Nada estaba pasando como se esperaba que pasase. Aura estaba regular. O a todo o a una. De un momento a otro flashes pasaban por su cabeza, la mayoría de ellos pareciesen mensajes de alerta, pero ella era incapaz de descifrar. La mayoría era ella en escenarios fatales.
Estaba sola en casa, su hermana se había ido a desayunar, si, habían recuperado la rutina de dormir juntas unos días, sobre todo desde que Aura había comenzado con jaquecas. El resto del tiempo estaba con su novio.
Aura no podía estar sola, ya que la cabeza le daba vueltas y era lo que menos necesitaba, porque era levantarse y que todo le de vueltas.
Sus padres vendrían hoy para comer. Era el momento, su padre es científico, seguro que puede ayudarle, pero en ¿qué? Si nadie sabía que algo así existía..si se desconoce las mil funcionalidades o trastornos que el cerebro puede desarrollar porque no han podido estudiarlo y se les escapa de control.
Había pasado unos meses así. Meses en los que pensó que acabaría si no era congelada con Iraide sería loca. Había pedido la baja temporalmente. En el trabajo todo eran visiones, es como si pudiese descifrar la vida del personal de toda la oficina. Era macabro hasta el punto que llegó a saber que el señor Aguilar había perdido a su hija en un accidente de avión.
Era una locura pensaba constantemente. Es como si su cerebro proyectase una película de lo que había sucedido o lo que es peor aún, a veces lo que podría suceder.
¿Estaba loca? Una pregunta constante en su cabeza. ¿Y si su cerebro estaría pasando por algún trastorno que no se detecta y su funcionamiento es erróneo?¿Y si hay algo que presiona o que ha hecho que desde que se cayó por las escaleras alterase el funcionamiento de su cerebro? Había tantos y si...y tantos escenarios posibles.
Había noches que no podía dormir. Ese sueño se repite una, dos y cada noche despertandola con gritos. Ese sueño donde es ella la víctima. Víctima de sus propias visiones.
Hoy el día ha amanecido oscuro, pero para Aura estaba tranquilo sorprendentemente. Estaba como en un modo zen. Hace la comida para el encuentro con sus padres y organiza el salón y su habitación. Es como si por un momento su cabeza le hubiese dado una tregua, un momento para respirar.
Al cabo de un par de horas el timbre suena, alertando la llegada de sus padres. Esta vez comerían solos. Su hermana estaba trabajando y después comería con la familia de su novio.
—Mama, papa—saluda ella abriendo la puerta.
—Hola hija—contestan ambos padres para luego abrazarla. Estaban preocupados por ella.
Su hermana, les habia estado diciendo que había tenido unas jaquecas o unas migrañas muy extrañas y que apenas podía salir de la cama y ellos sabiando lo inquieta que es su hija menor, era de extrañar.
—¿Cómo te encuentras? Cinthia dijo que estabas en cama—le acaricia el pelo su madre.
—Estoy mejor. Pensé que me volvía loca era horrible.—sus padres la miran con gran preocupación en su mirada.
—Nos alegra que estés mejor cariño—responde su padre.
Pasan al salón y se sientan. Mientras su madre va a dejar la comida que ha traído y preparar la mesa.
—Papa...
Ella estaba nerviosa, le empezaban a temblar las manos.
—Dime cariño—se sienta a su lado.
—¿Tú crees que el cerebro es modificable?
—¿A donde quieres ir a parar?
—¿Es posible que tras un evento traumático haya algún problema que pase desapercibido y que lo comprima o presione y haga que este alterado y genere dolores?
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Ella, víctima de sus visiones
Mystery / ThrillerAparece alguien en medio de la acera, caminando lentamente, el semáforo se encuentra en color verde, donde los peatones de la calle pueden pasar. Un coche veloz pasa por está y choca contra el semáforo. -¿Qué fue eso?-se despierta confusa - mira am...