The Crowned Pirate (L.S)

Chap. 4 Wound

Era mediodía cuando lograron zarpar, Niall y su tripulación aún en puerto, Louis y su tripulación con un nuevo destino en mente y un objetivo en la mira dentro del camino.

—Axel, fija el curso, Dorian, tenemos que estar preparados, no sabemos en qué momento nos encontraremos con aquellos barcos. -Louis se giró observando a todos moviéndose en sus trabajos, un grupo ya en lo alto del mástil trabajando en las velas ahora que tenían el viento a favor. —Si tenemos suerte los encontraremos pronto y lograremos salvar otros esclavos antes de tocar puerto nuevamente.

Un grupo ya se había preparado con algunos instrumentos para animar el viaje cantando y riendo. Louis siguió observando rápidamente a todos a su alrededor, asegurándose que todos siguieran sus instrucciones y también en busca de una cabellera rojiza, cuando unos rizos desviaron su atención.

Harry estaba junto con Nathan y, Louis suponía, aquellos que habían trabajado cargando y descargando el barco el día anterior. El grupo se retiró luego de recibir órdenes de Nathan, su mirada alejándose con la cabellera rizada y luego conectando con la mirada de Nathan, quien tenía sus cejas levantadas y una sonrisa risueña en sus labios.

Louis negó y se alejó a paso rápido hasta las habitaciones traseras en busca de Magda, fue Lisa a quien se encontró primero, ella conversaba risueña con los otros omegas mientras preparaban las comidas y ordenaban las nuevas provisiones.

La mesa esquinada de Magda estaba limpia y sin hierbas medicinales, vendas o cuencos encima. Louis buscó su rostro entre el pequeño grupo aunque ya sabía que no estaba allí, la carencia de sus cabellos color fuego era clara.

—Está con ellos desde antes de zarpar. -murmuró uno de los omegas.

Louis le asintió agradecido y se alejó por el angosto pasillo, un olor suave y dulce llegó hasta él, y, con cada paso que daba este se volvía más denso y claramente lujurioso. Pasó de largo por la habitación donde antes estaban los tres y siguió hasta el final del pasillo, golpeando suavemente la madera de la puerta final, uno de los ojos de Magda lo observó a través de una pequeña rendija antes de dejarle pasar, relajando su ceño fruncido al verlo.

—¿Cómo está?

Ella solo abrió la puerta y la cerró inmediatamente tras sus espaldas. El pequeño omega estaba en un rincón de la habitación, intentando hacerse lo más pequeño e invisible posible, pero el olor claramente lo delataba.

Louis no sabía cómo lograba luchar contra el celo, pero no es la primera vez que ayudaban a un omega a pasar por este y mucho menos a uno en sus condiciones. Las heridas claramente serían un impedimento para ayudarle, su omega luchará contra lo que piensa es un enemigo cuando está herido de esa forma, aun así, Louis tenía la esperanza de que confiara mínimamente en ellos y les permitiera ayudarlo.

—No ha comido mucho, pero cuido de sí mismo cuando le deje solo -Ella apuntó a unos cuencos con comida, todos parecían intactos. —, pero creo que el celo ya está demasiado desarrollado como para que vuelva a hacerlo.

—¿Los otros?

Louis se movió por la habitación y alistó la cama, solo para hacer algo ya que Magda tenía casi todo listo. Acomodó las almohadas y movió los cuencos con comida a un lugar más seguro, intentar moverlo hasta la cama no sería trabajo fácil.

—Dijeron que no habían venido, pero estoy segura de que lo hicieron o él no habría comido.

Louis estaba de acuerdo con el pensamiento, un nudo en su estómago y un peso en el corazón. —Aún nos temen.

Ella asintió junto a él.

—¿listo?

Louis dio un movimiento con sus manos para indicarle que prosiguiera, ella se acercó lentamente al pequeño omega, quien, para el alivio temporal de ambos, solo gimió e intentó apegarse más a la esquina en vez de directamente atacar.