STAY

CAPÍTULO 7

Cuando Wei Wuxian se despertó sintió la mano del alfa acariciando su espalda y trasero.

Wei Wuxian sonrió sin moverse.

Lan Wangji estaba muy concentrado acariciando cada parte de Wei Wuxian con adoración.

Sintió los besos húmedos del alfa en sus hombros, en su espalda y una pequeña mordida en su trasero.

Wei Wuxian era muy consciente que su trasero era algo de admirar ahora, siendo más joven, el omega no era tan guapo como en su adultez.

Claramente esa era su perspectiva, pues Lan Wangji siempre había estado fascinado por él, no sólo por su belleza física, sino por lo noble, amable y puro que era.

Su Wei Ying.

Suyo si cedía a marcarlo.

Wei Wuxian al fin se movió y Lan Wangji lo vio a la cara.

La sonrisa del omega volvió a robar el corazón del alfa.

Como si fueran viejos amantes se besaron. El toque fue suave e íntimo y duró lo suficiente para llegar a otra ráfaga de calor.

Wei Wuxian se aferro a los hombros de Lan Wangji y respiró hondo cuando lo volvió a tomar dentro de él.

Esta vez el alfa había desistido de los preservativos y anudo al omega cuántas veces pudo. 

El celo de Wei Wuxian duró nada más cuatro días en los cuales casi no hablaron, sino se dedicaron a hacer el amor durante mucho tiempo.

Al quinto día despertó completamente limpio, saciado y adolorido.

A pesar de lo suave que era Lan Wangji para tratarlo, Wei Wuxian lograba hacer que el alfa fuera más rudo. 

Lan Wangji estaba completamente dormido entre sus brazos y Wei Wuxian volvió a cerrar los ojos, convencido en que así debía ser su vida.

La próxima vez que se despertó, Lan Wangji estaba regresando de una ducha.

Wei Wuxian se sonrojó de ver el tremendo cuerpo trabajado de Lan Wangji, apenas creía que él había tocado todo eso. 

Con pasos lentos el alfa se acercó y lo besó en los labios.

—¿Cómo estas? Preguntó.

Wei Wuxian sonrió ante la atención del alfa.

—Cansado. Respondió con sinceridad.

Lan Wangji le besó la frente y acarició su rostro y el omega se pegó a sus toques.

Ese era Wei Wuxian después de todo, una persona hambrienta por el amor, cariño y atención de Lan Wangji.

—Dormiste durante casi todo el día, no ha habido ninguna indicación de otra ola de calor. Le comentó Lan Wangji.

Wei Wuxian frunció el ceño.

Regularmente sus celos tardaban más de cinco días, sin alfa. Suponiendo que Lan Wangji controló su celo, no era extraño que fueran esos cuatro días de calor.

—¿Vas a quedarte aunque ya haya acabado? Preguntó el omega, sonando indeciso.

El alfa asintió.

—Me quedaré, pero tendré que ir a trabajar en cuatro días. Anunció.

Wei Wuxian tiró de la toalla en la cintura del alfa y este la dejó caer.

Wei Wuxian observó todo el cuerpo de Lan Wangji.

—Lan Zhan, vuelve a la cama, por favor. Pidió y Lan Wangji sonrió. 

Los besos, las caricias, las miradas mientras se unían nuevamente, le daban esperanza a Wei Wuxian.