LA AMANTE DEL LOCO

25° TOUYA TODOROKI (CAP)

Tomura me miró preocupado, yo me quedé mirando al suelo triste, intentando suspirar hondo para poder relajarme. Mi corazón estaba bombeando con fuerza y nervios, no quería recordarlo, me mataba saber que nunca más celebraría un cumpleaños con mi hermano mayor por culpa de un borracho agresivo.

Shiro- Ah...- suspiré hondo mientras me levantaba de la cama y me iba hacía el baño

Tomura- Angelito mío- murmuró preocupado mientras se levantaba varios pasos después de mí

Antes de que Tomura pudiera entrar al servicio cerré la puerta y eche el pestillo, Tomura intentó entrar en la habitación pero no podía. Me eché agua del fregadero para poder limpiarme las lágrimas que deslizaban lentamente por mis mejillas.

Tomura- Shiro, déjame pasar por favor cariño- oí su leve voz detrás de la puerta mientras intentaba entrar

Shiro- ... - pero me quedé en silencio

Cerré el grifo y me seque la cara con una toalla de mano que había al lado del fregadero, después me acerque a la puerta del servicio, le quite el pestillo y dejé que Tomura entrará en el servicio. Cuando Tomura entró se acercó a mí y envolvió mi cintura con sus brazos mientras yo rodeaba su cuello con los míos.

Nos quedamos abrazados cálidamente durante lo que para mí fue una eternidad, yo escondí mi cabeza en su hombro izquierdo intentando no llorar mientras sus brazos me estaban dando refugio, calor, amor y la estabilidad emocional que yo necesitaba en esos momentos de dolor y de pérdida.

Nunca antes me había afectado la muerte de mi hermano porque nunca antes había tenido sentimientos, tan solo encendía una vela enfrente de una fotografía suya, después de eso le cantaba la canción de cumpleaños feliz y le ponía enfrente de la fotografía un pequeño pastelito con una vela de cumpleaños.

Luego de estar más de diez minutos abrazados Tomura y yo nos separamos lentamente, nos miramos a los ojos, y nos dimos un tierno beso en los labios, sintiendo sus cálidos suspiros, sus manos puestas en mi cintura acercándome a su cuerpo, mis manos estaban puestas en sus hombros, sintiendo como mi dolor se minimizaba al saber que estaba él conmigo, a mi lado, y que no estaba sola en esta vida.

Nuestros labios se separaron lentamente, sin abrir los ojos, y se volvieron a unir lentamente, con ternura, con dulzura, con amor, con pasión, arreglando todo lo que estaba roto para que pudiera estar completo.

Mi piel se erizo cuando sentí como su lengua rozaba la mía con tanta lentitud, ambos estábamos sonrojados. De mientras nos estábamos besando deslice mis manos por sus hombros y cuello hasta hundir y enredar mis dedos en su cabello.

Volvimos a separar nuestros labios y los volvimos a unir con ternura, las mariposas de mi estómago estaban haciéndome cosquillas por las costillas con sus delicadas y finas alas que me rozaban las paredes de mi cuerpo con leves aleteos.

Tomura deslizó sus manos en mis piernas y me cogió en brazos sin dejar de besarnos tiernamente, aquello me estaba dando la vida que yo necesitaba, me había devuelto las ganas de seguir con este camino llamado vida, había sido la luz de mi farolillo en medio de la oscuridad, la luna de mis noches estrelladas y el sol de mis días despejados.

No sé cuanto tiempo estuvimos entregándonos amor y todo lo que teníamos, pero después de unos minutos nos separamos lentamente, ambos abrimos los ojos mirándonos a los ojos, sonrojados y sonriendo.

Shiro- Te amo- escondí mi cabeza en su hombro izquierdo y envolví su cuello con mis brazos

Tomura- Yo también te amo mi angelito- me dijo dulcemente- ¿Quieres descansar?- me preguntó tranquilo mientras me llevaba hacía la cama en brazos