Unas vacaciones diferentes (sin editar)

CAPITULO 5

Ambos sentíamos una fuerte conexión, él dejaba que el sabor a menta de su boca llegase a la mía, sus labios se movían con tanta tranquilidad pero con tanto deseo que parecía una clásica escena de ambos bajo la luna con las luces de la ciudad al fondo. Se notaban los labios del corazón acelerándose más cuando sus manos bajaban cada vez más por los bordes de mi cadera, Dean se acercaba cada vez más mientras que yo solo admiraba como lograba sentir esas famosas mariposas en mi estómago.

—Creo que mejor iré a cambiarme para esta noche— dije con mis piernas temblando.

—Te veo hoy—dijo Dean depositando otro beso dulce en la comisura de mis labios.

Cuando fui a abrir la puerta principal me encontré a Estefany con una maleta pequeña, yo me puse roja mientras que ella no parecía contenta, me empujo y dijo:

—Qué demonios haces con ella.

—¿Te debo una explicación?— dijo él, me agarró del brazo y dejó otro beso en mi boca.

Joder

—Mejor me voy— dije nerviosa con las mejillas rojizas, tome mi bolso y salí mientras se escuchaban los gritos de ella en los pasillos.

Ya casi se hacían las 9 de la noche, el clima estaba perfecto para el vestido que me había comprado pero ahora sentía vergüenza por que la novia nos vio y el cómo se atreve a besarme frente a ella.

Me vestí, me hice un rodete con coleta y unos zapatos blancos.Toque la puerta de su habitación y nadie respondió. Entre en mas dudas.

Tome el camino mas corto, no hacia frio pero un suave viento rozaba mis rodillas descubiertas. Logre ver a Dean, con Estefany y un grupo de amigos, apuesto a que uno de ellos era Alex. Me acerque a su círculo. Dean se acerco primero, me llevó hasta la otra punta de la barra.

—Lo siento— se escuchó de mi boca.

—No te disculpes—dijo con una linda sonrisa—¿daikiri?

—De frutilla por fa.

Estefany no se acerco a nosotros en ningún momento, en cambio se estuvo besando con un chico toda la noche. Dean se sentó al lado mio, era un chico listo, atento, chistoso y bonito.

Tomo mi mano y nos llevo a la orilla del mar, una brisa tranquila nos separaba. Nos sentamos en la arena, el seguia con su mano enredada a la mia.
—Me siento como en la secundaria.

Lo mire nerviosa,acaso él estaba ¿incómodo?

—Somos dos— le respondí.

—No te sientas incomoda, ¿si?— me mira.

—No lo estoy.

Dean apoyó su mano en mi muslo apretando con suavidad, el contacto de su piel con la mía hizo que un lento escalofrío rozara mi espalda descubierta. El apretaba cada vez más.

—¿Fumas?— preguntó sacando un paquete de cigarros.

—A veces.

Me acerqué a tu boca ya que habíamos conectado miradas y su vista bajaba a mis labios, me atreví a besarlo, senti el cosquilleo en mi cuerpo hasta que escuchamos una voz delante de nosotros.

—Nos quedamos sin plantas amigo— dice aquel chico.

—Ve a mi departamento, agarra lo que necesites—dice Dean dándole las llaves de la habitación del hotel.

Dean no le da mucha importancia y vuelve a conectar nuestros labios, lo hacia tan perfecto, lograba ser dulce y atrevido a la vez. Siento algo de culpa por Estefany o quizás yo era el reemplazo.

—¿Soy el reemplazo de Estefany?

—¿Que?— él solo me mira con las cejas hacia arriba.

—Estas mal por que ella se besó toda la noche con ese y ahora queres hacer una venganza,¿me estás utilizando para eso?

—Carajos Ruby, si supieras que no es eso.

—Y que es.

—Solo dejame disfrutarte en estas vacaciones— su voz ronca me dice cerca de mi oído— no necesito conocerte para ya notar que las ganas me matan, ya te dije, no soy mujeriego pero nadie me interesaba  hasta que llegaste.

—No deseo compartirte con ella..

—Entonces no me compartas con nadie, y volveme tuyo.

Volvió a enredar nuestros labios mientras sonaba una melodía desde el bar.

—Tienes algo que no tiene cualquiera, ¿lo sabías Ruby?.