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Feliz, no era la palabra, estaba dichoso, veía la barriga de su amado, crecer mes con mes, y no podía acallar la felicidad que sentía, siempre estaba con él, si se alejaba se sentía ahogado, el bebé pedía por ambos, Yoongi mimaba a sus niños con cada antojo que este tenía, le daba todo su tiempo.
Cabe decir que la noticia a la bruja esa no le gusto mucho, pero tampoco pudo decir mucho cuando Yoongi le pidió de forma, poco amable que se largara, ya que ahora no tenía propósito alguno ahí.
Aunque tampoco lo perdonaron fácil, sin duda Jimin no olvidaría que estuvo a punto de casarse con otra, se lo recordaría hasta el último de sus días.
-¿Estás bien amor? - pero de poco las cosas volvían a ser como eran.
-Si tranquilo- tenía ya 6 meses, su bebé se movía bastante más si su otro padre estaba cerca.
-No temas decirme si algo te incomoda o molesta - sin duda la magia usada para traerlo había cambiado un poco su cuerpo, más bien su alma fue la causante, en esta vida su alma le habría pertenecido a una mujer, al traerlo aquí su alma adoptó aquella singularidad, así que modificó aquella parte, dándole así la capacidad de dar vida, como bien decía su apodo, era un doncel.
-Todo está bien amor? - si había que admitirlo por momentos era asfixiante, pero quería consentir a su rubio, después de todo lo que lloro por él, era lo menos que podía hacer,
-Bien, estaré en el estudio, sea lo que sea solo manda por mí -
-Si Yoonie, ve tranquilo, estamos bien -beso sus labios y dejo un beso en la barriga que se movía un poco - dice que vayas tranquilo -
Salió a caminar al jardín, como cada día después de comer mientras su casi esposo estaba atendiendo sus labores, esta vez quiso ver las últimas flores que estaban en aquel lugar, las que por x motivo nunca lograba admirar, Hobi lo vio entrar en un pasillo de rosas azules, y sonrió, sin duda amaba las flores este lugar le traía calma, más ahora en su estado.
Con el correr de los minutos, Hobi noto que Jimin no aparecía, tampoco lo oía, ya que solía gritarle cada 5 segundos por algo nuevo que encontraba, pero ahora nada sólo silencio, entró por aquel pasillo y caminó hasta dar con el final, pero ni rastros de Jimin.
-Joven!?- gritó, espero un poco, pero no tuvo respuesta- Joven!!- esta vez más fuerte, pero nada
-Jimin!!!- se estaba comenzando a desesperar.
Cuando la puerta de su despacho sonó, con demasiada urgencia, algo clavo en su pecho, vio como Hobi y Taemin entraban por la puerta, agitados, sus rostros sin duda reflejaban preocupación y miedo.
-¿Qué ocurre? -
-Majestad, el joven no está...-
Todos los guardias y gente del palacio recorrían de punta a punta el palacio, los patios, todo, Yoongi caminaba nervioso por los corredores de aquel jardín, mientras Adora buscaba nerviosa al joven.
-No está majestad, no hay rastros de él por ningún lado -
-Imposible, Hobi lo vio entrar al jardín, no pudo solo esfumarse - su pecho se apretaba, dolía no saber dónde estaban sus dos razones para vivir.
-Nadie lo ha visto majestad, es como si la tierra se lo hubiera tragado -
-Sigan buscando!-
Seokjin fue con los brujos, pero estos le dijeron que no se había utilizado magia, el joven seguía en este tiempo, solo que estaba perdido, trataron de buscarlo con magia, pero no nada, algo impedía que vieran con claridad su ubicación.
-Jimin amor dónde estás?- dijo casi ya al borde del llanto, su mayor temor era que el tiempo lo reclamara y llevará de vuelta al mundo o que alguien se lo hubiera llevado en sus propias narices.
-Tranquilo hijo, veraz que aparece-
-Tienen que aparecer, porque si no, pondré el mundo patas arriba si alguien le ha hecho algo- sin duda Yoongi sin Jimin volvía a ser ese rey frío.
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~Desde Otro Tiempo~
Fantasia~Madre Luna Te Lo Pido, Muéstrame El alma De Mi Destino~ Yoongi es un rey que no cree en el amor, ya que su alma destinada jamás apareció, por eso cerró su corazón y solo se dedicó a su pueblo. Jimin es un joven que cree que el amor es lo más bello...