𝕮𝖆𝖓 𝖚 𝖋𝖊𝖊𝖑 𝕸𝖞 𝖍𝖊𝖆𝖗𝖙? [Sally Face y Tu]

Capítulo 17

La voz de Sal hizo que me sobre saltará en mi lugar.

—Necesito hablar contigo.—Giré mi rostro en dirección a su voz, lo cual provoco que quedáramos a pocos centímetros de distancia, me aparte rapidamente para evitar ponerme nerviosa.

—¿D-de que quieres hablar?.-Pregunté tratando de sonar lo suficientemente calmada.

—Bueno, sería mejor que fuera en otra parte.- El miro a otro lado mientras volvía a enderezarse en su asiento.— ¿Tu siguiente hora es libre?— asentí.— Vayamos al patio.

Una vez más asentí con la cabeza, no pudimos seguir hablando pues la profesora entro al aula, asiendo que mi vista regresara al frente y mi atención se posicionara en la señora mayor que impartía clases, aunque eso no era del todo cierto, mi mente estaba divagando, pensando en lo que fuera aquello que Sally querría decirme. 

La clase estuvo tan lenta que sentía que jamás se acabaría, haciendo mi sufrimiento más longevo de lo que planeaba que fuera, mentiría si dijera que no extrañaba sentir las manos de Sally jugueteando con mi cabello, solía hacerlo cada clase que se sentaba conmigo cuando se aburría por terminar primero las actividades que solíamos hacer en clase.

Echaba miradas rápidas al reloj que se posicionaba sobre la puerta del salón, esperando que las manecillas se movieran más rápido para acabar la clase, cuando faltaban un par de minutos para que la clase acabará tome mis cosas y las metí rapidamente en mi mochila para no perder tiempo después, sí, estaba desesperada por querer salir ya.

Cuando el timbre sonó me levante de mi asiento y me dirigí a la puerta mirando atrás dándome cuenta que Sal estaba recogiendo sus cosas, se giro a mirarme y camino rapidamente hacia mi dando pasos largos una vez frente a mi hizo una seña con la cabeza para que saliéramos del salón

 Maldito silencio, lo odio, quería romperlo de alguna forma, pero estaba tan nerviosa que las palabras no salían de mi boca, no sabía que decir, llegamos a una parte algo alejada de la escuela, nos sentamos en el suelo lejos de la gente donde no pasaba ni un alma, me acomode tratando de lucir lo mas relajada posible y que no se notara mi nerviosismo a simple vista, así que decidí romper aquel silencio que no dejaba de perseguirnos.

—¿De que querías hablar?—Pregunté tratando de sonar segura. Se quedo callado un par de segundos mirándome.

—Yo..—No dijo nada, miro hacía un lado y luego regreso su vista hacia mi— Lo siento..—Levante una ceja notoriamente confundida.

—¿Eh? —Solté apenas lo oí disculparse, parecía tener una lucha interna consigo mismo, agacho la cabeza removiendo su cabello con notoria desesperación— ¿Sal, de que hablas? —Cualquier cosa que pasaba por mi cabeza se disperso de golpe al escuchar el sonido peculiar del broche de su prótesis abrirse 

Clic

Aparte la vista cerrando los ojos rapidamente. 

—¡¿SALLY QUE HACES?!—Le grité—¿ESTAS LOCO? — No lo escuche decir nada por un momento, solo escuche como soltó un suspiro pesado.

—Mírame —Ordeno.

—N-no, Sal, no tienes que hacer esto.—Dije tratando de hacerlo entrar en razón.

—Mírame —Negué rapidamente con la cabeza— Quiero que tú me mires...—Oír su voz suplicante causo algo en mi que hizo que inmediatamente abriera los ojos, pero no giré a verlo —Por favor...

—Sally de verdad no...—No pude terminar de decir aquello, sentí su suave mano pasar delicadamente por mi mentón, obligándome a girar mi rostro suavemente a su dirección.

