♪𖠌Fᴀᴍɪʟʏ 𝖪𝖺𝗄𝗎𝖼𝗁𝗈𖠌♪

𝙏𝙞𝙚𝙢𝙥𝙤 𝙘𝙤𝙣 𝙡𝙤𝙨 𝙩𝙞𝙤𝙨߷

Narra omnisciente:

Hoy los pequeños Haitani está vez  iban en el auto de sus padre para dirigirse al hogar de su tío Manjiro.
Por qué?
Pues sus padres habían tenido un contratiempo en sus trabajos a los cuales los llamaron urgentemente.
Tenían planeado pasar el domingo en casa mientras veían TV y jugaban algunos juegos de mesa, pero no pudo ser así.
Los Kakucho no tuvieron más que dejar a sus pequeños con sus tíos, en un principio los iban a dejar con Emma, pero está estaba ocupada haciendo unas tareas pendientes, también veían como opción a Shinichiro, pero estaba ocupado organizando su tienda, así que tuvieron que optar por ir con Manjiro.
Izana no confiaba del todo en su hermano menor, ya que este solía ser muy despistado e irresponsable, pero lo bueno es que estaba el novio de Manjiro, Ken, más conocido como Draken,siendo el mucho más responsable que su pareja.

Pasado unos minutos, ya la pareja había llegado al hogar del rubio cenizo.
El moreno bajó del auto junto a el par de rubios, dirigiéndose a la entrada de la casa del  Sano menor.
Izana tocó la puerta un par de  veces siendo abierta por un hombre alto de cabello negro atado dejando caer unos cuantos mechones adelante rapado a los lados dejando ver un tatuaje de dragón.

—Ah, Izana, hola.
Mikey está  secándose el cabello-.dijo amablemente el hombre alto, apesar de tener una voz grave, podía sonar amable y reconfortante.

—Hola Draken-san, está bien.
Me gustaría pasar a saludarlo pero estamos apresurados-.dijo con una sonrisa el moreno para luego agacharse a la altura de sus hijos—Bueno niños, ya nos tenemos que ir.
Pórtense bien con el tío Manjiro y el tío Draken, si?
Volveremos luego -.dijo, para luego darle un beso en la frente a los dos rubios,  se levantó y volvió al auto de su esposo mientras se despedía de sus hijos y de su cuñado con la mano, para luego desaparecer en la distancia.

El peli-negro miro a los pequeños con una sonrisa para luego hacerse un lado para que pasarán.
Al estar adentro escucharon pasos que venían bajando las escaleras, apareciendo Manjiro con el cabello amarrado como siempre y con una sonrisa.

—Hola mis sobrinos hermosos-.dijo con un tono juguetón el rubio cenizo para abrazar de forma algo fuerte a sus sobrinos—Como han estado?-.

—Mikey, sueltalos, los estás apretando-.dijo regañando el mayor a el rubio cenizo mientras se cruzaba de brazos.

—ay ni que los fuera a matara-.dijo el el de ojos negros para luego soltar a los pequeños.—Que tal están niños?

—Estamos bien tío Manjiro-.dijo el Haitani mayor mientras le sonreía a su tío, no lo admitía, pero admiraba mucho como era su tío, siempre tan libre y juguetón.

—Eso me alegra mucho mis niños.
Ah, cierto.
Niños, se que ya saben quién es pero, el es mi novio y futuro esposo, Ken, también llamado Draken y por mi Ken-chin.
El hombre más genial y cool que verán en sus vidas-.dijo el rubio señalando orgulloso a su pareja que ponía su mano en su frente por la presentación que le estaba dando a los pequeños.

—ni siquiera estamos comprometidos mikey.
Bueno, como su revoltoso tío dijo, yo soy su tío Ken, pero pueden llamarme Tío Draken o solo draken.

—Esta bien tío Draken-.dijeron a la par los niños.

—y bien, que quieren hacer niños?-.dijo Manjiro mirando a los pequeños.