Inesperado Accidente (RusMex)

Capítulo 9: Habitación del bebé

Pov: Rusia

—Mira, mira esto— Méx apunto una cuna de madera, que tenia la cabecera en forma de casa —Es desmontable y se puede modificar como vaya creciendo.

Me acerque para mirarla y era muy linda, la madera era de perfecta calidad y era grande.

—Si te gusta, nos la llevamos taquito— Asintió feliz y le pidió a la señorita que nos estaba atendiendo, que la anotara mientras veíamos más cosas.

—Ya tenemos la pintura, unos adornos, la cuna, el moises... ¿Qué más falta?— Pregunto checando la lista.

—¿Te gustaría tener una mecedora? leí que es muy cómoda y ayuda a la hora de alimentar a la bebé— Apunte al pasillo donde habianos pasado hace unos minutos —Vi una alcolchonada en el otro pasillo.

—Si, estaría genial mi Rusky— Caminamos un poco más por la tienda, compramos otros muebles útiles y pagamos, en la tarde nos llegarían a nuestro hogar, por lo mientras nos dedicariamos a pintar la habitación.

Teníamos la ventaja de que habíamos comprado la ropa y algunos juguetes hace unas dos semanas, pero por el trabajo y nuestra “Huevonada” como diría Mex, tuvimos que posponer la decoración del cuarto de Quetzally.

Vivíamos en una casa mediana, desde hace 5 años nos mudamos juntos, a pesar de nuestros estatus como country's, nos gustaba vivir en un ambiente hogarreño. La casa contaba con una habitación a lado de la nuestra, donde guardábamos algunas cosas, nunca le dimos algún uso, hasta ahora.

Era el cuarto ideal para la pequeña, por su tamaño y sobre todo, que podríamos estar al pendiente de ella.

Entramos a la casa con las otras cosas que habíamos comprado al instante nos sentamos en el sillón.

—Uff, fue cansado, pero ahora si se viene lo bueno— Se frotó las manos —¿Espera... huele ha lomo?

Empecé a olfatear y era cierto olía a comida toda la casa. Le hice señales a Méx que se quedara donde estaba y tome un florero que estaba en la sala.

Nunca sabemos si puede ser algo peligroso, prefería golpear a alguien a que les hicieran algo a ellos. Camine lentamente hasta que se asomo una bandera que conocía bien.

—¡Hasta que llegan!— Salio de la cocina Argentina, seguido de Perú y Chile.

Baje el jarrón y lo coloque nuevamente a la mesa, no eran ninguna amenaza.

—¿¡Cómo entraron a la casa!?— Pregunto asustado mi taquito —Casi hacen que se me salga la chamaca.

—Con la llave debajo del taburete— Dijo como si nada el Chileno —Weones deben de tener cuidado que cualquiera puede entrar.

—¿Cómo ustedes?— Alcé una ceja mirandolo.

—Pero nosotros no somos cualquiera — Perú le entrego la llave de la casa a mi taquito —¿Cómo esta mi ahijadita? ¿puedo tocar?

—Clarin, adelante, por lo que senti esta despierta— Toco el estómago de Méx y casi al instante chillo de la emoción —Esta pateando la beba, vengan, vengan!

Ellos fueron los primeros en enterarse, de la noticia, pero sin embargo, eran pocas las veces donde los podíamos ver todos juntos, ya sea por diversos problemas o asuntos personales.

—Wow es impresionante cuánto a crecido— Estaban todos juntos alrededor de Méx —Subiste mucho de peso ya estás todo choncho.

Todos nos quedamos viéndonos con horror, ese pobre chileno esta muerto.

—¡Y tú estarás bien pinche bueno cabrón!— Empezó a llorar y no sabíamos como tranquilizarlo. Se pone muy sensible cuando le dicen gordito.

—Pero si serás boludo, eso no se le dice a un preñado— Lo regaño Argentina mientras abrazaba Méx.

Lo mande a que buscara en el cajón un Pelón pelo rico gigante que había comprado la otra vez, era de emergencia, para cuando la regará yo o pasara algo como esto.

—Toma cariño— Le extendí el dulce y sus lágrimas se detuvieron.

—E-es mi favorito— Hipo comiendose el dulce y nos sentimos aliviados.

—Venga no se me ponga triste— Perú le ayudo a levantarse —Hice un lomito saltado, tan delicioso que con el te chuparas los dedos.

Entre todos terminamos de ayudar para poder comer antes de que se enfriara. La comida de mi taquito es deliciosa y mi favorita en todos los sentidos, pero también me gusta probar la variedad de comida de otros country's latinos.

Por ejemplo, la comida de Perú es buena y a México también le gusta.

—Por cierto— Hable y todos me miraron —¿Qué hacían por acá?

—Ahh cierto, se nos olvidaba— Dijo el chileno, a pesar de que pidió muchas veces perdón, ya se endeudo prometiendo otros dulces para Méx —Papá nos contó que iban a decorar la habitación de la wawa, venimos a ayudar.

—Y a traer los regalos que mandaron tambien— Argentina apunto la habitación de invitados —Los metimos ahí, porque queríamos que fuera sorpresa, pero nos dio hambre y Perú se ofreció a cocinar.

—Te quedo delicioso por cierto— Dijo mi taquito degustando su plato.

Estuvimos disfrutando su compañia y poniéndonos al dia. Hasta que llegaron los muebles y empezamos con nuestra misión.

Cada uno se encargo de una cosa y entre los cuatro cargamos lo más pesado, no queríamos que Méx hiciera esfuerzos. Por ello, él se dedico a decorar la habitación haciendo distintos dibujos en las paredes.

Nunca imagine que armar una cuna fuera tan complicado, entre los cuatro le dimos muchas vueltas al instructivo y después de varios minutos lo logramos.

Lo de más fue un poco más sencillo, solo fue acomodarlo y darle una bonita armonía.

Casi llegando la noche terminamos exhaustos, pero orgullosos de lo lindo que nos había quedado todo.

—No pensé que que tener un bebé fuera tan complicado— Exclamo Chile tirado en el suelo.

—Y todavía no nace, te imaginas tener que sacar un bebé por...— Le interrumpió México dandole un golpe en la cabeza.

—Callate, no quiero pensar todavía en eso— Dijo y mi mente empezó a buscar posibles respuestas, no le hemos preguntado a OMS, pensé que lo más lógico era una cesaría, pero posiblemente allá más opciones.

—Viendo la situación, le dire a USA que se espere con el papeleo para un bebé— Perú se rasco la cabeza apenado —Creo que aún no estoy listo para una responsabilidad así, prefiero solo jugar con mi futura ahijada.

—Para todo hay tiempo— Le respondi y sonrió quitando su cara triste —Pero cuando llegue el momento estoy seguro que ustedes serán unos magnificos padres.

El futuro es incierto, pero se que con una familia como la que tengo, estará todo bien, para todos.

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Algo así me imagine el cuarto