𝑬𝒔 𝒖𝒏𝒂 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒂 [𝔸𝕝𝕚𝕩 𝕂𝕦𝕓𝕕𝕖𝕝] /̷𝑳𝑰𝑩𝑹𝑶 1

[Demoilustrador 1/2]

Cantidad de palabras: 3,382

Estaba oscuro en el cielo nocturno de París. Todo estaba en silencio.

—¡Ayuda!—gritó una voz femenina.

En la escuela estaba Marinette por alguna razón. Parecía estar huyendo de Tormentosa

Pero luego se detuvo y se quedó sin aliento al ver a Lady WiFi frente a ella. Marinette trató de huir de Lady WiFi, pero un icono de pausa la detuvo y la congeló.

Luego, Tormentosa la congela en un bloque de hielo con su sombrilla. Las dos villanas se acercaron y chocaron los cinco.

En ese momento, apareció el Demoilustrador. Sacó su bolígrafo en su posición de defensa, frente a las villanas.

Tormentosa estaba a punto de disparar un rayo de hielo a Demoilustrator cuando borró la imagen de la sombrilla y la sombrilla desapareció mágicamente, lo que sorprendió a las villanas. Lady WiFi estaba a punto de dispararle un ícono, pero Demoilustrator creó una jaula de bloques atrapando a las villanas.

Demoilustrator borró el bloque de hielo y el ícono, liberando a Marinette.

La peliazul corre hacia el chico y lo abraza.

—Oh, súper-Nathan, eres mi héroe

—No fue nada.

—Te amo.

—Yo también te amo, Marinette.

—¡Nathaniel!— Gritó una voz femenina.

Resulta que en realidad fue un sueño de Nathaniel, que está durmiendo en una mesa con algunos bocetos en el libro. Fue despertado abruptamente por la Sra. Mendelejev.

—¿Qué estás dibujando?—preguntó la profesora.

—Q-Qué- —Nathaniel tartamudeó.

—Es por estos dibujitos que repruebas ciencias.

—Lo lamento.

—Ve a la oficina del director— exigió la Sra. Mendelejev.—Y muéstrale esos garabatos. Ahí si que lo lamentarás.

Nathaniel se levanta y comienza a caminar, pero tropieza con el bolso de Mylène y deja caer su cuaderno de bocetos. Chloé lo recoge.

—Ooh, mira, Sabrina, es él como un superhéroe!. Mira a quién está salvando. Es Marinette—Dijo Chloe, sorprendiendo a a la chica.—Esta enamorado de ti, Marinette.

—Dame eso—Nathaniel gritó, mientras recuperaba su cuaderno de bocetos. Pero, la página se arrancó de ella.

—Suficiente, Nataniel, ¡vete!.

Nathaniel salía corriendo, sintiéndose avergonzado.

Después de un tiempo, la Sra. Mendeleiev finalmente reanuda su clase.