Capítulo 8: "Enloquecer"

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Hace una semana que fingía consumir la droga que vendían en el gimnasio, se había vuelto un cliente frecuente, cuando su día se volvía aburrido, iba al gimnasio a hacer ejercicio y compraba la droga que fingían ser los suplementos que ofrecían, claro que habían los reales y los falsos, pero él podría ser fácilmente confundido por un adicto controlado. Al final esa droga terminaba en el retrete, en otra época le habría gustado probarla, pero su medicación se lo negaba estrictamente. Pogo seguía siendo una amenaza latente en su día a día.

Su relación con Hai se había vuelto menos tensa, tantas compras y discreción eran bien vistas por él y de vez en cuando tenían conversaciones superficiales con él, hasta el día que lo encontró muy preocupado en la oficina del gimnasio, tenía las manos metidas en el cabello y un vaso junto a una botella de alcohol barato descansaban en el escritorio. Era una de sus visitas diarias, no había nada sospechoso y acercarse como un amigo frente a una situación adversa le venía como anillo al dedo para sus planes.

-Hai, te ves mal. ¿Problemas en el paraíso?

-Fled, ¿vienes pol tus suplementos?

-Así es, el trabajo ha estado horrible y ya sabes cómo es el estrés.

-Clalo, es una mielda -Hai se levantó tambaleante y por suerte llegó al casillero donde guardaba los supuestos suplementos- ¿Y de qué tlabajas?

-Soy informático en una compañía de seguridad, estoy al tanto de las cámaras y les doy mantenimiento.

-Woah, ¿en selio? Tiene que sel abulido.

-Tiene sus días.

Hai contó las bolsitas y se las entregó, estaba borracho y extrañamente social, algo que Gutabo no esperaba ese día y no iba a desaprovecharlo.

-Se nota que algo te molesta, ¿es algo con lo que te pueda ayudar?

-No lo cleo, tiene que vel con mi tlabajo y me está lobando el sueño.

-Cuéntame, seguro te puedo ayudar -dijo con aparente inocencia, como un colega preocupado genuinamente por otro colega.

Hai pareció pensarlo unos instantes, pero el alcohol y la buena actuación de Gustabo lograron convencerlo de hablar.

-Es un amigo, algo así como mi jefe, está siendo muy ilesponsable y pone a nuestla familia en liesgo.

-Parece delicado.

-Es estlesante, polque no puedo hacel nada pala evitalo.

-¿Y ese amigo es importante?

-Calo es familia, es impoltante, pol eso me pone en una situación delicada.

Aquellas palabras fueron reveladoras palabras para Gustabo, le gustaba por donde iba la conversación.

-Tal vez Carlo ya no es familia, si traiciona a la familia en cualquier sentido entonces significa que no le importa.

-Tiene sentido.

-La familia significa lealtad y si eso se rompe, entonces la confianza se pierde. Tal vez lo mejor sea sacarlo del camino, proteger a la mayoría y dejarlo caer solo, se trata de supervivencia.

Hai ese día había estado muy borracho, pero las palabras de Gustabo ya habían hecho eco en su cabeza y se instalaron en su subconsciente, la manipulación había sido demasiado fácil, la situación de los involucrados era tan frágil en ese momento que no se necesitó de ningún esfuerzo innecesario. La siguiente semana se enteró que Carlo había tomado un camino diferente al resto de la mafia y que se había quitado de encima a a uno de los Gambino, el mayor reto para acercarse completamente a Toni, el único que hubiera tomado medidas contra él.

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⏰ Última actualización: Dec 03, 2022 ⏰

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