Mistisenix y el reino de las tinieblas.[(Saga Mistisenix) (01)]

Capítulo 35: Fuego, sol, luz y cenizas.

_¿Cómo atacamos sin qué nos carguemos sin querer a las brujas?-Pregunté

alzándome con las alas, lista para acabar con los dragones y las demás criaturas que vuelan.
_Tengo una idea, combinemos nuestra especialidades.-Sugirió girando su cetro de luz.-Haré un halo gigante de luz que se mantenga destellando a todos, tú te ocuparás de acabar con los demás y yo utilizaré hechizos de luz y otras cosas.
_Vale, ahora hay que ver como sale, ¿Y qué pasa con Luke, Celestine y Marco?
_Estarán bien, ahora nos reuniremos con ellos ya has escuchado a Lenka la cúpula hará que se muera cualquier criatura dentro del bosque que no sea un brujo o un mistisenix, solo tenemos que hacer tiempo.
_Está bien, adelante.
Me dejó impresionada ver el poder que posee Laila, concentró todo su poder en el cetro causando un destello de luz muy fuerte que pareciera una especie de cúpula ocupando una hectárea muy grande.
Todas las criaturas comenzaron a retorcerse de dolor, al darles tan fuertemente la luz, yo en cambio lo disfruté ya que venía del poder del sol, dándonos vitamina D y la luz del sol que es lo que nutre y empodera el poder de nuestra especie.
Al estar tan débiles los demás aproveché para contraatacar, había un grupo de brujos atrapados por unos atormentados y fangtugers, fui automáticamente a ayudarles a salir de ahí, quemando les los ojos conseguí que soltarán a los rehenes tras eso quemé a unos 50 que estaban amontonados a través de la llamarada ancestral.
_Mierda, vas a conseguir que se quemé el bosque.-Recordó Laila a mi lado mientras que tiraba descargas eléctricas y fuertes destellos a los enemigos, mientras que ayudaba a que los brujos huyeron.
_¿Y qué hacemos? No somos capaces de controlar el agua de forma natural.
_No, pero los brujos podemos con hechizos.-Un hombre bien vestido se acercó y ayudó a apagar el fuego de la hierba.-Gracias a por ayudar a nuestra comunidad y a que salgamos de aquí, permítenos echaros una mano aunque nuestro poder sea inferior al vuestro.-Propuso amablemente el hombre.
_Ah, claro podéis echaros una mano, pero que otros vayan a ayudar a restablecer la cúpula eso hará que los enemigos mueran automáticamente.
_Ya hay muchos refuerzos ahí, por cierto es precioso ver como has conseguido recuperar las alas de los mistisenix.
_Muchas gracias, a mi también me sorprende.
Continué volando hasta toparme con un grupo bastante grande de vampiros, Laila me siguió hasta el lugar cerca del aquelarre.
_Laila, ¿Me permites el placer de hacer un hechizo combinado?
_Claro que sí, acabemos con estos chupasangre.
_Ja sí, como si fuera tan sencillo acabar con nosotros.-El más alto de ellos nos vaciló de forma directa.
_¿Qué no es fácil? Os estáis quemando bajo la luz solar que os ha soltado mi amiga, cuando podrias comprarle un anillo de luz a las brujas.
Eran unos veinte vampiros, Laila soltó una oleada de luz y yo una llamarada causando que enseguida cayeran al suelo sin necesidad de clavarles una estaca al corazón.
_Pues no han durado mucho me parece a mi.-Laila cantó victoria y me chocó la mano ya que descendí, pero justamente un dragón de las tinieblas me cogió con sus garras y me llevó por los aires arrastrándome.
Si no hubiera recuperado los poderes ancestrales lo más posible es que muriese de una caída a mucha altura.
_Helena.-Gritó Laila desde abajó, tratando de contraatacar con algún hechizo.
_Estaré bien.-Grité mientras nos íbamos elevando más casi saliendo de la cúpula de luz.
Coloqué mis manos en sus pezuñas causando que se quemará para soltarme, cuando lo conseguí comencé a volar por mi cuenta por fin habiéndome alejado, rabiosa por su repentino ataqué cogí el athame de mis botas y comencé a clavarle la daga.
Pero mientras que lo hacía me mordió el brazo dejándome una mordedura bastante visible y rojiza, además de darme patadas.
Me alejé con el brazo dolorido y no se ni como lo hice pero simplemente alzando la mano lo congelé haciendo que segundos después se rompiera en pedazos y descendiera.
Aliviada por haberme librado de él comencé a bajar volando, de un momento a otro el número de criaturas había disminuido al parecer los brujos y Laila estaban haciendo un buen trabajo, de hecho Laila estaba tratando de mantener la luz con su cetro, parecía que se estaba comenzando a debilitar lo cuál era normal después de recién haber salido de la STEM.
Cuando toqué el suelo, me di cuenta de las criaturas que acababan de entrar al halo de luz, eran los tifones de verdad, con alas de demonio y piernas de serpientes oscuras.
Los brujos en grupo comenzaron a lanzarles hechizos de todo tipo pero era como si no les afectarán.
Decidí elevarme ya que comenzaron los 5 a escupir fuego y lava de su boca destruyendo todo a su paso y quemando todo el suelo.
No tenía ni la más mínima idea de como había logrado antes congelar al dragón, cuando los poderes de los mistisenix vienen del fuego, el sol, las habilidades psíquicas y lo que entra en las lunas, pero aún así había logrado dominar el hielo y los mistisenix somos capaces de controlar la mayoría de poderes pero con mucha práctica cosa de la que yo carecía.
Como era de lo poco que podría acabar con ellos, le pedí a los demás que se alejaran causando electrocutarlos enseguida y acabar congelados.
Más que hielo parecía que se habían convertido en piedra, en cuanto los toqué se rompieron en pedazos como había sucedido con el dragón.
Estos poderes era obvio que provenían, nada más ni menos de la piedra lunar de sangre, o si no, no hubiera sido capaz de lograr todo esto yo sola sin apenas esfuerzo.
Entonces la música dejó de sonar, asique habían dejado de seguir tocando música y los brujos comenzaron a aplaudirme.