Capítulo 10: Monstruo Jefe del Edificio de Humanidades y Ciencias Sociales (4)

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En poco tiempo, dos esqueletos resucitaron entre los cuerpos de los goblins para reemplazar los esqueletos perecidos, pero uno de ellos fue inmediatamente hecho pedazos con un fuerte golpe en el momento en que se puso de pie. Su cráneo fue arrojado hacia Sungwoo, pero apenas lo evitó. Golpeó la puerta de la azotea y luego se hizo añicos.

Los cuerpos de los duendes, que se convirtieron en el material de los esqueletos, estaban esparcidos por todas partes, pero era imposible resucitarlos a todos indefinidamente.

<Maná (20/30)>

"Maldita sea, mi maná..."

La cantidad requerida de maná por esqueleto era de 5 puntos, y solo se podían crear cuatro esqueletos en este momento. Por supuesto, hubo un aumento constante en el maná, pero eso solo no fue suficiente.

¡Silbido! ¡Puk!

Justo en ese momento, algo fue arrojado al goblin jefe, pero apenas lo bloqueó levantando su mano izquierda.

"Oh, ¿lo bloqueaste?"

Una vieja daga de duende estaba clavada en su antebrazo. Hanho lo arrojó, pero no pareció infligir ningún daño significativo.

Pero, las venas se destacaron en su frente.

"Oh, ese bastardo fue golpeado, ¿verdad?"

"... Sí, le diste."

Hanho retrocedió, asustado, pero el goblin jefe comenzó a cargar hacia él a toda velocidad. Saltó hacia él, levantando el pesado garrote con ambas manos. El duende amenazaba lo suficiente como para hacer gritar a Hanho.

“¡Argh! ¡Aaaah!”

¡Traqueteo!

En ese momento, los esqueletos llegaron corriendo y bloquearon el ataque, y Hanho huyó rápidamente.

"¡Ups! ¡Gracias chicos!"

Pero el golpe del jefe goblin destrozó tres esqueletos al instante. El esqueleto de un solo brazo, el único sobreviviente, tenía una de sus costillas destrozadas cuando fue atrapado por la punta del garrote del jefe goblin.

Sin desanimarse por el impacto, el esqueleto bajó la cabeza y clavó la daga en la parte superior del pie del goblin.

¡Puk!

Con un chillido, el jefe goblin pateó el esqueleto con el otro pie, lo que arrojó el esqueleto al casillero del otro lado. Sungwoo se sintió desconsolado al ver su cráneo roto por la conmoción.

Luego confirmó que Jisu se estaba escondiendo a sus espaldas. Trató de no mirarla para que no la atraparan.

Ahora empuñó el sable hacia él, lo que le provocó un largo corte en la espalda. Si no se hubiera movido o sentido su ataque en el último momento, podría haberlo decapitado.

"Maldita sea, podría haber matado a ese monstruo..."

Chasqueando sus labios, dio un paso atrás y agitó su sable en el aire para desempolvarlo.

'Esa chica no es una mujer ordinaria.'

Obviamente, la forma en que blandía el sable estaba lejos de ser normal. Sungwoo sabía que debido a que vestía un chándal, se graduó de la facultad de educación física, pero también sintió algo extraordinario en sus habilidades con la espada.

Su constante blandir la espada era claramente un movimiento estratégico para confundir al jefe de los duendes.

'También debería moverme estratégicamente'.

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