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» ocho

Cuando pensé que podía para más, sentí lo débil que estaban mis piernas luego de ensayar sin parar la coreografía que me había asignado la profesora.

── Dios, flaca para un poco. Un día te vas a matar de tanto bailar. ──escucho la voz de una de mis compañeras de baile y sonreí, con el sudor cayendo sobre mi frente que rápido fui a buscar mi toalla y mi botella, volviendo en dónde estaba Constanza.

── Al menos el esfuerzo se va a ver más a delante. ──bebí de la botella y Coti dió una afirmación. ──Ademas, quería terminar temprano.

── ¿Por? Es raro que no te quedes horas extras ──pusó su cara de pensar.

── Por nada especial, me iré temprano hoy.

Me encogí de hombros, pero la verdad era que cuando saliera de la academia me iré a encontrar con él. Si es obvio de quién hablo, de Valentín.

── No te creo, pero voy hacer que te creo.

── Tonta. —reí.

Pasaron los minutos y por fin salí de ahí, me despedí de Coti yéndome en dirección contraria en dónde ella se iba. Tengo que pasar por la plaza, él dijo que lo esperara ahí ya que el salía de trabajar. Por lo que me contó, Valentín trabajaba en una heladería, que le pertenecía a su tío, el ayudaba en la limpieza y era repartidor. Incluso me mandó el código para ver las ofertas que tenien en la tienda y la verdad, por lo que está el país hoy en día, está económico todo y buen precio.

Tuve que tomar el bondi, por suerte no estaba tan lleno como es de costumbre. Y grande suerte, pude sentarme en uno de los asientos de atrás y coloque los auriculares inalambricos para escuchar un poco de música.

Chat de, Valen 👀

Yo:
Hace 5 minutos salí de clases,
estoy yendo en el bondi.
Te aviso cuando bajo.

Valen:
Joya.
Estoy por salir del laburo.

Le reaccione el último mensaje con un emoji con el pulgar hacia arriba.

Yo:
Te avisó cuando estoy cerca.

Valen:
Si, dale.

Te llevo helado de oreo.

Yo:
Te ganas mi corazón así.

Valen:
Al menos se lo que te gusta.

Estaba por contestarle, pero me puse un poco nerviosa al leer lo que puso. Se acordó lo que le dije cuando me comentó en dónde trabaja y que de joda le había dicho que me regalará helado de oreo, que era mi sabor favorito.

Solo lo deje en visto y espere alrededor de 15 minutos para bajar del bondi. Acomodo el bolso en mi hombro y procedo a mandarle un mensaje a Valen, avisándole que ya baje y que le iba a esperar en la parte de la fuente, que quedaba en el medio de la plaza.

Me senté en una banca, dejando a un lado mi bolso, y la imagen estética de la plaza me hizo abrir la cámara de mi celular y empezar a sacar fotos para luego subir a historia de Instagram, si la aestethic salada diría el boludo de mi hermano.

── Siempre sacando fotos, pero nunca me vas a sacar a mi una foto. ──la voz de Valentín se hizo escuchar y desvíe la mirada para mirarle a él, sonreí.

── Pero si cada vez que quiero sacarte una foto te tapas la cara, bobo.

Él termino de acercarse, pero antes de sentarse a mi lado dejó un beso sobre mis labios, que obviamente correspondí, suspiré un poco antes de separarnos y Valentín por fin se sentó en la banca, al lado mío.

── Hola.

── Hola. ──devuelvo el saludo, relamiendo mis labios y este alza la bolsa transparente que trajo consigo. ──Pense que era mentira sobre el helado.

── Yo nunca miento, siempre cumplo.

Entrecierre mis ojos. ──Ajá.

── Es posta, encima puse todo el pote con tu gusto de helado. ──me extendió la bolsa y la agarre apenas me la dió, saque el pote chico y abrí de este para verificar si era posta lo que decía. Y si, efectivamente decía la verdad. ──Ves.

── Está bien, te creo. ──saque las cucharitas de la bolsa y una se la di a él, pero no lo hizo.

Frunzo el ceño, ¿y ahora que le pasa?

── ¿Qué?

── Dame un beso.

Levanté una ceja. ──Y eso por qué.

── Porque dudaste, así que cada vez que dudes de mi me tenés que dar un beso.

── A mira vos, me sarmoneas con eso.

Valentín se encogió de hombros y se acercó un poco más a mí, colocando un brazo por detrás de mi cintura y me encurve un poco.

── Estoy transpirada, Valen ──le avisé pero el hizo un gesto de cero importancia, dios santo este pibe.

Me acercó a su cara y planté un beso sobre sus labios. Iba hacer corto, pero él llevó su mano (la que había colocado atrás de mi cintura) a mi nuca y profundizó el beso cuando pidió permiso para que separara un poco mis labios, y fue lo que hice.

Él tenía el control del beso, dejando que su lengua acariciara mi cavidad bucal y explorará en ella, se sentía bien esto.

Y lo digo posta, lo que tenía con Valen hasta el momento me hacía sentir bien después de mucho tiempo.

── Bien, ¿tomamos el helado o seguiremos chapando? ──le pregunté al separarnos y se ríe un poco.

── Un poco de cada uno.

Reí. ── Tonto.

Holis~ después de mucho tiempo volví a publicar de nuevo la historia, pero quedé mal de no seguirla y sentí que venía re bien escribiendola (espero que si).