6 .: Prisionero :.

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Se paseaba inquieto en su habitación, que sentía al estar junto al mayor?Esa simple pregunta disparó un sin fin de emociones en él.

Todo se movía dentro cuando aquel hombre aparecía, su corazón latía fuerte y parecía sufrir un colapso, pero había un detalle: eran hombres.

Compendia un poco osea, tampoco era alguien cerrado a cosas nuevas, pero si seguía la lógica en este mundo, él habría sido una mujer, como en esta vida no está, en la siguiente ósea, la que él está viviendo, nació hombre, como se les ocurrió que podía pasar algo entre ellos siendo los dos hombres!!

-Están locos- se dijo frustrado, lo habían sacado de su realidad para venir a que se lo cogiera un tipo 6 años mayor, porque tenía que admitirlo, no imaginaba a ese imponente tipo mordiendo la almohada, no! Eso le tocaría a él, si tan siquiera pensaba aceptar semejante locura- ¡No! Que se jodan yo me largo de aquí- se dijo firme.

Sintió unos golpes en la puerta y seguido vio al peli negro entrar con el semblante serio.

-¡Ni sueñe que me pondrá un dedo encima!- Yoongi suspiro, ocurrió como él lo había predicho, era su alma destinada, pero no pertenecía a este tiempo.

-Tranquilo, solo quiero hablar- camino hasta quedar a una distancia prudente- entiendo que esto debe ser difícil, te sacaron de tu mundo para traerte a este, créeme de algún modo lo comprendo- Muy molesto y ofuscado, pero sin duda Jimin se perdía cuando el mayor hablaba esa voz ronca lo debilitaba- según los ancianos no puedo regresarte a tu mundo en este momento, tanto ellos como la magia está muy débil-

-¿Está pensando en dejarme ir?- algo dentro del menor dolió, tan fácil se desharía de él sin luchar solo así, Yoongi asintió.

-Eres mi alma destinada, pero tampoco puedo tenerte aquí a la fuerza- no se miraban, tenían claro que si lo hacen no podrían detener aquel llamado que surge entre ellos, sus almas se pedían y ellos luchaban por contenerlas, Yoongi miraba una pared cualquiera y Jimin el suelo- así que tendrás que esperar un poco -

-Cuanto?-

-Por lo menos un mes- el menor suspiro y se sentó en la cama, tampoco tenía mucho que hacer en su mundo, vivía solo, nadie esperaba por él.

-Entiendo, pues si no hay de otra esperaré- y eso sí sorprendió al mayor, creyó que reclamara por el tiempo, pero lo había tomado bastante bien- solo una pregunta- el mayor asintió- soy prisionero o como, digo por si quisiera salir a recorrer- el mayor tomó valor y lo miro, tenía esa azulina mirada sobre él y las ganas de besarlo crecieron, mismas que Jimin sintió al ver la oscura del mayor.

-No, no eres prisionero, mientras estés aquí eres un invitado del reino- sus manos sudaban y sus pies picaban por caminar hasta donde él estaba- solo...- carraspeo- solo debes avisar siempre que quieras salir, un guardia debe estar contigo - sin ser consciente camino lento hasta llegar junto al menor, que pestañeaba rápido tratando de controlar sus propias ganas de estar con el mayor, se levantó quedando de pie junto a la cama.

-En... entiendo - se sonrojó al sentir a Yoongi junto a él y así como había sucedido el día entero, llegando un punto sus almas tomaban el control, Yoongi tomó la suave mejilla de Jimin quien solo cerró los ojos disfrutando aquel tacto, sintió otra vez una mano tomar su cintura y sus brazos se enredaron el cuello del mayor, fue un beso suave, sentía la boca del mayor moverse con ritmo sobre la inexperta suya, cuando sintió la lengua ajena abrirse paso soltó un suspiro que murió en aquel beso, sin duda sería un largo mes

~Desde Otro Tiempo~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora