Un Amor de Verdad

Cap No. 35 Mi meta.

Y allí estaba, el chico de cabellera verde, ojos color esmeralda y pecas en su rostro. Tirado en un charco de sangre, su mirada casi al borde del desmayo, sus brazos inutilizables al igual que sus piernas.

Todos sus huesos rotos por la tremenda pelea que había tenido ante lo que parecía el nuevo All For One.

La batalla que había tenido fue extremadamente letal, la liga había escapado de nuevo, hubieron muchas bajas en ese enfrentamiento que tuvieron contra los villanos.

Había perdido, hizo todo lo que podía, pero no fue suficiente, movió su rostro un poco y el dolor invadió su cuerpo.

No podía creer lo que veía, su mirada que decía que en cualquier momento se iba a desmayar, estaba llena de miedo y frustración.

A su derecha, su maestro Aizawa estaba sin una de sus piernas y sin uno de sus ojos.

Apretó los dientes, algo le decía que si daba la vuelta a su lado izquierdo vería algo similar, pero aún así lo hizo, con el dolor de su cuerpo, mientras su corazón bombeaba mucho más por el miedo de encontrar algo que no le gustara.

Y lo que vio fue a varios de sus compañeros estaban allí, rodeando a algo.

-MIDNIGHT-SENSEI- escucho el grito lleno de dolor y tristeza de su compañero Mina.

Apretó su labio hasta hacerlo sangrar, si tan solo fuera más fuerte, las lágrimas comenzaban a salir de sus ojos.

Si fuera tan fuerte como All Might nada de eso hubiera pasado.

Se lamentaba mientras la impotencia y la tristeza se reflejaba en su rostro, no quería involucrar a nadie mas, no quería tener que ver esto cada vez que ocurriera algún enfrentamiento contra ellos.

-Deku- escucho una suave vos.

El peliverde abrió sus ojos, su rostro estaba con una capa de sudor, sus ojos estaban brotando lágrimas y su respiración era agitada.

Volteo su rostro y vio a una peliblanca.

-Eri-chan-

-Tenías... Esa pesadilla?- le preguntó preocupada.

Este solo asiente y da un gran suspiro.

-Desde que te conozco siempre has tenido que sufrir- la pequeña agarra sus ropas con fuerzas y las lágrimas comienzan a salir de sus ojos -Por qué?- preguntó.

El peliverde solo baja la mirada.

-Ha pasado más de un año desde que me salvaste... No entiendo por qué te ocurre esto- la niña limpia sus lágrimas pero más salen de sus ojos.

-Yo mismo tome este camino Eri-chan... Ya te lo había dicho-

-Lo se pero, Deku por qué de todas las personas tuviste que ser tu... La persona más amable y buena que conozco- la niña no aguanto y cayó de rodillas para llorar más fuerte.

Izuku se acercó a la niña y la abrazo.

-Lamento hacerte pasar por esto... Pero tengo que hacerlo para que no se cumpla nada de lo que ocurre en mi pesadilla- la aprieta con cariño contra su pecho.

-Te juro que pronto seremos felices, ambos- le sonríe.

La pequeña asiente y después de unos minutos se queda dormida en sus brazos.

El peliverde la dejo en su cama y salió a un pequeño balcón.

Había pasado ya casi se iban a ajustar los dos años desde que dejó la academia, faltaban solo unos pocos meses.

Que sería de sus antiguos compañeros. Seguro se estaban esforzando mucho más que antes, era su último año.

Dio una sonrisa suave.

Había hecho tanto en este tiempo, tanto cosas malas como buenas.

Ahora era un delincuente uno de los más buscados en Japón. Un peligro para la sociedad.

No estaba orgulloso de eso, pero fue necesario.

Pero ya era momento de mover sus cartas, había sufrido por este momento, había estado soportando todo por lo que iba a ocurrir ahora.

Había conseguido aliados, solo faltaba algo más. Tenía que persuadir a una persona nada más.

Con esfuerzos hizo que la liga no volviera a atacar a la academia, no quería involucrar a nadie cercano a él.

Acabo con Gigantomachia, una de las causas del desastre que el había presenciado. Pero no había salido en una pieza toco su pecho donde tenía una enorme Cicatriz, además de que su brazo derecho había tenido muchas repercusiones, pero Eri ya podía manejar un poco su kosei y había rebobinado un poco su brazo haciendo que el daño causado en esa batalla nunca hubiera ocurrido en su cuerpo.

Suspiro y vio a la pequeña la cual estaba durmiendo de nuevo.

Estaba haciendo esto por más personas que el ama, por las cuales considera que son su familia.

-Es tiempo de mover los hilos... Veamos de que eres capaz All For One- dijo serio.

Saco su celular y marcó un número.

-La siguiente semana comenzaremos a movernos... Será arriesgado, pero lo haremos, nos hemos preparado para este día- corto y vio al cielo el cual comenzaba a teñirse de anaranjado por el amanecer.

Que estaría haciendo ella, la chica a la cual ama, cerró sus ojos para recordarla, sus conectores, su cabellera violeta y sus hermosos ojos.

Esbozo una sonrisa suave y luego se desvaneció, que sería de él al momento de terminar todo, como lo recibirían ellos, los había tratado de una fuerte manera.

Sacó esos pensamientos de su cabeza y se preparo para salir.

Huy sería un largo día.

[Buenas noches, días, tardes. Espero que estén bien mis estimados lectores. Lamento mucho la espera, pero no había tenido tiempo, además de inspiración. Pero bueno, les pido de favor su VOTO (estrellita 🌟) y su comentario sobre que les ha parecido el Cap. De hoy. Nos vemos a la próxima]