Capítulo 22: Cambios

73 8 5
                                    

Kate's Pov:
Estaba mirando como la brisa del mar subía y bajaba, me encontraba en una hamaca tumbada en la playa, yo sola. No quería entrar a casa y ver todo destrozado. Me sentía muy furiosa por todo, pero, sobretodo, me encontraba furiosa conmigo misma. Podía haber huido, como había pensado días antes o solamente haberme encerrado en mi cuarto como una adolescente normal. Pero no, cuando me enteré destrocé todo lo que encontraba en mi camino.
Podía seguir sintiendo la mirada furiosa de mi madre. No. Furiosa no, decepcionada. Decepcionad al saber que su hija no quería que una persona tan influyente en su vida, una persona como una abuela, se fuera lejos y la dejara sola.

Ella me dijo que fuera algún día a Londres, para visitar a ella y a Paul. Pero no quería, tenía miedo. Miedo por ver si su nueva vida iba a ser mejor que esta y que no la echaría de menos.

Decidí volver a casa y enfrentarme al castigo que mi madre me impusiera.

Nada más entrar por la puerta de madera, vi que todo estaba ordenado.

-¿Mamá?-grité por toda la casa. Se oyeron ruidos en la cocina, y de repente mi madre salió con su delantal favorito, un color rojo oscuro que la hacían la piel incluso más clara de lo que ya era.

-Lo siento.-le dije, me acerqué a ella andando muy rápido vais corriendo y me lancé a sus brazos.

-Te perdono. No estaba enfadada contigo Kate, nunca podría.

Asentí con la cabeza y después ella se separó de mi y después empezó a hablar muy rápidamente. Eso solo lo hacía cuando estaba muy nerviosa y lo quería decir cuanto antes para que el dolor se pasea cuanto antes, me asusté un poco pero después empecé a escucharla, y sus palabras dolieron más que mil agujas en el corazón.

-Tu padre y yo estamos muy decepcionados contigo. Hemos hablado con Katherine, la amiga de tu padre y hemos decidido apuntarte a un internado en California. Te han aceptado por tus magnificas notas, no nos decepciones.

Después se dio media vuelta y antes de girar para entrar a la cocina otra vez me comentó:

-Prepara la maleta , vamos a coger un avión el lunes.

Dicho esto se fue, dejándome sola en el pasillo.

******************************

Pensaba que iba a doler más, deja todo atrás, pero iba a ser una nueva experiencia y eso me excitaba, no me gusta lo nuevo, olvidar, pero podía conocer gente nueva.

Todavía quedaban varias horas de viaje y se me hacía eterno, quería llegar ya a los cálidos paisajes de California, mis padres no estaban enfadados conmigo, más bien se alegraban de que me hubieran aceptado en un internado tan alucinante como el que iba a estudiar.

Podía sentir casi que estaba allí, casi, porque una parte de mi mente se encontraba muy lejos...

<<Puedes volver. Volver con tus amigos que te están esperando>>

Una voz me decía en mi mente, tenía los ojos cerrados y no podía abrirlos, los tenía dormidos.
La voz era muy conocida, e hizo que incluso me alegrara de volver a oírla.

<<Sólo abre los ojos>>

Volvía a exclamar. Ahora me ardía la cabeza , quería exclamar pero no encontraba mi voz.

<<Abre los ojos... Abre los ojos...>>

Y de repente, todo se volvió nítido...

Como sobrevivir a un internadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora