Hoseok no entendía por qué la casa de los abuelos Tomlinson era tan helada, pero era la peor combinación con la carente capacidad que tenía su cuerpo para regular su propia temperatura.
Tenía dos opciones:
1. No dormir por estar temblando como chihuahueño entre las cobijas.
2. Meterse a la cama de Taehyung, el calefactor humano.
La decisión se tomaba sola, ahora solo tenía que reunir el valor suficiente para ponerse de pie y correr el oscuro y enorme tramo de dos metros hasta la cama que se encontraba en contra esquina de la suya.
Otro temblor le recorrió la espalda y decidió que por el bien de sus extremidades lo mejor era arriesgarse a ser comido por el monstruo que de seguro acechaba debajo de la cama, no es que lo creyera en realidad, pero así era como se sentía. No podía pensar de otra forma estando en una casa grandísima y vieja.
Tomó aire y en un parpadear ya había brincado sobre la cama de Taehyung, quien se estremeció al sentir el enorme bulto que había caído de la nada justo a su costado.
—¿Qué demonios pasa contigo? —susurró Taehyung como si en realidad estuviera gritando.
—Era eso o morir de hipotermia, no entiendo como este puto cuarto está helando en plenas vacaciones de primavera.
—No sé que tan perdido estés, pero esta habitación vendría siendo el sótano de la casa. La tierra aquí siempre es húmeda, por eso siempre está mucho más fresco que el resto de la casa.
— ¿Por qué carajos escogerías esta habitación para quedarte? —preguntó azorado.
—¿Has visto este lugar? Aquí el único tonto fue Louis al escoger la buhardilla, bonita vista, pero para él se adecúa porque es un duende friolento. Yo necesito espacio y siempre tengo calor. —argumentó Taehyung.
Hoseok lo analizó y mentalmente le dio la razón. El lugar era bastante bonito.Las cuatro paredes estaban recubiertas con madera barnizada, el piso era completamente alfombra verde como la que había usualmente en las salas de cine, todas las orillas del techo tenían pequeños focos navideños. En una de las paredes, del lado donde se encontraban las camas gemelas, había una ventana angosta y alargada, de manera horizontal casi al ras del techo y a la otra orilla de la habitación había un par de sillones y un viejo, pero conservado centro de entretenimiento que solía haber estado en la sala de estar de la casa. Incluso la televisión que acababan de reemplazar, se encontraba ahí abajo. Además para el invierno contaba con un pequeñito calefactor.
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RECUERDOS AÑEJOS (Larry Stylinson)
Fanfiction¿Qué harías si tu primer amor volviera a tu vida justo en el momento apropiado? ¿Tomarías la oportunidad de iniciar desde cero o dejarías que los recuerdos les volvieran a alejar?