Capitulo 2 Andy

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Okey lo que me gusta hacer es, tocar la guitarra acústica, odio la música electrónica y mi pasa tiempo favorito es dibujar.
Mi historia comienza cuando mi madre me adopto si es cierto no soy su hijo de sangre, pero te voy a decir un secreto....
Ella aun no sabe que yo se que soy adoptado... es cierto finjo que nose nada, pero pues igual es mi madre y la adoro. En realidad mi nombre es Jay Andy Ubrey, mi padre o mas bien dicho, padrastro es un alcohólico y drogadicto y para acabarla mi madre esta enferma de Cancer, mi verdadera madre me abandono en un basurero y mi madre Helena; ese es su nombre, me cargo y al instante se enamoro de mi la aprecio mucho y también la quiero mucho, jamás haría algo que la lastimara y menos en estos momento que es cuando mas me necesita.
Mi padrastro me detesta hubo una ocasión en la cual me lanzo una botella de cerveza y me dio justo en la frente, solo por que me había llevado el carro para ir por unos medicamentos que me había encargado el doctor para mi madre aun sigo sin entender como es que mi madre aguanta a ese hombre:
Antwan: oye mocoso ¿donde dejo tu madre el dinero? Necesito comprar licor.- dijo tambaleándose. Enserio podía oler su asqueroso aliento a alcohol.
Andy: no tengo ni idea viejo.- dije empujándolo ya que estaba muy cerca de mi.
Antwan: mocoso estupido, deberías de conseguir un empleo si la pendeja de tu madre no hace nada.- dijo quitándose de enfrente mío y saliendo de la casa.
Maldito viejo espero que se muera o se atragante con todo ese alcohol que se toma. Salí un rato y me fume un cigarrillo pero solo lo hago cuando estoy enojado o muy alterado y cada que hablo con Antwan; el novio de mi madre, me estrézo y no me queda mas que fumar un rato o salir a caminar con mi Ángel a ella la adoro mucho no se como es que no tiene novio ella es preciosa y si le das oportunidad de que la conozcas creo que igual te gustaría pasar tiempo con ella.
Cuando tenía aproximadamente 7 años de edad mi padrastro abuso sexualmente de mi, todas las noches ese maldito iba a mi habitación y me tocaba ya hasta que cumplí los 10 años me revele y lo golpe con una lámpara, le dije a mi madre, ella no dijo nada pero yo si, ese mismo día empaque todo y me fui directo a casa de Sue y me permitió quedarme hasta que encontrara que hacer.
Maduramos muy rápido a causa de todo lo que pasamos y solo somos unos extraños en un mundo de mierda donde la gente te critica por tu forma de vestir, de actuar, de pensar y de comunicarte. Ya en esta vida no puedes ser como te gustaría ser la apariencia importa pero a mi y a Sue nos da igual somos felices como somos mientras nos tengamos uno al otro ella me adora y yo a ella igual.

Píldoras para DormirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora