Un corazón hecho para dos [KNY - TanInoZen]

Un trío de locos enamorados

Tenía que ser una broma.

Definitivamente esto no podía tratarse más que de una broma de mal gusto.

O eso pensaba Tanjiro.

Aquella tarde, luego de decirle a Zenitsu que podían intentarlo, el rubio emocionado le pidió que lo acompañara al trabajo de su viejo amor de la infancia de inmediato, es que no era capaz de esperar para volver a verlo. Así era el rubio de apurado cuando se trataba de amor.

En el camino el pelirrojo iba tan distraído que ni notó el recorrido tan familiar.

¿Cómo sería aquel hombre? ¿En verdad sería capaz de compatir a Zenitsu con él? ¿Y si nunca lograban entenderse?

-Tangoro, ¿Por qué abrazas a ese acosador?

Pero no sabía que el destino podía ser muy caprichoso cuando quería, sí que le gustaba hacer bromas al desgraciado y de las más pesadas.

¿Y es que quién iba a imaginar que lo pondría en su camino antes de tiempo?

Porque a diferencia del hermoso chico que tenía frente a sus ojos, él no era ningún idiota y había entendido enseguida lo que sucedía.

No había dudas, Inosuke era el viejo amor de la infancia de Zenitsu.

-¡Rayos, esto no se ve bien!- exclamó el pelirrojo viendo la sangre que salía de la nariz de su pareja, no tenía un buen aspecto.

-Déjalo, se lo merece por ser un sucio pervertido.- dijo Inosuke mirándolo extrañado, sentía que algo no estaba bien, nunca había visto al pelirrojo viéndolo de esa forma tan despectiva. Parecía resentido con él. ¿Por qué? Él no había hecho nada malo, sólo se había defendido.

-¡Al menos llama a una ambulancia, no te quedes ahí parado sólo mirando! ¡¿No ves que está mal?! ¡Creo que le rompiste la nariz!- le gritó Tanjiro más que alterado.

El ojiverde lo miró ofendido por gritarle, apretó los puños.

-¡¿Y por qué debería hacerlo?!- gritó más fuerte. -¡Jodete, hazlo tú si tanto te importa ese pervertido!

-¡Por supuesto que me importa, este pervertido como lo llamas es mi novio!

Inosuke se congeló.

-¿Qué?- preguntó, no podía creer lo que escuchaba. -Tu novio es un acosador.

-¡No lo es!- dijo Tanjiro sacando su teléfono para pedir una ambulancia.

-¡Claro que sí, desde hace días no deja de venir a mi trabajo y decir estupideces de que me conoce! ¡Sales con un pervertido!

-Shhh, guarda silencio.- pidió el pelirrojo con el celular en su oreja. -¡Hola! Necesito una ambulancia en... ¿Qué dirección es esta?

-¡Y yo que sé!

-¡Ayúdame un poco!

-¡¿Por qué sales con un pervertido?!

-¡Luego te explico bien, pero dime la dirección de la cafetería al menos!

Después de pedir la ambulancia y esperar unos minutos en un silencio totalmente incómodo, finalmente los tres la abordaron, el rubio aún inconsciente, Inosuke se sentó junto a Tanjiro a un lado de la camilla.