Overthrown

4

Chuuya entra a su apartamento, deja su abrigo en el perchero, se quita los zapatos y se sientan en el sillón al lado de la ventana para leer un poco.

—¿Qué haces aquí Dazai?— Pregunta con calma, no quiere hacer un escándalo y que el resto de la ADA se entere, prefiere evitar que Ranpo y Yosano le hagan burla.

Dazai deja el sombrero en su lugar antes de ver a la dirección de Chuuya.

—Con el dinero que tienes me esperaba algo más bonito —

—Me gusta la compañía, mudarme a otro lado significaría volver a estar solo —

—Pareces querer mucho a estas personas —

—No creo que deba decirlo, pero lo haré igual, si les tocas un solo pelo a estas personas te juro que esta vez mis intentos de asesinato serán serios—

—¿Piensas que esa es una amenaza para mí?—

—Dazai tu bien sabes que si quiero que la muerte de alguien duela puedo volverlo un infierno, no me provoques—

Dazai se encoge de hombros.

—Tranquilo, no planeaba hacer algo de todos modos— Dazai se sienta en el futón —Sería demasiado aburrido—

—¿Y cómo están Yumeno y Akutagawa?—

—Respete tu tonto ritual del helado, lamentablemente ya no queda más dinero—

Chuuya cierra el libro.

—Solo toma más de mi cuenta, sé que rastreas mis movimientos de esa forma hace meses—

—No entiendo el punto de comprarles helado —

—Como no pude ayudarlos, quiero que al menos sepan que existe un adulto que los va a tratar como seres humanos —

—Pero te fuiste —

—Tuve que hacerlo —

—No, nadie que obligaba a hacerlo, fue tu decisión —

—¿Realmente viniste solo para esto?—

Dazai ríe viendo los hombros de Chuuya tensos cómo la cuerda de un violín.

—No, para nada, yo hubiera hecho lo mismo — Dazai se levanta y va hasta Chuuya —Vengo a hacer cosas más divertidas —

—¿Como cuáles? —

Dazai saca algo de su abrigo y lo coloca sobre la mesa de café.

Chuuya lo ve y nota que es una botella de vino.

—¿Te gusta?—

Chuuya la toma y la analiza.

"Un Petrus" piensa.

—¿Por qué?—

—Por los viejos tiempos, eso es todo—

—Sabes bien que no rechazaría una buena copa de vino, incluso si viene de ti— Chuuya sonríe —Pero ya no soy la persona que tú conoces, vete—

Chuuya se levanta.

—No— Responde —Mori aún te permitirá volver a la mafia— Dazai toma sus manos —Vuelve conmigo Chuuya, Kouyou te extraña, Yumeno te extraña, incluso el jefe y yo te extrañamos —

Chuuya se suelta.

—Dazai, te conozco lo suficiente para saber que la mitad de la oración es una mentira— Chuuya camina hacia un armario y saca una manta y una almohada —Pero, por otro lado, estoy muy cansado para enojarme o pelear contigo, me voy yo—