Y aquí estoy con un nuevo capítulo! Bueno, comencemos!
Volteé lentamente para encontrarme con su rostro. En verdad estaba enfadado.
-¿Cómo le conoces?- volvió a preguntar, mientras se acercaba a mi.
Odiaba admitirlo, pero creo que sentía un poco de miedo.
-Mira, antes, tranquilizate- le dije mientras sonreía. No fue buena idea, creo que hice enfadar más a Peter.
Antes de que lo supiera, estaba apoyada en un árbol, Peter me estaba agarrando las muñecas, y me estaba mirando con esos ojos llenos de furia.
-Parece ser que lo de tranquilizarse no es una opción...- susurré mientras sonreía.
Él solo gruño y me enseño los dientes. Se estaba comportando como un animal.
-Vale, vale... Te lo diré- dije mientras cogía una gran bocanada de aire. Estaba muy nerviosa.
-Al intentar volver a vuestro campamento, me perdí y me quedé aquí un rato, ya sabes, para descansar los pies- comenté divertida. Él simplemente volvió a gruñir. Al parecer no estaba en el humor para bromas.
-Bien, sigo. Entonces, Garfio vino por detrás y me empezó a hablar, y yo, por ser educada, le contesté, y así empezamos a charlar...- expliqué mientras miraba hacía abajo.
No quería mirar hacía arriba, porque sabía que me encontraría con esa mirada.
Me apretó un poco la muñeca, lo cual me provoco un poco de dolor. Así que solté un pequeñísimo quejido.
-¿Por qué no le ignoraste?- me cuestionó enfadado.
-Oh venga ya, no tenía ni idea de quien era...- me defendí mientras hacía un puchero. La verdad, parecía una niña pequeña haciendo pucheros.
Pero yo tenía la razón, ¿cómo diablos iba a saber que el capitán Garfio se llevaba mal con él?.
-Dime que te ha dicho- ordenó mientras me seguía apretando la muñeca.
-Pues, me ha hablado de ti- confesé mientras me mordía el labio.
Creo que si le hubiera mentido hubiera sido mejor.
Peter, me soltó la muñeca y me miró.
-¿Qué te ha dicho?- preguntó serio. Era la primera vez que le veía tan serio. Era.. muy raro.
-No creo que quieras saberlo- le dije nerviosa. Mientras reía.
No sé porque reía, era algo que me salía solo.
Aunque, creo que reía por no llorar.
Peter solo me fulminó con la mirada.
Me cogió del cuello y me puso delante de él, agarró su daga y me la puso en el cuello.
Sonrió divertido y susurró:
-¿Ahora me lo dirás?- yo solo asentí sonriendo.
-Me ha dicho... que eres un villano. También me ha contado que hace tiempo una chica, Wendy, estuvo aquí. Él me ha contado que te quedaste muy triste cuando ella se fue...- al terminar note como Peter se enfurecía mucho más.
Ya que su agarré se había hecho mucho más fuerte.
-Bien, este ha sido un error que espero que nunca más cometas- dijo mientras su daga se movía de mi cuello a mi mejilla.
Me hizo un pequeño corte en esta, y me apartó de él.
Yo solo le miré confusa. No entendía porque no me había hecho nada... Quiero decir, él estaba tan enfadado...
-Lo siento- murmuré mientras le miraba.
Él solo alzó una ceja y rodó los ojos.
-Nunca mas vuelvas a acercarte a ese pirata, ¿entendido?- preguntó mientras se alejaba.
Yo solo dije que si, y me quede mirando como se iba.
-Por cierto, no soy un villano...- susurró mientras se volteaba y sonreía.
Bueno, eso ya lo sabía. Quiero decir, él no parecía un villano. Aunque, si debía aceptar que algunas veces si me daba un poco de miedo.
Decidí seguir a Peter, él sabía donde estaba el campamento. Así que, empecé a seguirle de lejos.
No quería encontrarme con él después de esa pequeña pelea. No sé que me haría si se enterara de que lo le había sugerido a Garfio.
Al llegar al campamento, todos estaban sentados alrededor de una fogata.
Peter me sonrió y me ofreció un asiento.
Yo simplemente me senté, mientras sentía muchas miradas clavadas en mi. Al parecer, todo el mundo se había percatado del corte en mi mejilla.
Peter se sentó al lado mío y saco una pequeña flauta. Si no me equivocaba, esa flauta se llamaba "Flauta de Pan".
La tuvo un tiempo entre sus manos, mientras la miraba y sonreía. Levanto la mirada de su flauta y miró a todos los presentes.
-Chicos... ¿Estáis preparados para divertiros?- preguntó Peter contento.
Todos los muchachos vitorearon y gritaron que si.
Peter empezó a tocar una melodía muy hermosa, mientras todos los demás bailaban una danza muy graciosa alrededor del fuego.
La diversión no duro mucho, porque de repente millones de redes empezaron a caer del cielo.
Unas atraparon a todos los muchachos, otra retuvo por un momento a Peter, pero este se liberó rápidamente.
Al momento, sentí como alguien me ataba las manos a la espalda, y me ponía un trapo en la boca para que no pudiera gritar.
Peter miró a su alrededor, mientras sonreía.
-¿Garfio?- preguntó sonriendo.
Y hasta aquí el capítulo de hoy, espero que os haya gustado, byeee.
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Neverland.
Fanfiction-Quiero irme a mi casa, y tu no me detendrás, solo eres un niño malcriado- le dije. -Este niño malcriado esta a punto de clavarte su puñal en el corazón- contestó el chico de ojos verdes burlesco. -Esperó que madures pronto- dije intentado parecer...