Capítulo 37: Los que no recogieron la tarjeta (1)

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Taesung respiró aliviado. Cuando abrió la puerta de la oficina, nueve amigos suyos lo miraron. Pero el ambiente seguía pesado. Era como si hubieran venido a la casa de un doliente.

"¿Que demonios? ¿Qué les pasa a ustedes?” preguntó Taesung, y una mujer con una sudadera con capucha roja entre ellos abrió la boca.

"Oh, ese tío está aquí..."

Los ojos de Taesung se abrieron ante la palabra 'tío'.

"¿Qué? ¿Por qué vino de nuevo?

"Bueno, se quejó de que recaudamos muy poco dinero... incluso Yujin..."

"¡Qué le pasa a Yujin!"

Gritando así, se dirigió a la puerta con el cartel, 'Oficina del Presidente'.

Pero incluso antes de que agarrara el pomo de la puerta, la puerta se abrió de golpe y apareció una mujer con el rostro demacrado.

"Hay mucho ruido..."

Ella lo miró con las pupilas entrecerradas.

"...¿¿Oh??"

Sin embargo, su cuello estaba marcado con marcas de dientes afilados.

Dio un paso atrás sin darse cuenta.

"Yujin, tú..."

"¡Hay mucho ruido! No abras la boca. Si huelo tu carne, tendré hambre. ¡No puedo soportarlo más porque me duele la cabeza!”

Yujin soltó algunas palabras sin sentido, luego giró la cabeza con el ceño fruncido donde había un hombre sentado en la silla de la oficina del presidente con una gorra de béisbol.

“Qué chica tan desagradable... ¡Oye, Taesung Han! ¡Ven aquí chico!"

Al descubrirlo, el hombre le hizo señas. Taesung apretó el puño inconscientemente, pero lo soltó y entró en la oficina del presidente.

"Hola, Taesung".

"....Sí, señor."

"¿Por qué mataste a Woosuk?"

Woosuk Kim era el nombre del líder de su pandilla. Era pobre y sin educación, pero siempre fue inteligente y leal a sus amigos, por lo que los niños que rondaban dependían de él.

“...”

Luego, Woosuk se convirtió en un monstruo después de conocer a este hombre llamado 'Tío'. Después de eso, Woosuk estaba hambriento de sangre. Por eso se empeñaba en buscar oro y rompió el suyo para matar a los supervivientes.

"Te estoy pidiendo. ¿Por qué lo mataste?

Ese no fue el final de la historia. La sed de sangre de Woosuk había cruzado la línea. Completamente loco, comenzó a apuntar a los cuellos de sus amigos. Después de todo, Taesung lo mató en persona. En el momento en que Woosuk atacó a otro amigo, Taesung le aplastó la cabeza por detrás.

“No tuve otra opción porque atacó a nuestros otros amigos”.

“Oh, entonces, la próxima vez es el turno de Yujin de atacarlos. ¿Qué vas a hacer?"

“...”

“Te lo dije, hombre. Retenerlo demasiado tiempo no es bueno para ti. Si chupa sangre moderadamente, puede mantener el status quo. ¡Oh Dios mío! Estoy realmente enojado porque ustedes no pueden entender de lo que estoy hablando”.

SOLO YO SOY UN NIGROMANTE  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora