𝒔𝒊𝒓𝒆𝒏𝒔 » 𝐛𝐭𝐬

I

Dos; I don't like myself

One day, I'll change my ways
'Til then I'm stuck in this space
Shut down and hiding my face
Tuned out and losing my faith
...
I wanna love myself, just like everyone else
But there are times when I don't like myself
I don't like myself – Imagine Dragons

Un año después.

Hina se recostó en el césped, esperando que los rayos del sol hicieran algo por ella. Estar preocupada por su hermano quien había dejado de responderle los mensajes hacía un día, la tenía con la cabeza hecha un remolino.

—Livier tampoco contesta —le informa Lucas, de pie, recargado casi en el árbol, optando por la sombra. Revisaba sus mensajes, y correos, pero no había señal de ellos—.

Hina asintió, creyendo que Jimin quiso irse el fin de semana a alguna playa, o a pescar, o lo que sea.

—Tal vez sólo quiere paz —comenta, pero sigue la espina en su cabeza. Se permite cerrar los ojos y pensar en que cuando regrese podrá pasear con él, y estar así, o como cuando eran niños—. Yo lo quiero.

Lucas observa a su alrededor, el campus apenas tiene un par de almas vagando por ahí, siendo fin de semana normalmente nadie se quedaba. Pero Hina no había salido temprano de su habitación, durmiendo de más, debido al desvelo por esperar su llamada.

—Puedo llevarla a casa ahora mismo —comenta, y sonríe por lo bajo al verla tan tranquila yaciendo en el césped. Su vestimenta era blanca, por completo, y por supuesto que cuando se levante estaría estropeada. Lo que no le importaría.

Pronto, se percata que alguien se acerca con rapidez, y en un acto reflejo, pasa su mano hacia su espalda, dispuesto a tomar el arma que mantiene resguardada.

— ¡Soy yo, Lucas! —grita Jungkook al verlo moverse rápido, y entonces se ríe, mostrando sus dientes de conejo. Lucas suspira, y regresa a su posición inicial—. Lamento eso.

Se disculpa y él niega, un tanto disgustado, pero ya conociendo al joven novio de Hina.

— ¿Desayunaron? —pregunta, y él niega, estrechando la mano del hombre. Hina abre los ojos cuando siente que el sol es cubierto, pues Jungkook asoma su cabeza directo a la de ella, para llamar su atención—. ¿Tienes hambre?

Su sonrisa se ensancha al chocar miradas. Su corazón parece feliz, y lo demuestra cuando se levanta con rapidez para abrazarlo—. Un poco, sí.

—Bueno, salgamos de aquí —le sonríe coqueto, robándole un beso en los labios—. ¿Vamos en tu auto? Mandaré el mío al taller, algo sucede con los frenos.

Hina asiente tomando su mano mientras caminan. Mira sobre su hombro, y Lucas va dos pasos atrás de ella, en un ángulo de noventa grados. Casi pudo medirlo, ya que siempre hacía aquello si iba acompañada. Quiso reír.

—Lucas puede revisarlo si quieres —comenta, y Jeon frunce el ceño.

— ¿Sabe de eso? —Pregunta y Hina duda, lo que hace reír a su novio—. No puedes hacer que él arregle todo.

—Pero él sabe todo —se defiende y Jungkook tira de ella a su pecho, para abrazarla por los hombros.

—Dale un respiro —murmura, sabiendo que ella pedía cada cosa que se le ocurría al joven custodio tras ellos. Al igual que Taehyung. Hermanos tenían que ser.