Benito pasó unos 30 minutos pensando en qué ponerse en su segundo día. No es que le importara mucho si iba bien o no, era una cuestión de impresionar con su presencia. Algo a lo que, como cantante famoso, estaba muy acostumbrado.
Con eso en mente, cogió su chaqueta favorita, una camisa a juego y unos pantalones. Creyó que la ropa deportiva la podría pedir allí. Pensando en el entrenamiento, recordó el comentario de Brad.
Después de que el actor le dijera que debía ponerse en forma, Benito se ofendió un poco. Aunque no tenía los músculos de Brad Pitt (que, por cierto, reflexionó que le quedaban bien), eso no significaba que él pudiera decirle algo así. Pensó que le iba a mostrar quién era el macho alfa aquí, que a Bad Bunny no se le intimida tan fácilmente.
Contento con este pensamiento, cogió su coche y condujo hasta el lugar de la grabación.
Cuando llegó, lo primero que vio fue un gran grupo de personas; supuso que era el personal encargado de lo técnico. Los saludó y se dirigió hacia los camerinos.
Benito se sorprendió por la cantidad de personas que requería este proyecto. Se sintió perdido otra vez y se maldijo por ello. Además de la multitud que lo rodeaba, otra cosa que no podía dejar de pensar era que solo tenía unos días para actuar.
Esa presión lo impulsó a dar lo mejor de sí en tan poco tiempo. Quería sorprender a todos, demostrar que no solo cantaba bien, sino que también actuaba bien.
Respiró unos segundos para calmarse, se animó y entró en el camerino donde estaban los demás actores con los estilistas.
Poniéndose nervioso por no saber qué hacer, Benito comenzó a mirar alrededor. Al notar a Brad, se alegró, era como ver un faro en medio del mar. Cuando reflexionó en ello, Benito se disgustó consigo mismo por lo ridículo que sonaba en sus pensamientos. Cuando Brad lo notó, le asintió de manera amistosa y, con su característico acento inglés, dijo:
—Hey Benito, ¿cómo estás hoy?
Benito se sorprendió por la forma tan casual de comenzar la conversación. No sabía por qué, pero suponía que Brad Pitt era el típico actor que se creía especial por ser famoso y no hablaba si no era necesario. Supuso que había hecho malas suposiciones.
—Bien, ¿y tú? —respondió Benito con su típico acento español.
Brad lo miró y sonrió como si no le creyera.
—¿Bien? ¿Estás seguro de eso? No te ves muy cómodo aquí, la verdad —dijo Brad, señalándole el asiento a su izquierda para que se sentara. Cuando Benito se sentó, Brad se levantó y se situó detrás de él. Ante esta acción, el cantante se puso tímido por alguna razón.
Tomándolo por los hombros, el actor mayor comenzó a hacerle masajes para que se relajara. En vez de relajarse, Benito se tensó aún más, sintiéndose como un niño pequeño al que deben tranquilizar en situaciones estresantes, y, honestamente, no le gustó.
Brad siguió con el masaje, ignorando el encogimiento del cantante, y continuó hablando:
—La verdad, Benito, el primer día suele ser así, pero yo, como la buena persona que soy, te voy a ayudar a adaptarte —dijo de manera amistosa y un tanto egocéntrica.
"Dios, ese hombre parece un golden retriever", pensó Benito, suspirando.
—Me has pillado, la verdad. Ahora mismo me siento como si fuera un novato —dijo Benito. Incluso se sorprendió de haberse sincerado tan fácilmente con un actor al que había conocido ayer.
Con una sonrisa, Brad terminó el masaje y se sentó para que los estilistas terminaran su trabajo. A Benito lo llamaron a un lado para tomarle medidas y hacerle el traje de su personaje.
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Dímelo antes de que me vaya
RomanceEl famoso cantante Benito Antonio mejor conocido como Bad bunny participará en una película nueva con el famoso actor Bard Pitt,a continuación veremos una fascinante historia de amistad,crueldad y amor. Aviso de antes:Es quemadura lenta y un poco dr...