DANIELA
Dolerme (ROSALÍA)
Me despierto, tumbada en una cama que no es la mia, en un cuarto que no es el mío. Por un momento me asusto, hasta que recuerdo un poco de lo que pasó anoche. Normalmente suelo recordar la mayoría de las cosas que me suceden cuando voy un poco borracha, pero con los recuerdos de anoche me esta costando un poco más. Sé que me fui con Ansu, y luego, supongo que me dormí.
Hablando de Ansu, duerme a mi lado como un bebé.
Me levanto de la cama y me miro en el espejo de cuerpo entero que hay al lado del armario enfrente del costado izquierdo de la cama, donde he dormido.
Tengo el Rimmel corrido por la cara, por suerte no me eché nada más, porque hubiese tenido la cara digna del maquillaje de un payaso.
–¿Dani? – murmura un dormido Ansu. Le miro a través del espejo.
–Hola – saludo.
Busco mis zapatos bajo la atenta mirada de Ansu, quien todavía esta tumbado en la cama.
–¿Cómo te encuentras? – pregunta.
–Me duele un poco la cabeza, pero ya se me pasará.
–Tengo pastillas abajo.
Asiento. El se levanta de la cama y se acerca.
–¿Te acuerdas de algo de lo que pasó anoche? – pregunta.
–Sé que vine aquí contigo.
–¿Ya está? – pregunta, algo sorprendido.
–Si quieres saber que si recuerdo haberte besado...si, me acuerdo.
Él asiente.
–Siento...
–No sientas nada. Además, –
–Tienes novio – termina él.
–¿Cómo...?
–Anoche, de esto entonces no te acuerdas, mencionaste a un novio.
Oh. No. Nacho.
–Debería...debería volver a mi piso, debe estar preocupado y –
–Tomate una pastilla si eso.
Asiento y ambos bajamos a la cocina. Ansu busca las pastillas y me indica donde están los vasos y el agua.
Me sirvo un vaso y el me entrega un ibuprofeno.
–Gracias.
–Nada.
El abre la nevera y coge un brik de zumo de naranja. Se lo echa en un vaso y bebe, mientras yo me tomo la pastilla.
–¿Quieres que te lleve a casa? – pregunta.
Pienso. Si Nacho ve que Ansu me deja en casa se pondrá furioso al saber que he dormido con un chico. Y más los dos juntos en la cama. Pero, igualmente, se enfadaría igual.
Miro la hora en el móvil. Es lunes, y son las once de la mañana. Esta en el trabajo, por lo que no me molestará cuando llegue.
–Vale.
Quito el modo avión de mi móvil y me llegan varias notificaciones.
Un mensaje de Dionne, preguntándome que tal la noche.
Varios de Nacho, preguntándome donde estoy, con quien, y que me ordena que vuelva a casa, hasta que leo el último.
"Tu amiga ya me ha dicho que estas dormida en su casa, buenas noches"
Suspiro. Cuando vea a Dio le abrazaré. Esbozo una pequeña sonrisa.
–¿Todo bien? – pregunta Ansu.
–Todo bien. ¿Me llevas a casa porfa? – pregunto.
–Claro.
Salimos y nos subimos en su coche. Me pide que ponga la ubicación en el GPS y lo hago, mientras el sale de la casa.
–Oye, sé que no es de mi interés ni nada, pero, ¿por qué no querías ir ayer a tu casa? – pregunta, curioso – Tu novio te hace algo? – dice, esta vez con preocupación en su tono.
–No, no. Mi novio no me hace nada – miento completamente –. No le gusta que salga de fiesta, y no quería discutir con él, ya está.
Él asiente.
–Puedes confiar en mí, lo sabes, ¿no? – dice, y me limito a asentir.
–Si, sí. Lo sé. Tranquilo. Todo bien.
Él asiente y pasamos el resto del trayecto en silencio.
–Ha llegado a su destino – dice la voz del GPS.
–Bueno, aquí se termina mi servicio como taxista – dice, y se me escapa una pequeña risa.
–Muy buen servicio – digo, siguiéndole el rollo –. Te pondré una buena opinión en Google y todo.
–Oh, por favor, sería todo un placer.
Ambos reímos.
–Nos vemos, Dani.
–Nos vemos.
Abro la puerta y salgo. Camino hasta la puerta del bloque cuando oigo a Ansu.
–¡Dani! – dice, y me giro –. Dionne me dijo algo de un trabajo en el club, aceptarás? – pregunta.
–Posiblemente.
–Pues nos veremos bastante. Si quieres algún día vengo a buscarte.
–No vendría mal.
–Adeu – dice, despidiéndose con la mano.
–Adeu Ansu.
Entro en el bloque y subo con el ascensor hasta el tercer piso. Abro la puerta de casa y no oigo nada, por lo que Nacho no está.
Decido pasarme el día viendo Anatomía de Grey, con mi pijama calentito y pica pica.
ESTÁS LEYENDO
ANTES DE TI | Ansu Fati
FanficDaniela nunca ha sido una gran fanática del amor. Y más si su actual novio no la trata como se merece. Todo cambiará cuando conozca a Ansu, uno de sus nuevos pacientes en las prácticas de fisioterapeuta en la Ciutat Esportiva del equipo de la ciudad...