Secrets

La chica con la que salgo

Tori estaba sola en casa con Trina, y como no le interesaba verla llenar su rostro de salsa para "cuidar su piel" prefirió quedarse en su cuarto y ver alguna serie o película en su computadora, aunque hubiera preferido hablar un rato Jade, sabía que estaba ocupada con su proyecto de escritura, y no quería molestarla, así que solo le escribió para desearle suerte y un "buenas noches :)" a los cuales no recibió respuesta, pero realmente no le molestaba, sabía lo exigente que es la gótica con ella misma cunado se trata de escribir, ya sea un guión o una realmente espeluznante historia.

Eran pasadas las diez, cuando Tori sintió "el llamado de la naturaleza".

—Perdon Nat, pero debo hacer pipí— le habló a la imagen en su pantalla al ponerla en pausa.

Caminó hasta el baño en el pasillo y se dispuso a hacer lo suyo.

Mientras, la ventana de la habitación de la mitad-latina se abría lentamente para no hacer ningún ruido y la supuesta "enemiga" de Tori se deslizó al interior de su cuarto, esperaba encontrarla ya en cama, o tratando de escribir alguna canción, pero solo halló un cuarto vacío y una computadora con una imagen congelada de Scarlett Johansson usando un ajustado spandex negro.

—¿Otra vez?— dijo a la nada rodando los ojos.

En cuanto sintió pisadas acercarse, se tiró al suelo y rodó bajo la cama, no sabía quién era hasta que reconoció su manera de suspirar al arrojarse sobre el colchón, fue cuando vió un zapato de Tori junto a ella que se le vino a la mente una pequeña forma de meterse con ella. Sabía que la latina estaba concentrada en su película, así que no vería su mano asomar por el borde de su cama, así que estiró el brazo y en cuanto sintió la manta de la latina, la agarró y jaló tirando la al piso, y obvio, Tori gritó un poco, la sintió removerse en la cama y vió sus delgados dedos acercase a la manta, entonces la jaló debajo de la cama y nuevamente la monera soltó un chillido, rápidamente se puso de pie y encendió la luz de su cuarto, cuando la vió acercarse un poco, tomó el zapato y lo arrojó, lo que la hizo saltar para esquivarlo, pero como ella quería, había quedado lo suficientemente cerca como para tomarlo con su mano, pero no lo hizo, esperó que Tori se animara a hacerlo y rápidamente le agarró el brazo, haciendola gritar como una niña pequeña, y fue entonces que la risa de la gótica se sintió y decidió salir de su escondite.

—¡¿Jade?! ¡casi me matas del susto!— pero la gótica seguía riendo —¡no es gracioso! ¿y que haces aquí además?—

—Aahh— suspiró calmando se —... ¿qué? ¿ya no puedo venir a verte?—

—Claro que si, pero pensé que estabas en casa haciendo tu proyecto de escritura—

—Lo estaba, pero terminé hace un rato y ví tus mensajes, así que pensé en venir un rato— dijo tranquila sentandose en la cama de su contraria y cruzando las piernas.

—Oh, bueno, me alegra que terminaras rápido, pero ¿no sé preocuparan tus padres cuando no te encuentren en casa?—

—Vega, vengo aquí unas cuatro noches a la semana, ellos saben que no estoy en casa—

—¿Saben que estás aquí?—

—Si—

—¿Ellos saben de...— las señaló a ambas.

—Saben que salgo con una chica, pero no tengo por qué decirles con quién ¿apenas pensaste en eso?—

—Bueno... si— nuevamente la gótica rió —oye, sabes que mis padres no tienen idea, no pensé que los tuyos sí—

—La verdad solo lo saben porque Emma nos vió besándonos en mi sala una vez y se los contó, pero no te reconoció—

—Y...—