Como sobrevivir a un internado

Capítulo 25: ¿Qué están ocultando?

Kate's Pov:
Ya había pasado un mes desde que salimos del hospital, y aún así tenía la misma frase en la cabeza:
"Eres lo suficientemente mayor para superar a una persona Kate, sabes que no está y así será"
¿por qué mis padres eran tan exigentes respecto a este tema?

-¡Kate!-exclamó alguien. Y de repente me di cuenta de que estaba en clase de música, Joe estaba a mi lado y me estaba llamando. -¡Hey! ¿qué te pasa? ¿Estás como... distraída.

-No me pasa nada, sólo tengo sueño, no he dormido nada.- mentí.

-Mañana hay una excursión a la playa. ¿vas a ir verdad? -me preguntó.

-Claro, ¿Qué haría aquí sino?- le respondí.

-No sé, últimamente pasas mucho tiempo con Harry, creo que te estoy perdiendo. -me confesó.

-¿Per-perdiendo?-pregunté mientras se me quedaba un nudo en la garganta.

-Claro. Eres mi mejor amiga y últimamente estas con Harry y no pasamos tanto tiempo juntos, estáis todo el rato en la biblioteca y no sé qué hacéis.

¿Debería contarle acerca de la pelea entre nuestra nueva amiga y el diablo de Caroline? No. Es algo personal que solo Harry y yo sabemos y quiero que siga siendo así.

-Nada, es un sitio muy tranquilo para estudiar.-volví a mentir.

Él asintió pero yo me sentía mal, él siempre ha sido mi mejor amigo...

-Pero... mañana si quieres... en la excursión volvemos a retomar nuestra amistad y... vamos juntos en el bus y... esas cosas... como antes. -le propuse.

Una sonrisa se formó en la cara de mi amigo, y el efecto que siempre produce en mí hizo que sonriera yo también.

El timbre de clase sonó y los dos juntos bajamos a la cafetería para dar por finalizadas las clases de hoy.

Sólo quedaba una semana para Navidades, y lo peor empezaría el lunes,  los exámenes finales.

Mañana iba a ser sábado, y por lo tanto íbamos de excursión a una playa cercana, íbamos a alojarnos en un hotel en el mismo paseo marítimo y pasaríamos toda una semana allí.

Pensaréis que estamos locos, ir a la playa en medio del invierno, pero aquí en California hace calor la mayoría de los meses del años.

Mientras andábamos entre las mesas de la cafetería, toda la gente se giraba para vernos, y me estaba poniendo un poco nerviosa. Cuando volví del hospital, toda la gente me miraba pero dejaron de hacerlo la semana pasada, y ahora vuelven.

-¿Qué está pasando?-le pregunté en un susurro a Joe.-¿Por qué nos miran así?

-No lo sé, tu sigue andando.-me respondió también susurrando, me cogió la mano y juntos pasamos por las mesas, con todas las miradas puestas en nosotros. Cuando llegamos a nuestra mesa, sólo estaba Abby que nos sonrió nada más vernos.

Me senté como siempre al lado suya, y Joe al lado mío.

-¿Qué habéis hecho?-nos preguntó.-Todas las miradas están puestas en vosotros.

-No sabemos, simplemente nuestra presencia en la cafetería altera a todo el mundo, somos tan guapos como por fuera y por dentro.-empezó a presumir Joe.

Me empecé a reír de una manera tonta, y Joe también, en cambio Abby nos miraba a los dos como si estuviéramos locos.

La cosa se calmó cuando vino Kile seguido por un silencioso Ethan. Seguía igual de cambiado, no hablaba con nadie, estaba siempre encerrado en su cuarto, y, cada vez que me miraba, no eran esos ojos azul océano que siempre están  feliz y son muy tiernos, no, me miraba con tristeza, y no sabía qué decirle.