CAPÍTULO 10

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Nos levantamos Asher y yo sobre las nueve de la mañana y ayudamos a mis tíos a preparar sus cosas para irse.

Una vez listo todo, bajamos los cuatro a desayunar unas tostadas y unos zumos de naranja.

—Bueno, tened mucho cuidado en el viaje, por favor —les digo y asienten.

Me abrazan y luego de separarnos abrazan a Asher.

—Cuidala mucho —le dice mi tío a mi novio y él asiente sonriendo.

—Siempre —dice mi mira con ese destello  que me dice todo.

Salen por la puerta y el apartamento queda en silencio

—Vamos a cambiarnos, te voy a llevar a un sitio —me dice y me coje la mano para subir las escaleras.

Nos metemos en la habitación y nos damos una dicha rápida. Me pongo unos short negro, un top también negro y una vez listos bajamos de nuevo las escaleras  para salir.

Salimos del edificio y vamos al aparcamiento donde se encuentra el precioso coche rojo de Asher. Nos montamos y yo no le pregunto nada porque sé que va a ser imposible sonsacarla algo, así que en el trayecto al sitio ponemos música de Maroon 5 mientras cantamos algunas de sus canciones.

Llegamos al centro de San Francisco donde está la zona de cafeterías y alguna que otra tienda de complementos.

Salimos del coche cuando ya ha aparcado.

—¿Te parece bien que vayamos al Starbucks? —pregunta.

—Me parece perfecto —respondo.

Me coje de mi mano y la entrelaza con la suya, una sonrisa tonta aparece en mi rostro.

Entramos en la cafetería y pedimos unos cafés y un muffin de chocolate blanco. Cuando está pagado nos vamos a una mesa apartada de la gente y empezamos a desayunar por segunda vez en el día.

—¿Cómo llevas los exámenes?

—Bastante bien, pensaba que me resultaría más difícil memorizar tantos temarios en tan poco tiempo, pero lo llevo bien. En parte ha sido por toda la ayuda que me estáis dado estos días en los estudios los chicos y tú —dice y sonrío.

—Cuando quieras te ayudo _cojo su mano y la acaricio.

Mi móvil empieza a sonar y lo cojo de la mesa. Es un número desconocido, miró a Asher con pánico y dice que lo pongo en voz alta

—¿Si? —pregunto temerosa.

—Cuanto tiempo sin escuchar tu voz, preciosa —dice Cam a través del móvil y mi pulso se acelera.

—¿Qué quieres, Cam?

—Nada, solo venía a preguntarte qué tal está la zorra de Emm y Asher. ¿Ha sobrevivido al accidente?

—No se nada de Emm y para tu información MI novio se encuentra en perfecto estado —digo intentando que no me tiemble la voz.

—Tranquila, ya encontré a la puta de Emm, y respecto a Asher, no te preocupes todo a su tiempo —me dice y cuelga.

—Todo a su tiempo —digo escuchando sus palabras.

—Tengo que llamar a Emm —digo preocupada y asiente Asher con el rostro lleno de preocupación.

Busco por mis contactos su número y lo encuentro. Pulso su nombre y me lo llevo a la oreja.

Escucho tres pitidos.

—¿Ivy? ¿Qué pasa? ¿Estás bien? —pregunta con rapidez y noto su nerviosismo por el teléfono.

—Hola, Emm. Siento llamar pero Cam me acaba de llamar, me ha dicho que te iba a encontrar —dice y siento su respiración acelerada.

INMARCESIBLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora