VI

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Mala idea.

Sin duda, invitar a Rodrigo a bailar con unos tragos de más encima, había sido una pésima idea.

Básicamente por que el menor aprovechaba cualquier pequeña oportunidad para provocar al mayor y pegarse a el. E Iván no se quedaba atrás, ya que cada vez que podía, posaba sus manos sobre las caderas del ojiverde intentando que sus cuerpos se juntaran aún más.

Sin duda, había sido una pésima idea.

- Aquí hace un poco de calor, vamos afuera a tomar el aire- gritó Carrera para que el contrario lo oyera.

- Dale.

Sin duda, sabía que su plan se había ido a la mierda en cuanto acabaron debajo de casa de Rodrigo.

El mayor fue el primero en lanzarse, atrapando los labios del ojiverde y moviéndolos bruscamente, buscando tomar el control de aquel beso.

El menor no se quedo atrás y pronto su lengua estaba recorriendo la boca del contrario a la vez que descansaba las manos el el cuello del pelinegro.

Iván agarró al ojiverde de la cintura pegándolo mas a su cuerpo y separándose del beso. El otro soltó un jadeo de frustración pero no tardo en dejar caer su cabeza hacia atras al notar la boca del otro succionando y dejando leves mordidas en su cuello.

El pelinegro no dudo en agarrar los muslos del contrario, alzándole y pegándole contra la pared, iniciando de nuevo un salvaje beso.

- Joder Ivi- El menor necesitaba con urgencia ser tocado o sentía que se moriría por el dolor de su entrepierna.

El contrario entendió el reclamo y alzó levemente la sudadera de Rodrigo, comenzando a estimular uno de sus puntos sensibles, los pezones.

Mientras tocaba y estrujaba esos pequeños botones rosados, retomó los besos y mordidas en el cuello del menor, logrando que soltara un pequeño gemido.

- Mierda Rodrigo, te juro que quiero seguir, pero no creo que este sea el lugar más acertado.

El contrario asintió y ambos subieron rápidamente las escaleras llegando a la puerta de la casa del menor.

Rodrigo sacó sus llaves intentando abrir la puerta, cosa que se le complicó ya que Iván no paraba de besar su cuello mientras apretaba su cintura.

Cuando el menor logró abrir la puerta rápidamente ya tenía al mayor apresándolo contra la puerta mientras terminaba de cerrarla y alzaba a Rodrigo apretando sus nalgas.

El mayor hizo una pausa para quitar la camiseta del contrato y quitarse la suya propia, y aunque el menor ya había visto al pelinegro sin camiseta, no podía evitar quedarse embobado mirando su cuerpo. El contrario al notarlo soltó un risita mientras daba pequeños besos por el pecho del menor

- Iván, joder, necesito que me toques.

El contrario decidió jugar un poco más con su paciencia y desabrochó los pantalones del menor muy lentamente a la vez que dejaba leves caricias y alguna que otra lamida.

- Porfavor Ivy

- Porfavor que?- sonrió de lado.

- Porfavor tocame ya.

Iván terminó de bajar los pantalones del ojiverde e hizo lo mismo con el boxer, dándole igual donde fuesen a parar y llevando al menor a su habitación.

Lo recostó con cuidado sobre su cama y lo beso de nuevo intensamente, comenzando a llevar el rastro de besos húmedos por su cuello hasta detenerse el los pezones contrarios, estimulando uno con su mano mientras, con su lengua, jugaba con el otro.

𝘿𝙧𝙞𝙣𝙠 - RodrivanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora