Double Life (Max Mayfield y tu)

El Cadaver

POV Sam

Me despierto a la mañana siguiente sintiendo un gran dolor de cuello. Me siento, dándome cuenta de que me encuentro tumbado en el suelo, dentro de un saco de dormir y ahora soy consciente de la razón de mi dolor de cuello.

Miro hacia la cama, encontrándome con una Once todavía dormida y tapada hasta el cuello con el edredón.

Suspiro tranquilo, viéndola dormir tranquilamente y sin que se haya escapado. Anoche, mientras le preparaba la cama y sacaba el saco de dormir del armario. Me dijo que quería ir a casa de Mike, para contarle que Will sigue con vida y tratar de contactar con él.

Pero me había negado, ya que era muy tarde e iba a ser muy peligroso salir de casa y sobre todo con papa buscándola. Porque si de algo estoy seguro, es de que papa estará buscando a Once y que en cualquier momento podría aparecer.

Así que le prometí que a la mañana antes de ir al instituto lo primero que haría seria llevarla a casa de Mike y dejarla con él para que este mas tranquila. Y veo que me ha escuchado.

Me levanto del suelo y salgo de la habitación en sigilo, para no despertarla y para que nadie en casa me escuche.

Camino hacia la habitación de mi hermano pequeño, viéndolo completamente desparramado en la cama y roncando con la boca abierta.

Sam: Vergonzoso.- susurro negando con la cabeza y busco su walkie. –Mike? Mike me escuchas?- pregunto por el walkie de la manera mas silenciosa posible.

Mike: Sam?- pregunta con la voz ronca.

Sam: Si enano molesto.- confirmo con una leve sonrisa. –Te voy a llevar a once a tu casa en veinte minutos, así que estate listo y mas asertivo con ella cuando lleguemos. Cambio y corto.- me despido y apago el walkie, volviéndolo a dejar donde estaba y mirando de vuelta a mi hermano.

Camino hacia el, fijándome en la mejor manera de despertarlo y tratando de que sea algo divertido.

Sam: El demogorgon!- grito en su oído, provocando que grite asustado y salte de la cama.

Dustin: Matalo! Matalo! Mataloooo!- repite mirando por todas parte y ya no puedo aguantarme mas la risa.

Sam: Deberías haber visto tu cara.- me rio apoyando las manos en la rodilla y tratando de no mearme de la risa.

Dustin: Imbécil.- me gruñe dándome un empujón, que no hace mucho y apenas me mueve un centímetro.

Sam: Vístete y prepárate que en diez minutos salimos a casa de Wheeler.- le aviso y salgo de su habitación todavía riéndome.

Entro en la cocina, fijándome que mama todavía no esta levantada y rápidamente cocino seis gofres. Les echo nata y sirope de chocolate por encima y corro con el plato a mi habitación.

Entro en ella, viendo a Once ya despierta y restregándose los ojos para quitarse el sueño.

Sam: Buenos días.- la saludo con una sonrisa. –He traído el desayuno.- le digo ofreciéndole uno de los platos con tres gofres.

Once: Gracias.- susurra aceptándolo.

Sam: He avisado a Mike y en diez minutos salimos de nuestra casa a la suya ¿De acuerdo?- le pregunto y ella asiente comiendo.

Desayunamos tranquilamente, con ella preguntándome preguntas sobre mí y de cómo es tener una vida "normal". Terminamos pronto, por lo que yo agarro ropa nueva para el día y corro hacia el cuarto de baño para cambiarme.

Sam: Haremos lo mismo de anoche ¿vale?- le aviso a la chica. –Tú esperas aquí fuera y yo vendré con la bici a buscarte en dos segundos.- le aseguro ayudándola a salir por la ventana de mi cuarto.