"Si quieres paz, lucha por la justicia"
UNA SEMANA ANTES
Mi mirada está fija en el símbolo de la revolución. Un puño levantado, con sangre goteando por todo el brazo. Fue la primera cosa que se decidió y en la que estuvimos de acuerdo. El puño representa al pueblo que lucha unido, y la sangre representa a todos los caídos. Había sido idea de uno de nuestros líderes y ahora está pegada en la pared del representante de Rusia, uno de los cuatro representantes de Asia, quien ahora tiene la palabra.
Con el ceño fruncido, dejando sus cejas blancas en una posición desafiante, el viejo hombre con ropa militar expone su punto alzando la voz.
— No podemos preparar una guerra como esta en tan solo una semana, es imposible, sin decir que es descabellado e irresponsable
— ¿Y quién nos asegura que la información brindada por la señorita Montenegro es correcta?
El representante de África toma la palabra y yo intento permanecer con la mirada fija, sin expresión, pese a que este poniendo en duda mi palabra.
— ¿Cómo puedes aguantar estas cosas Camille? — susurra mi hermano. Levanto la vista, hasta verlo frente a la mesa, rodeado de nuestros hombres de confianza — Siempre están dudando de todo.
Agradezco que el micrófono de mi laptop este apagado, y ellos no escucharan nada. Llevo mi mano a mi boca simulando que me quito un cabello de mi cara, mientras le respondo
— Si no dudaran, entonces no estarían sentados ahí Bruno
En este mundo, la confianza era algo difícil de conseguir, y más cuando había tantos humanos traidores. Los micrófonos se encienden y vuelvo mi atención a la pantalla, viendo como los veinticuatro representantes hablan al mismo tiempo. Oscar levanta la mano, pidiendo calma y todos le hacen caso, es el más respetado y admirado por todos. Él controla casi el 60% de Europa y el otro 40% es liderado por mí.
— Por favor, colegas, conservemos la calma y escuchemos a Camille primero, porque si tiene razón, es la oportunidad que hemos estado esperando desde hace casi cuatro años
Me sonríe y yo le sonrío encendiendo mi micrófono.
Toda mi vida, desde que era una niña, me formaron para ser quien soy ahora. Una líder, y una mujer rodeada por hombres, que no se hace menos. Una mujer que pelea más fuerte, y más duro que cualquiera. Soy una de las líderes de esta revolución. He luchado con sudor y sangre todos estos años, rescatando y capacitando humanos para ser soldados y lo había conseguido. Por eso cuando empiezo a hablar sé con certeza que ellos van a hacer lo que yo les proponga.
— Hemos luchado por años, para sobrevivir — enfatizo — Lo que yo les vengo a ofrecer es la oportunidad de tener una última pelea, una última que cambiará todo y va a restablecer el orden. No más sobrevivir caballeros, es tiempo de vivir y nuestra única esperanza será esta — entrelazo mis dedos poniendo mis hombros derechos — Salvar a la lobiza es lo único que nos puede salvar y realizar un ataque global, nos devolverá nuestro mundo. No tengo dudas, tengo certezas. Mis soldados y yo atacaremos. Los invitamos a unirse a nosotros, para volver a ser libres y recuperar nuestro mundo.
El sonido del silencio absoluto pone nervioso a cualquiera, pero no a mí. Con ver la mirada de Oscar, sé que he ganado. Cuando el líder de América del sur pone a votación mi propuesta y todas las manos se levantan, sonrío.
— Siempre me sorprende tu capacidad para liderar todo hermana — dice Bruno luego que cierro la laptop. Suspiro poniendo mi mano sobre su hombro al levantarme y salir de la tienda de campaña.
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Sangre de Lobo
Ciencia Ficción"Nuestro mundo ya no es más nuestro, todo ha cambiado" Liz es una de las pocas sobrevivientes que luchan por resistir, una de las pocas que aún es humana. En un mundo casi destruido, seguir oculta en los bosques ya no es una opción para Liz y sus am...