Mientras Santos y Lupita estaban disfrutando del picnic, Diego le contó todo a Roberta lo que sabía respecto a Matías y Mía, tal cual le había contado a Giovanni y Tomás la noche anterior.
- Roberta: ¡Híjole! Ahora tiene sentido que Matías esté pegado a Mía como un chicle, pero yo no creo que la Barbie vaya a dejar a Mike. Lo ama, de eso estoy segura.
- Diego: Yo también creo lo mismo, pero que va a causar problemas entre ellos, sí. Miguel es muy celoso y Matías no se alejará de Mía.
Terminaron las clases del día en el Elite. Mía solo había dormido el resto de la tarde, y se tomó una pastilla para seguir durmiendo por la noche. Por su parte, Miguel estuvo tan concentrado en los temas de la empresa, que perdieron la noción del tiempo, quedándose trabajando hasta muy tarde, solo se dieron cuenta la hora que era, al momento que Alma llegó a casa.
- Alma: ¡Mi amor! ¡Hola!, ¿me extrañaste? (gritó, haciendo un eco en toda la sala, lugar en el que estaban trabajando Franco y Miguel).
- Franco: Hola mi vida, se nos pasó la hora trabajando, mañana tengo una presentación importante, pero algunos números no cuadraban, por eso le pedí a Miguel que venga para que me ayude.
- Alma: ¡Qué barbaridad!, Pobre muchacho, mira la hora que es, debería estar durmiendo en el colegio, ¿han cenado?
- Miguel: Hola Alma, no la verdad no...y si tengo un poco de hambre (un poco avergonzado, pero tenían bastante confianza).
- Alma: Peter ya debe estar descansando, veré si puedo preparar algo rápido, y hoy señorito, se queda a dormir aquí, mañana temprano yo lo llevo al colegio.
- Miguel: Alma no quiero molestar, yo puedo...
- Alma: Shh, es lo mínimo que podemos hacer, ¿verdad amor?
- Franco: Por supuesto, puedes quedarte en la habitación de Mía, anda date una ducha caliente y regresas para cenar.
Miguel siguió las instrucciones de Franco, disfrutaron de una rica cena los tres. Miguel se sentía muy cómodo con Alma y Franco, solo faltaba Mía para completar una velada perfecta, y es que sentía que esa era su familia. A la mañana siguiente, Alma lo dejó en el Elite Way School, un poco tarde, faltaban 2 minutos para que suene el timbre, ya todos estaban en el salón, excepto Mía que llegaba tarde, más tarde que Miguel.
- Maestra Hilda: Buenos días muchachos, por encargo del Sr. Gandía, hoy tendremos una evaluación sorpresa, para medir los conocimientos aprendidos el año pasado, será la primera nota de la materia.
- Todos: ¡NO MAESTRA!, ¡POR FAVOR!, ¡QUE SEA LA PROXIMA CLASE!
Maestra Hilda: ¡Silencio!, ¡Silencio!. Como se que no están preparados, los que quieran subir la nota de esta evaluación, podrán realizar un trabajo sobre la Independencia de México.
- Lupita: Muchísimas gracias Maestra.
Se escucharon murmuro de queja, pero ya no podían hacer nada más y se empezaron a repartir las evaluaciones.
- Mía: Lo que me faltaba, dijo con voz muy baja. Pero Matías, que estaba a su lado, la escuchó.
Matías era un buen alumno, siempre lo había sido, así que hizo, lo que tantas veces había hecho. Empezó a resolver el examen a todo velocidad, y cuando terminó, giró levemente la cabeza, pudo ver que el examen de Mía estaba completamente vacío. Así que en un descuido de la maestra, tomó velozmente el examen de Mía y lo cambió por el suyo. Todo fue tan rápido, que Mía no pudo hacer nada, finalmente entendió que Matías, le hizo ese favor que durante tantos años había hecho, ella le sonrió y gesticuló un "gracias".
