Yo te escojo a ti

CAPÍTULO 3

Lan Wangji habia llamado a la única doctora de confianza que conocía para que ayudara a su Wei Ying. 

Fue complicado encontrar la habitación de Wei Wuxian, pero cuando lo hizo se apresuró a hablar con los padres de este. 

Lan Wangji estaba tan asustado que su aroma se había descontrolado por un instante. 

No se dio cuenta de la mirada que Wei Changze le dio. 

Según Wen Qing, Wei Wuxian presentaba un cuadro moderado de cansancio y deshidratacion.

Sus días en el aeropuerto le habían pasado la factura.

Después de dejar descansar a Wei Wuxian y revisar que tuvieran el suero necesario para su rehidratacion, Wen Qing salió de la habitación de los padres del omega.

Lan Wangji se había quedado un poco más hablando con Cangse Sanren.

Wei Changze por su lado no habló mucho y estuvo pendiente de su hijo.

Con una promesa de cenar con la familia Wei-Sanren, Lan Wangji dejó la habitación de la pareja.

Cangse Sanren sonrió a su esposo.

—Wangji es tan guapo ahora. Siempre le vi potencial de yerno.

Wei Changze sonrió, él también lo tenía como su yerno, su bebé lo había elegido.

Esperaba que esta reunión fuera buena para él. 

Wei Wuxian siguió durmiendo durante el resto de la tarde.

🐰

Para Lan Wangji, encontrarse con Wei Wuxian después de trece años fue sorprendente.

Su amistad se había visto afectada debido al malentendido que surgió la última vez. Había sido su primera pelea y fue devastadora.

El alfa había pensado que Wei Wuxian dejaría su enojo y volverían hablar.

Recuerda cuando Lan Qiren le había dicho que Wei Wuxian y su familia se habían mudado de país ante el nombramiento de Wei Changze en el extranjero.

Wei Wuxian dejó de usar sus redes sociales y no supo del omega hasta ese día.

Ante la ausencia de Wei Wuxian, Lan Wangji se sintió sólo. Como si una parte de él se hubiera ido con su mejor amigo.

Sin Wei Wuxian su vida fue silenciosa, aburrida y solitaria. Se aisló de todos, estaba perdido sin la guía del niño mayor. 

Todos los días después de la escuela visitó la casa de Wei Wuxian esperando encontrar a alguien.

Dejó de hacerlo cuando fue a la Universidad, porque era una distancia demasiado larga.

Durante trece años escribió en el Weibo de Wei Wuxian algunas cosas graciosas que pasaban a sus conocidos y él se enteraba, lo felicito durante su cumpleaños y por la navidad.

Nunca obtuvo una respuesta.

Ver a Wei Wuxian parado dentro del ascensor le devolvió esa parte que había perdido.

Wei Wuxian estaba allí frente a él y lo abrazó, no pudo soportar no tocarlo.

Pero Wei Ying estaba frío y quieto, estaba tenso y su respiración era rápida.

Lan Wangji rápidamente lo auxilio y lo llevó con sus padres.

Cangse Sanren le permitió estar cerca del nido que protegía a Wei Wuxian y si hubiera podido se habría quedado hasta que Wei Wuxian se sintiera mejor.

Cuando se retiro se la habitación, Cangse Sanren lo había invitado a cenar con ellos a la noche siguiente.

Obviamente él aceptó.

Wei Changze lo vio con una expresión complicada. Pero insistió en que se quedara acompañando a Wei Wuxian por un buen tiempo.

Wei Wuxian había vuelto a dormirse y Lan Wangji hubiera querido arroparlo y perfumarlo como cuando eran amigos y Wei Ying lo pedía.

Con su corazón lleno de sentimientos encontrados se reunió con su hermano.

Para su mala suerte, Jin Guangyao, la actual pareja de Lan Xichen estaba con Su Minshan, ese omega molesto y maloliente que lo acosaba.

—Wangji, iremos por el brunch, ¿Te unes? Preguntó su hermano.

Lan Wangji negó.

—Wangji. Llamó Jin Guangyao. Lan Wangji se preguntó quién le había dado el permiso para llamarlo con tanta confianza.

—Su She pensaba en ir a conocer toda Torre Koi.

Lan Wangji le dio una mirada plana.

—¿Por qué no lo acompañas? Preguntó al Lan. 

Lan Wangji respiro hondo antes de romper las reglas de cortesía de su familia.

—¿Eres un Jin, no? Preguntó.

Lan Xichen le dio una mirada que suplicaba silencio.

—Lo soy. Dijo Jin Guangyao forzando su sonrisa.

—Entonces llevalo tú. Respondió el Lan menor, y con ello se alejó. 

En su camino a su habitación se encontró con Jiang Cheng y Nie Huaisang.

La pareja discutía por algo y Jiang Cheng parecía querer tirarse del último nivel del hotel en donde estaban.

—¿Qué nos ves? Preguntó Jiang Cheng molesto.

—Ridículo. Murmuró Lan Wangji y se fue a su habitación.

Ese era el motivo de su aislamiento. La gente era tan molesta... Wei Wuxian siempre había sabido que hacer a su corta edad.

Lan Wangji lo extrañaba tanto que dolía.

Cada vez que había salido con alguien a comer, al cine, por un café, nunca supo igual.

No existía esa calidez, no veía esa sonrisa brillante, su corazón no estaba contento.

Pero Wei Wuxian estaba allí y lo vería. Se disculparia por lo que había pasado hace trece años y ofrecería nuevamente su amistad.

Y si debía seguir a Wei Ying a Europa, a América o al fin del mundo lo haría.

Porque su mundo se volvió neutro sin Wei Wuxian en él y Lan Wangji no quería perder a su omega por segunda vez en su vida.