Como sobrevivir a un internado

PRÓLOGO

Un campo de girasoles con mariposas se veía desde la ventana del coche. Me quedé mirado las buenas vistas que había hasta que recibí un codazo de mi hermano.
-¿No te quedarás dormida verdad?
Puse los ojos en blanco y le di un golpecito en el hombro para decir que se callara.
-Me echarás de menos.
Él se rio descaradamente y me contesto:
-Ni en tus mejores sueños Kate.
Me reí de las estupideces que a veces puede decir mi hermano.
Gire mi cabeza otra vez a la ventana pero ya no había tan buenas vistas y es que habíamos llegado a la escuela.
Era muy grande y estaba echa de ladrillo.
Nada mas entrar tuvimos que esperar en la entrada para que me dieran la llave de la habitación y el horario de las clases.
Había un montón dw cola y odio esperar a si que les dije a mis padres que me iba un momento y me fui a la cafetería que se encontraba en la planta baja.
No había nadie y eso me asustó un poco hasta que oí unos pasos detrás mío y una voz me dijo:
-Hola,¿Eres nueva verdad?
Una chica rubia con ojos verdes me miraba y estaba sonriendo.
-Si
La contesté y minutos después me dijo:
-Me lo suponía ya que este es mi mesa. La mesa de los novatos es por allá.
Su mano señalo a una mesa sucia que estaba al lado del cubo de basura.
No quería enfadarme con alguien el primer día que estaba aquí a si que me fui hacia esa mesa y después oí una voz masculina que la decía a la chica que me había echado :
-Caroline no tienes que ser tan mala, ten en cuenta que es nueva,no sabía nada.
Gire la cabeza para ver quien decía eso y un chico alto y rubio la besaba.

Odio cuando la gente muestra su cariño en público.

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-Kate, ven a la entrada, ya tenemos tu llave.
Ben ,mi hermano me llamaba desde el otro lado de la cafetería.
Caroline la chica borde le miró de arriba a abajo hasta que vio que yo me dirigía a él y yo creo que se pensó que éramos novios o algo.

-Kate tu habitación es la 507 entonces vayamos allí a dejar las maletas.
Cuando llegamos al quinto piso y nos metimos en la habitación me quedé súper contenta.
La habitación tampoco era muy grande pero molaba mucho. Tenía una cama, un escritorio y un baño.
También había un armario donde dejé la ropa y otro armario para guardar las maletas y que no se vean( Que moderno)
-Bueno Kate, nos tenemos que ir que papá mañana trabaja. Pasatelo bien lo que queda de verano y ya hablaremos.
Cuando se fueron un cubo de agua fría me cayó en la cabeza.
No los vería hasta navidad.
Ordené la ropa en el armario y minutos después alguien llamó a la puerta.
Y mis padres no eran ya que les había visto por la ventana marcharse.
¿Quién será?