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Epílogo

Stiles sonrió al ver el anillo de oro blanco en su dedo, no podía creer que ya hayan pasado cuatro años desde que se volvió a casar con su amado lobo. Las cosas en la manada en ese tiempo seguían igual, no importa cuanto hayan crecido todos, eran los mismo que cuando eran adolescentes. Todas las parejas ya se habían casado e incluso algunas ya tenían hijos como Thomas y Newt, Aiden y Lydia, Ethan y Jackson, Isaac y Scott, y ellos. Hace un año una manada fue masacrada por los cazadores en el pueblo de al lado, ellos fueron a ver que sucedía y ahí se encontraron con los sobrevivientes de esa masacre, tres hermanos; Kevin, de catorce años, Eli, de doce años y Carter, de siete años. La pareja no pudo evitarlo y terminó adoptándolos.

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- ¡Pops! – gritó Eli mientras corría por el instituto hasta la clase de su padre, la cual se estaba vaciando.

El castaño alzó una ceja al verlo.

Sus hijos tenían el cabello castaño oscuro, Eli tenía los ojos verdes mientras que Kevin y Cartes grises. Thomas y Ryhs se burlaba ya que los chicos podían ser hijos biológicos de la pareja por el gran parecido pero Stiles y Derek solo sonreían con orgullo y felicidad ante eso.

- ¿Qué sucedió? – le preguntó Stiles mientras sus alumnos sonreían con diversión al ver a pequeño Hale entrar corriendo como casi todos los días.

- Papá, no me deja entrenar con él y los demás. Quiere que sea la niñera de los cachorros, no es justo. Kevin, si puede entrenar con ellos un poco. – se quejó Eli mientras hacia un puchero.

- ya llegará el tiempo en que tú puedas entrenar. Tu padre te dio la tarea de cuidar a los cachorros porque confía en ti y sabe que los mantendrás a salvo. – le dijo Stiles mientras acariciaba el rostro del menor.

- ¿De verdad?

- Si. – besó la frente de Eli – Ahora vamos a comer algo, solo por hoy te invitaré solo a ti hamburguesas. – le dijo Stiles mientras tomaba sus cosas y salía del aula junto con su hijo.

- ¡Yei!

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Stiles se dejó caer en el sofá mientras que Ryhs, en su forma de zorro, se acomodaba en el regazo del castaño. Derek no tardó en sentarse al lado de su esposo.

- Deberías de explicarle mejor las cosas a Eli, es bastante inquieto y le urge hacer lo que tú y Kevin hace.

- Para eso estás tú, sabes que decirles a los cachorros. Yo les puedo enseñar otras cosas pero tú tienes un don.

- Eres un idiota.

Derek soltó una carcajada para después besar la frente del castaño.

- Tú te cásate con este idiota y dos veces. – se burló Derek.

- Y lo volvería a hacer. – le dijo Stiles mientras dejaba su cabeza descansar en el hombro del otro.

Derek sonrió y abrazó a su esposo. Era bueno tenerlo a su lado y tener una familia, ambos lo merecían.