Lo miré, y eso solo hizo que mi corazón latiera mas fuerte y rápido, tenía cicatrices por casi todo su rostro y parte de su nariz desecha, y aun así lucía perfecto para mi...

Quiero besarlo

Como si pudiera leer mis pensamientos como un libro, se inclino suavemente hacia mi, quedando a solo una corta distancia de mis labios, sentía su respiración y como abría y cerraba los labios, necesitaba tenerlo..

—¿P-puedo?— Su voz me trajo a la realidad, ¿estaba pidiendo permiso para besarme?, incluso en este momento se comporta como todo un caballero, no me resistí.

Me lancé a sus labios desesperada por tocarlos, subió ambas manos a mis mejillas haciendo que me acercara aun más a el profundizando aquel beso, separé ligeramente mis labios dejando que aquel beso se tornara más apasionado.

Sal estaba llevándome al infierno al pecar de esta forma.

Pase mis brazos alrededor de su cuello, pegando mi cuerpo mas cerca de él, reacciono tomando mis caderas con fuerza, subiendo y bajando sus manos como si quisiera grabar mi silueta en su mente, memorizándola. Me aparté por la falta de airé, Sally tenía el rostro sonrojado y con la mirada perdida, me miro y yo baje mi vista a sus labios, volvió a atraerme hacia él capturando mi boca con la suya volviéndome a besar de forma desesperada.

Cuando por fin nos separamos, me miró fijamente.

—Realmente quería besarte.—Me dijo haciendo que mi cara se coloreara de un color rojo. 

—Yo quería que lo hicieras.—Confesé de igual forma.

—Pensé que no...—No lo deje continuar pues puse una de mis manos en su mejilla y la acaricie suavemente.

—Desde ayer en mi habitación, esperaba que lo hicieras—Sonrío mientras se le iluminaban los ojos— En realidad desde hace tiempo esperaba que lo hicieras— Me sinceré, y fue suficiente para que Sal se acercara a mi y me diera un beso corto, lo cual no mentiré me hizo sonreír como idiota—Estas loco Sally Face.—Me tomo de la cintura poniéndome en su regazo en un movimiento rápido— Definitivamente estás loco...

—Es muy probable que sí— No mentiré diciendo que no tuve mil escenarios en mi cabeza, y sin duda lo que paso fue ni remotamente lo primero que esperaba. Nos quedamos un rato más hasta que el teléfono de Sal sonó. 

"¿Viejo donde estas? ¿Esta ___ contigo? llevamos buscándolos casi 30 minutos"

—Oh, oh, estamos en problemas— Bromeo y tomo la prótesis de mi regazo para volvérsela a poner no sin antes darme otro beso que nuevamente me hizo sonreír como tonta. 

Me levanté de su regazo y le ayude a levantarse, me tomo de la cintura hundiendo si cabeza en mi cuello, el frío de la prótesis hizo que mi piel se erizará, pase mis manos por su espalda baja.

—¿Entonces estamos saliendo?—Murmuro aún en mi cuello.

—Creo que eso es obvio Sally—Se despegó de mi y tomo mi mano, entrelazando nuestros dedos.

—¿Les diremos a los demás?—Pareció meditarlo un segundo y luego me miró.

—No me importaría decirles...—Le sonreí y asentí. Caminamos de regreso al instituto y nos separamos para que cada quien se fuera por su lado.

Estaba emocionada pero nerviosa por como los chicos reaccionarán al saber que Sal y yo estamos comenzando a salir, bueno si es que puede llamarse así.

Sabíamos que ambos tenemos sentimientos el uno por el otro, pero lo suficiente para decir que estamos ¿saliendo?

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Hola, te invito a revisar mis otras obras si te interesa "My metal family" "Encanto" o "Percy Jackson"

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Vivan las inseguridades que hacen darle más sazón a la historia B)