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» cuatro

Me sobresalte al escuchar eso, que rápido me di vuelta y encarar al pibe.

Estaba apunto de mandarlo a la mierda por interrumpir mi momento más prestigioso. Pero me quede con la palabra en la boca cuando lo inspecciono con la mirada y, bueno, tengo que admitirlo; no estaba nada mal. Tenía linda facha y más con esos ojazos que podía ver por la poca luz tenue que había en el bar.

── Eeeh... ──literal quede como Maradona dando una entrevista.

Lo veo sonreír, y wachooo que hermoso pibe.

── Sos amiga de Maia, ¿no? ──me pregunta y fruncí el ceño.

── ¿Cómo sabes eso?

── Porque soy amigo de Mateo. ──dice y señala con la cabeza en dirección hacia el susodicho. ──Me dijeron que te acompañe para que no estés sola mientras bailas.

Cuando miro hacia donde el pibe desconocido apuntó, veo a la parejita mirándonos y Maia me levanta en el dedo pulgar; dándome a entender que todo estaba bien o que sé yo. La cosa acá era que, tremendo bombón era al que tenía al frente mío.

── Ya veo. ──fue lo único que dije.

── ¿Querés ir a tomar algo? ──me apunta con el dedo el vaso (vacío) que tenía en mi mano y lo miro dudosa, y se dio cuenta. ──Tranquila, no haré nada. Sólo es una invitación, ademas pago yo.

── Si lo pagas vos, entonces mándale nomás.

Veo que vuelve a sonreír y me contagia la sonrisa.

Fuimos hacia la barra de bebidas y esperamos un toque hasta que nos atendieran. Mientras tanto el pibe de hermosos ojos se quedó al lado mío, de en vez en cuando me miraba y me regalaba una sonrisa o me decía algo respecto a la música que pasaba o de que bebida iba a tomar. Pero sin dejar de decirme "nena" no me molestaba que me llame así, pero quería saber su nombre.

── Eu, ¿cómo te llamas? ──le preguntó por fin cuando me entrega el vaso con fernet y quedáramos apoyadas en unas de las columnas del lugar.

── Valentín, ¿y vos, nena?

── Kira.

── Kira. Lindo nombre, como vos. ──dice en un chamuyo y rodeo los ojos.

── Fingiré que no escuche eso. Pero, Valen, gracias por el trago ──doy un sorbo.

Se ríe. ──Veo que sos de esas que no le gusta los chamuyos directos.

── Mmm... puede ser ──me encogo de hombros. ──Solo sé que no me gustan. Suenan a levantes de viejos camioneros nomas.

── Sos muy-

Lo interrumpo. ──¿Rara y seca? Lo sé. Es mi especialidad.

── No, nada que ver. Sos de tener un carácter bastante potente, creo. Pero también linda ──me guiña el ojo y solo niego.

Nos quedamos conversando sobre algunas cosas, por ejemplo; De dónde conocía a Mateo y a Maia. Otras cosas sobre anécdotas variables y así. Hasta que veo a mi mejor amiga buscando a alguien con la mirada, hasta que su ojos me enfocan y sonríe mientras se acerca hasta donde estábamos con Valen.

── Buenas. Te la robó un rato a tu Julieta, Romeo. ──dice Maia al agarrarme el brazo y me jaló hacia ella.

── Tráemela a tiempo. Estoy cómodo con la nena ──lo escuche decir, y lo miro con el ceño fruncido por lo dicho y Valen me regala una sonrisa.

No lo seguí viendo más porque Maia me lleva con ella hacia (donde se supone que es) los baños. Una vez ahí adentro, su mirada intensa se posa en mí y parpadeo confundida.

── ¿Qué?

── No me vas a contar, ¡Eh!

── ¿Contar que? 

── Dale, no te hagas la boluda. ¿Qué onda con Valen?

Y ahí fue cuando me cayó la ficha de lo que quería interpretar, cosa que me hizo negar.

── Nada de lo que te empieces a imaginar. ──contesto mientras me veo en el espejo y me retoco un poco el pelo, que lo tenía un poco despeinado.

── No sé. Pero se veían bien hablando. ──me sonríe coqueta y rodeo los ojos.

── Apenas lo conozco y ya te armas todo en tu cabeza, Mai.

La veo encoger sus hombros, sin quitar su mirada y sonrisa picarona. ──Yo digo lo que veo. Por lo que sé, te veo cómoda con Valentín y él con vos.

── Ay dios, sos un caso perdido. ¿Mejor vamos?

── Iy dios, sis in cisi pirdidi. ──me imita con su voz chillona y le jalo un mechón de pelo, y se queja. ──Ya, bien. Vamos.

Sonreí victoriosa y salimos del baño para volver hacia donde estaban los otros. Pero cuando llegamos, solo noté que Mateo estaba con otro pibe que no era Valentín. 

── ¿Y Valentín? ──sin importarme, pregunté de la nada.

── Fue hacer no sé qué. Pero ahora volvía. ──contestó Mateo y Maia se va con él.

Me quede cerca de ellos mientras recibe las redes sociales un toque, más que nada Instagram para publicar una foto del lugar en donde me encontraba. También contesté un par de mensajes a mi papá, de que estaba bien y que el lugar era piola. Decido guardar mi celular para acercarme y avisarle Maia que iría al baño rápido y volvía.

── ¿Te acompaño?

── Nop. Ya vuelvo, quédate tranqui~

En medio el camino, siento unas manos atajar mi cadera y parte de mi cintura, que me asusto un montón y me doy rápido la vuelta.

Al saber de quién era; me calmo un toque.

Si fuera otra persona ya lo andaría mandando a la mierda.

Volviendo a lo que nos compete; su sonrisa por un momento me hipnotiza.

── ¿A dónde vas, nena linda?

Era él. Valentín.

Al fin se conocen loco! Dea, veo si subo un capítulo más hoy :).

Publicación el 28 de agosto 2022
Republicación el 31 de julio 2023