don't touch me « kookmin au »

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— ¿Conocer a tus padres? — cuestiona a la par que se endereza sobre la cama donde permanecía recostado sobre el pecho de su novio. Le mira alzando una ceja, completamente extrañado ante la petición del mayor. — ¿Debo hacerlo?

— Sé que llevamos poco saliendo, pero voy completamente en serio con nuestra relación y nada me gustaría más que presentarles a mis padres la persona tan maravillosa que tengo por novio. — explica con ojos soñadores. — pero entiendo si no te sientes listo o si es algo apresurado. Podemos esperar un poco más o...

— Estás divagando ahora. — corta con el diálogo que con cada segundo se extendía un poco más.

Jungkook le veía con esos enormes ojos brillantes que lucían cómo los de un cachorrito desamparado, los mismos ojos que Hoseok suele hacer para convencerle de cosas y los mismos por los que suele burlarse de su amigo. Pero por alguna razón extraña e incomprensible (al menos para el) aquella mirada en Jungkook no hace más que acelerar su corazón al punto en el que comienza a creer que podría morir de un segundo a otro.

— Príncipe, está bien si no quieres hacerlo.

— Vamos con tus padres. — dice finalmente. Y sabe que tomo la decisión correcta cuando una enorme sonrisa aparece en el rostro del más alto, que inmediatamente lo toma en brazos arrastrándolo hasta sentarlo sobre sus piernas y comienza a llenarle el rostro de pequeños y babosos besos.

Risitas tontas resuenan en la habitación junto a pequeños quejidos de molestia (la cuál era fingida) por parte del más bajo.

— Me haces tan feliz. — susurra Jungkook el su oído. La noche ha caído y ambos se encuentran abrazados bajo las sábanas, caricias siendo repartidas en la acaramelada piel del más bajo.

— Y tú a mí. — la voz de Jimin suena baja pero está llena de seguridad. Jamás en sus cortos veinte años había sentido tantas emociones, tanta felicidad y aquellas enormes ganas de estar todo el día pegado a alguien. Siempre había sido todo lo contrario, sus emociones bien controlados al igual que sus reacciones y prefiriendo huir de las personas. Pero Jungkook no le había dejado huir de él; lo había atrapado bajo sus redes gracias a su encanto y su personalidad tan atrayente.