𝑬𝒔 𝒖𝒏𝒂 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒂 [𝔸𝕝𝕚𝕩 𝕂𝕦𝕓𝕕𝕖𝕝] /̷𝑳𝑰𝑩𝑹𝑶 1

Prólogo

¡Cambié la historia, ahora nuestra Protagonista será una heroína guepardo!

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¡Claro! Aquí tienes una versión más detallada y enriquecida de tu historia:

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Una niña de 8 años se acostó en su cama en su nueva habitación mientras miraba el techo con una expresión triste, tenía los ojos vidriosos. Las paredes, aún sin decorar, parecían más frías y vacías sin la presencia de su padre.

Su padre acababa de morir debido a una rara enfermedad. La casa, que antes estaba llena de risas y amor, ahora se sentía vacía y silenciosa.

Se llevó a cabo un funeral y todos los parientes más cercanos de Isabella estuvieron presentes. Gabriel incluso apareció, a pesar de su apretada agenda. Adrien, Chloe y Félix habían abrazado a Isabella durante todo el funeral mientras ella lloraba, sabían lo que era experimentar la pérdida y querían estar allí para ella.

Isabella miró su escritorio y vio la pequeña caja negra octogonal con diseños rojos en la parte superior. Su papá se la había dado antes de morir. Isabella recordó las palabras que su papá había dicho débilmente antes de tomar su último aliento.

"Isabella, antes de irme... quiero que tengas esta caja. Tiene algo especial dentro, ábrela cuando sientas que es el momento adecuado. Y... si alguna vez te enfermas, este anciano chino, él es un amigo mío, él te curará, su nombre... es... Wang Fu..."

Lo examinó con curiosidad, luego lo abrió y vio una gargantilla negra. Se volvió poderosa cuando la tocó y de repente, hubo un destello de luz cuando una pequeña bola de energía salió volando y casi la golpea en la cara. Dando un paso atrás, algo emergió de la bola de luz que hizo que sus ojos se abrieran de par en par.

Era una criatura de algún tipo de color amarillento pero ligeramente claro. Con manchas negras, ojos de color verde con esclerótica ámbar. La boca era de color amarillo y contenía filas de dientes en la parte superior e inferior. Tenía dos bigotes color negro y su cola, que recordaba a la de un guepardo.

La kwami bostezó y estiró su pequeño cuerpo.

—¡Finalmente! Víctor me tuvo allí demasiado tiempo. ¿Dónde está él de todos modos? Oh, ¡hola! —gorjeó cuando notó a Isabella.

La niña respiró hondo, tratando de no enloquecer. Sus ojos se abrieron cuando se dio cuenta de que la kwami había dicho el nombre de su papá.

—Espera un momento... ¿conoces a mi papá?

—¡Sí! Solía ser un héroe, pero de repente se detuvo y me dijo que tenía que encerrarme... no sé por qué —dijo la kwami con tristeza—. ¿Pero quién eres tú? ¿Y dónde está él?

Isabella suspiró.

—Está bien, primero, Víctor es mi papá, así que soy Isabella, su hija, y segundo... Él está... en un lugar mejor ahora, falleció de una rara enfermedad, no... había nada que se pudiera hacer para salvarlo.

La kwami se sorprendió por la información, la tristeza se apoderó de ella mientras miraba hacia abajo.

—¿Mi amo... se ha ido?

—Sí, pero eso todavía no te explica. ¿Quién eres? ¿Qué eres? ¿Y acabas de decir que mi papá era un héroe?

—¡Vaya! ¡Una pregunta a la vez, por favor! Ahora, mi nombre es Mixxy, soy una kwami, y sí, acabo de decir que tu papá era un héroe, porque lo era. Bueno, lo era cuando era adolescente. Su alter ego se llamaba Monsieur Guépard y era muy conocido en París, pero un día... empezó a enfermarse... constantemente. Fue entonces cuando me dijo que ya no podía ser un héroe y me encerró. Supongo que todos se olvidaron de él... y supongo que él se olvidó de mí...

—¿Mi papá se enfermaba cuando era adolescente? Mi tía nunca me dijo eso.

—Eso es porque Ariane no sabía, Víctor no quería que nadie supiera nada, ni siquiera Odette, su propia esposa.

—Um, ex esposa —Isabella la corrigió.

—¿Víctor y Odette se divorciaron? —Mixxy preguntó sorprendida.

—Sí, se divorciaron cuando yo tenía 4 años —respondió la niña con tristeza.

—Oh... Fue muy duro...

—Sí... ¿Conoces a mi tía Ariane y a mi madre?

Mixxy solo asintió.

—Y ahora que Víctor se ha ido, tendrás que ser tú quien ocupe su lugar.

—¿Qué?

—Que tú ocupes su lugar de ser una heroína.

—Um... ¡no! ¡No estoy hecha para ser una heroína! —dijo la niña negando con la cabeza, sus ojos llenos de incertidumbre— Quiero decir, tengo muchos talentos, pero eso no es suficiente. No sé pelear, no sé cómo salvar a la gente, y definitivamente no sé cómo enfrentarme a villanos.

—¡Sí, lo es! —insistió Mixxy, flotando frente a ella con determinación—Tienes el corazón y el coraje, y eso es lo más importante.

—Está bien, ¿Sabes qué? ¡Le voy a contar a mi tía Ariane sobre ti, ¡esto es demasiado loco! —Isabella exclamó, levantándose de la cama y dirigiéndose hacia la puerta. Pero antes de que pudiera salir de su habitación, Mixxy se interpuso en su camino, su pequeña figura irradiando una luz suave pero firme.

—¡No! ¡Tu tía no puede saber que existo! —Mixxy exclamó con urgencia—. Ahora escucha, y escucha con atención. Puedes confiar en mí, está bien, puedes confiar en mí.

Isabella se detuvo, su mano en el pomo de la puerta. Miró a Mixxy con una mezcla de desconfianza y curiosidad.

—Bien, supongo que si mi papá confiaba en ti, no eres del todo mala. Pero, solo dime qué tipo de... uh... ¡dime qué tipo de cosas puedes hacer! ¡Y no dejes ningún detalle fuera!

Mixxy suspiró, flotando lentamente hacia el escritorio de Isabella y posándose sobre él.

—Está bien. Pero te lo explicaré cuando crezcas.

—¿Por qué? —preguntó la niña, frunciendo el ceño.

—Porque eres una niña —respondió Mixxy con suavidad— Ser una heroína conlleva mucha responsabilidad... y tienes que esperar hasta que seas un poco mayor. No es solo cuestión de poder, sino de madurez y sabiduría. Pero no te preocupes, estaré aquí para guiarte cuando llegue el momento.

Isabella se quedó en silencio, procesando las palabras de Mixxy. Finalmente, asintió lentamente, aceptando la explicación aunque aún con dudas en su corazón.

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Holaa, ¡Nuevo cambio!

Comenta, ¿qué te pareció el prólogo qué emociones encontraste (bueno, no tan emocionante o poco) y qué dudas tuviste?.

Oryyy3