Como era de esperarse, Miguel observó todo, y se enfureció, no soportaba a Matías, pero lo que más le molestaba, es que tenía muchas atenciones con Mía que el nunca había tenido... jamás había ayudado a Mía con examen o a estudiar, excepto cuando le pusieron de castigo elaborar un ensayo, pero eso había sido por su culpa. Miguel recordó cuando Sol le pidió ayuda con literatura y lo mucho que Mía se había molestado por eso...soy un idiota, pensó.
Acabó la hora de clase, y con ello el examen, Miguel seguía enfadado con Matías y con el mismo, así que prefirió no acercarse a Mía, quien estaba conversando con Celina y Vico.
- Vico: Miguel está con una cara...
- Mía: Seguro está molesto porque Matías me dio su examen (suspiró).
- Celina: Como en los viejos tiempos.
- Mía: Sí, Celi, pero me gustaría que mi amistad con Matías no molestara tanto a Miguel...
La siguiente clase era Deportes, fútbol para los niños y danza para las niñas.
La clase de danza se llevó a cabo con total normalidad, era mucho más sencillo ahora que Mía y Roberta eran hermanas y se querían como tal. Sin embargo, la clase de los niños, era un campo de batalla. Luego de los ejercicios de calentamiento y control de balón, el profesor decidió terminar la clase con un partido amistoso. En Londres, Matías pertenecía a las selecciones de natación y básquet, el fútbol nunca fue su fuerte. Así, se eligieron a dos capitanes: Diego y Miguel, al final de la elección quedaron Matías y Teo, Miguel eligió a este último (con una sonrisa burlona) y Matías fue al equipo de Diego.
- Matías: No pues, gracias amigo, por elegirme, dijo irónico.
- Diego: Mi Rey, sé que el fútbol no es tu deporte (riendo).
Comenzó el partido, Miguel era el mejor jugador en la cancha, lo que sorprendió es que Matías no era de los peores, su capacidad física le ayudaba mucho, el problema era con el control de balón. Miguel pasó a Santos el balón, quien recorrió media cancha, devolviéndolo a Miguel, quien de una gran patada con la pierna derecha marcó un gol. Le tocaba al equipo de Diego retomar el juego y así, Tomás fue avanzando con el balón, viendo a un solitario Matías que le extendía la mano, atento a esto Miguel corrió a toda velocidad para marcarlo, Matías logró controlar el balón y 2 segundos después que le dio pase a Diego, Miguel lo "barre" golpeando con ambos chimpunes las canillas de Matías, quien terminó ensangrentado y con mucho dolor, pero más que dolor, sintió ira, pues consideraba que había sido adrede.
Miguel fue el primero en levantarse, sin si quiera mirar a Matías, que había dado un grito de dolor, alejándose se la escena, no se esperaba que al cabo de unos pasos, recibiría un empujón de Matías que lo dejó con la cara en el suelo.
- Matías: ¿Cuál es tu problema, imbécil? mirando a Miguel que yacía en el pasto.
- Miguel: (Parándose casi de inmediato) Si no sabes jugar futbol, puedes ir a practicar danza con las niñas (restándole importancia lo que había sucedido).
- Matías: (Se esbozó una media sonrisa en la cara de Matías, reflejaba ironía) Atacar por la espalda, no es de hombres. Realmente no se qué hace Mía contigo.
Y esas palabras desatarían la furia de Miguel, que hasta el momento había contenido...
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Muchas gracias por sus comentarios. Amo leerl@s 🥰🥰
Mañana tendremos 1 o 2 capítulos más 🥳
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6to año Elite Way School (Mía y Miguel)
FanfictionLo que sería la continuación de Rebelde. Es el último año de nuestros chicos del Elite Way School, la historia se basa principalmente en Mía y Miguel, todos los demás son personajes secundarios ...a excepción de Matías ... el amor de infancia de Mía...