Mientras tanto...

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Varios rayos de luz comenzaban a asomarse por mi ventana pegando directamente en mi cara, había amanecido más pronto de lo que esperaba, sentía que apenas hace minutos había quedado noqueada profundamente, me movía fastidiada por toda la cama y no lograba encontrar el lugar perfecto para seguir durmiendo, mi alarma empezó a sonar y comencé a irritarme por el sonido que desprendía.  ¿Por qué sonaba la alarma? Espera, ¡EL TRABAJO, NO PUEDE SER! – dije mientras me levantaba rápidamente pero un dolor insoportable me detuvo en plena acción, la cabeza me estallaba y me resultaba difícil mantener si quiera los ojos abiertos, este era un breve recordatorio de no volver a tomar nunca más.

Mientras lograba mantener el equilibrio para poder ponerme de pie, observé en mi mesa de noche una nota con un vaso de agua y dos pastillas a su lado.

"Tu vecino te ha salvado por doble ocasión, tomate esto te sentirás mejor. - KT

Mi mente comenzó a recordar lo que había pasado la noche anterior, rápidos flashbacks inundaron mi cabeza abrumándome por completo, ¿Cómo es que pude decirle a Jungkook esas cosas? - Pensaba ¿Qué pasaba por mi cabeza?

Espera... Taehyung... ¿Cómo deje que me cargara hasta mi cama? y... ¡ME AYUDARA A DESABROCHAR MI BLUSA! ¿QUE CARAJOS PASABA POR MI CABEZA? Sin duda la vida había rifado la peor pesadilla en vida y yo tenía el boleto ganador. Hundí mi cara sobre una almohada para gritar fuertemente, maldita sea el momento en el que acepte ir a tomar unos tragos... gracias a eso ahora me encontraba en una posición vergonzosa ¿Cómo es que llegaría a la oficina hoy y vería a Jungkook a los ojos? ¿Qué pasa si me topaba a Taehyung una vez más y quería hablar del tema?  Solo había una manera de actuar y era hacerme la que no recordaba nada. Sí, eso haría, borrar cassette.

....

POV Taehyung:

______
Estos últimos días en la tierra habían sido los más cansados desde que tenía uso de razón y trabajaba como guardián,  los protegidos demandaban mucho tiempo y tenía pocas horas para subir al Olimpo, ha decir verdad desde que paso mi incidente con Jimin no había subido a casa a contarle a Padre lo sucedido.

– En conclusión es un idiota, siempre tengo que resolver sus problemas y estoy cansado de que sea así. -suspiré enojado mientras le contaba a Padre la serie de acciones que me obligaron a agregar a una persona más a mi lista de rondines.

– No sé cual era su obsesión con ella, si tan solo no hubiera revelado su identidad no estaría yo aquí contándote todo esto, incluso no estaría cerca de una humana tanto tiempo.

– ¿Has terminado de quejarte? - dijo Padre con un semblante serio.

– ¿Estas escuchando si quiera  lo que acabo de contarte? Jimin es un dolor de cabeza aun exiliado de casa ¿Por qué aun tiene sus poderes?

– Sigue siendo un ángel.

– ¿A costa de qué si ya no vive más aquí? Ahora quiere matarme y de paso dañar a la humana que estoy protegiendo.

– Él era su guardián asignado – soltó Padre sin más.

¿Qué acababa de decir Padre? ¿Cómo es que mi hermano era el  guardián designado a Srita. Sin Modales? Algo tenía que estar mal, Jimin actualmente quería dañarla y es por eso que la estoy protegiendo. Los cálculos no daban, era claro como el agua que esto debía ser un error.

– ¿De qué estas hablando? Jimin hace tiempo que no esta por aquí, por consecuencia no podría tener protegidos designados. – solté molesto. ¿Por qué estaba molesto? ¿Por qué me molestaba la idea de saber que mi destino no era ser el guardián de aquella castaña y en el peor  de los casos le correspondía a mi hermano?

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