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Capitulo 3: ¿Quién es el Sultan Ahmet?

—¿Cuánto falta para llegar mamá? Quiero jugar —preguntó el príncipe Mustafa

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—¿Cuánto falta para llegar mamá? Quiero jugar —preguntó el príncipe Mustafa. Se removía inquieto en su asiento, preguntándose cómo sería el palacio en Estambul. Se preguntaba si su padre le contaría historias como solía hacerlo antes de dormir.

El carruaje se movía a lo largo de un camino bordeado de campos de amapolas y girasoles, el sol brillando intensamente en el cielo despejado. Mustafa miraba por la ventana, fascinado por el cambio de paisaje

—Falta poco, Mustafa, nuestro barco nos espera. Izaremos las velas y el viento nos llevará hasta nuestro palacio en Estambul —lo abrazó.

—Extraño a papá y a Ibrahim. ¿Ibrahim también nos espera?

—Así es. Tu padre, tu abuela Hafsa y tus tías. Todos nos esperan.

—¿Ese palacio es más grande que el nuestro?

—Es más grande. Mucho más. El palacio más grande del mundo es Topkapi —Mahidevran sonrió al pensar en su amado Ahmed y en su reencuentro.
















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Yelena resopló

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Yelena resopló. El día amenzaba con hacerse más largo que la Biblia.

Limpiar, barrer, ordenar, ayudar; todo el día sin un puto minuto de descanso. Se sentía más sola que nunca. Nadya parecía haber desaparecido de la faz de la tierra. Un día estaba y al otro ya no. Solamente tenía a Nuray y a María.

Sus clases ya habían empezado y ya sabía hablar turco pero se le complicaba la escritura. Y además tenía lecciones con varias Kalfas que le enseñaban todo lo que un debía saber del arte de seducción; bailar, cantar, tocar el laud, e incluso Şah Sultán le dio consejos personales sobre los gustos del Sultán Ahmed en las mujeres. Y la parte más incómoda: aprendió lo que significa ir a la Hasoda y cómo complacer a su majestad en la cama.

María y ella se habían acercado más pero Valeria se había alejado. Ahora era una tonta presumida.

—Yelena. ¿Cómo te ha ido con la sultana? ¿Irás a los aposentos del sultán? —preguntó Nuray.

𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐲 ©Where stories live. Discover now