl!- me despertó mi padre gritándome desde el primer piso, así que me levante rápido. Había pasado algo malo.
Cogí mi arma de debajo de la almohada y baje las escaleras corriendo. Cuando estaba a unos metros de ellos me di cuenta que Hershel estaba arrodillado en el piso, al lado de un cuerpo el cual reconocí rápidamente: Era Lucy.
Enfunde mi arma y trote hacia ella. Hershel tenía una mano en su frente; Lucy estaba completamente pálida y parecía tener fiebre. No pude evitar preocuparme por ella, mi padre me había dicho que una enfermedad mortal se expandía por la prisión ¿Y si ella se contagiaba?
-Que alguien me ayude a llevarla a su celda.- dijo Hershel. Yo rápidamente me ofrecí, al igual que Carol.
-¿No será mejor llevarla a la sala de cuarentena?- pregunto Daryl. Hershel dirigió su mirada hacia mí y yo lo mire de vuelta.
-¿Escuchaste si Lucy tosía o tenía arcadas en la noche?- pregunto y yo rápidamente negué con la cabeza. La verdad estaba dormido cuando llego, pero no dejaría que la llevaran donde estaban los demás enfermos.
-Los principales síntomas son esos. Si no está contagiada y la llevamos a cuarentena lo estará. Hay que esperar a que despierte -informo Hershel-. Lleven a Lucy, yo los sigo.
Yo cogí a Lucy de las manos, Carol de los pies y empezamos a caminar. No demoramos en llegar, así que apenas lo hicimos la dejamos en mi cama con cuidado.
-Parece una buena chica.- dijo Carol y se apoyó en la pared, mientras que yo me senté en una pequeña silla al lado de Lucy.
-Lo es.-aclare e iba a hablar más, pero Hershel llego y me interrumpió.