-Si no te agrada, te vas, pero si te gusta, entonces prometes volver con nosotros ¿De acuerdo?
-Bien
Midorya, Uraraka, Bakugou y su novia Rossme me habían hecho la invitación de ir a un Bar-Caffe, todos decían que los aires que pintaba eran agradables, decidí acompañarlos con la condición de que me daría la vuelta si mentían respecto a la descripción que habían hecho, todos estuvieron de acuerdo. La novia de Bakugou trabajaba allí también, así que hizo una reservación para todos nosotros.
Cuando llegamos, quedé levemente sorprendido por lo bien que se veía, al entrar el aroma a fresa y kiwi inundaron mis fosas nasales, no tan bueno para mi gusto pero si lo suficientemente aceptable para darle una oportunidad al lugar, habían mesas para solo cuatro personas y también largas y grandes mesas para más de ocho, todos nos colocamos en la más grande con vista a un escenario, seguramente para dar el espectáculo del que los chicos hablaron, al parecer era la atracción principal del lugar. Yo quedé a la cabeza de la mesa, los demás se acomodaron a un lado de su pareja y con vista directa al telón de la plataforma.
Una joven de cabellos violetas se acercó a nosotros y nos tomó la orden, todos sin excepción ordenamos y degustamos un buen rato. De pronto, todas las luces bajaron de tonalidad y una bulla de silbidos y aplausos escandalosos se hizo escuchar entre los presentes, los meseros se movieron por las mesas y una a una, iban encendiendo las velas que se encontraban como parte del centro de mesa, acompañando el ramillete de rosas y claveles, Bakugou ordenó una botella de vino y la joven de hebras violetas que nos atendió en el principio, se hizo presente cinco minutos después con la botella de vino en mano, coloco las copas y dejo la botella sobre la mesa para nuestro antojo, así como vino se fue.
-Ponte cómodo mitad y mitad, disfruta del Show–. Dio un trago y movió de forma rotativa la copa entre sus manos–. Esta por comenzar.
Tan pronto dijo eso, el sonido de una melodía se hizo presente en el lugar, giré el rostro a la derecha y levante la vista hacia el escenario en cuanto la voz suave y armoniosa resonó en el lugar, al hacerlo me topé con la silueta de una hermosa chica, sus cabellos Azabaches, obscuros como la noche, sus ojos de color onix eran hipnotizantés, su pequeña nariz era perfilada, mi vista no pudo evitar seguir sus movimientos, mis ojos divagaron en su figura, tenía un vestido de color vino, estaba entallado a su cintura de la parte superior y dejaba sus hombros al descubierto en una perfecta copa V sobre sus pechos, pero la parte inferior era suelto y esponjado con una abertura sobre su pierna derecha.
Quedé embelesado en cuanto sus ojos toparon con lo míos, dejé de pasar aire a mis pulmones en cuanto la vi acercarse a nuestra mesa mientras caminaba a paso lento sin dejar de cantar la pieza, llevaba una rosa entre sus manos, ella pasó por mí lado y quedo a mis espaldas, balanceando sus caderas de un lado a otro, probablemente mis pupilas se dilataron al sentir el toque de sus manos sobre mi pecho, ella estaba detrás de mi, sus labios estaban demasiado cerca de mi oído derecho mientras seguía con aquel cantó cual ángel. Me estremecí al sentir como una de sus manos atrapaba la mía que estaba sobre la mesa y dejaba la rosa entre ella, gire a verla y ella me sonrió dulcemente al encontrarnos tan cerca, antes de irse de mi lado, me guiño un ojo y se retiró a otra mesa, cantando para los demás.
-Parece que alguien acaba de ser flechado–. Mi ceño se vio fruncido al escuchar el comentario de Uraraka, todos rieron menos yo, me sentí extremadamente abrumado, no entendía a lo sé refería y tampoco comprendía lo que sentí en ese momento con las acciones de aquella chica.
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FRÍOS Y ARDIENTES ESCENARIOS
FanfictionPequeños escenarios ambientados en distintos tiempos, en el que nuestro lindo y adorable mitad y mitad compartirá pedacitos de su existencia a nuestro lado. Yelena Belrouss y Amy Rossme son personajes completamente de mi auditoria, mientras que los...