Historias y One--Shot de Merlin

Hechizo de amor

Merlin suspiró mientras cerraba la puerta de las habitaciones de Arthur detrás de él. Después de que Vivian y su padre se fueran, Arthur había compensado los días que había estado demasiado enamorado como para notar a Merlín, y mucho menos para darle sus tareas habituales. Merlín había tenido que hacer todos los quehaceres durante esos dos días hoy. Se apoyó contra la puerta por un momento extra, para recuperar el aliento antes de caminar de regreso a las habitaciones de Gaius.

Cuando llegó a la puerta de Gaius, sonrió y entró. La cerró detrás de él y estuvo a punto de tropezarse con los escalones, pero se recuperó en el último segundo. El sonido hizo que Gaius mirara hacia arriba. ¿Estás bien? preguntó.

"No", respondió Merlín, "Arthur casi me mata de trabajo hoy. Tuve que hacer todas las cosas que se olvidó mientras estaba encantado. El valor de dos días. Hizo una mueca y fue a sentarse a la mesa frente a Gaius. "¿Eso es la cena?" preguntó, señalando la comida frente a él.

"Por cierto. Come antes de que te caigas.

Merlín desgarró la comida. No había comido nada desde el desayuno. El silencio se apoderó de la habitación hasta que terminó. "Gracias Gayo".

"Eres muy bienvenido. Ahora a la cama contigo.

Merlín estuvo a punto de tropezarse de nuevo en los escalones que conducían a su pequeña habitación. Encendió su vela con una sola palabra y se alegró de haberlo hecho. Todos los libros sobre hechizos de amor que Gaius había desenterrado estaban en el suelo donde los había empujado la noche anterior. Todavía estaban en su cama cuando se quedó dormido.

Se acercó a su cama y se sentó. Mirando al suelo, tomó un libro al azar y comenzó a hojearlo. Se sintió atraído por una página particularmente dorada. Algunas de las palabras estaban en el idioma antiguo, que podía leer bien. Pero la mayoría estaban escritos en latín, que apenas reconoció. El latín parece haber sido escrito en algún momento después de la lengua antigua. Muy curioso.

Merlín inclinó la cabeza para ver mejor las palabras del hechizo. Læt mín tréowlufe ácýðeþ oþ mec . Deja que mi verdadero amor se revele a mí . Pensó por un momento y se dijo a sí mismo: "Oh, qué diablos. ¿A quién le va a doler? Leyó el hechizo en silencio para pronunciar bien y luego habló en voz alta: " Læt mín tréowlufe ácýðeþ oþ mec ".

Sintió que su magia se encendía por un momento antes de volver a su nivel habitual. Por desgracia, no apareció ninguna chica, pero tal vez necesitaba unos momentos para funcionar. Se sentó y esperó unos minutos más, hojeando el libro un poco más. Pero aún no apareció ninguna chica. "Olvídalo", dijo a nadie, y cerró el libro. Tiró el libro al suelo y se puso la ropa de dormir. Luego se tiró en la cama, se subió la manta y se durmió.

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Arriba, en sus aposentos, Lady Morgana se despertó sobresaltada. Sus ojos brillaron dorados por un momento y susurró: "Merlín". Sus ojos se cerraron de nuevo y rápidamente se volvió a dormir, sin recordar para qué se había despertado.

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Por la mañana, Morgana abrió los ojos sorprendida. No recordaba haber tenido ningún sueño anoche, aunque se había olvidado de ponerse el brazalete. Aún más sorprendente fue el hecho de que se sentía completamente descansada. Energético. Eso sucedía rara vez, por lo que decidió que disfrutaría el día al máximo mientras pudiera.

Gwen se sorprendió al ver a su señora completamente despierta y sentada en la cama. "¡Mi señora, está despierta!"

"¡Buenos días, Gwen! ¡Me siento maravilloso esta mañana!" respondió Morgana.

"¡Te ves maravilloso! Ven, desayuna y cuéntamelo todo.

Morgana fue a su mesa y se comió casi toda la comida que le había traído Gwen. Gwen se maravilló de esto: Morgana casi nunca terminaba la mitad de lo que traía. Se afanaba por las habitaciones, ordenando esto y aquello mientras su señora comía.