Corazón confundido, lo que no siento por nadie más. (Poco x Emz)

ᴛᴇ ᴇxᴛʀᴀñᴏ

Esa misma noche, la chica zombie acomodaba una almohada para acostarse a dormir, revisó su teléfono y no había nada relevante para ella, por lo que se aburrió rápidamente con facilidad; no fue hasta que una voz la llamó a la puerta.

-¡Emz! Recién Frank hizo gelatinas ¿Quiéres una?

-No Mortis, será mañana, debo descansar.

Ella ni siquiera se molestó en abrir la puerta, por el momento no quería saber nada.

-Pero es muy temprano, además no nos importa que sea de noche.
-Este apoyaba su pala en su hombro-

Al parecer estaba por salir sin importarle nada, pues la lluvia había terminado una media hora atrás.

-No importa, quiero descansar. -Aseguró -

-Y yo que te quería invitar al negocio de Barley.

El vampiro miraba su mano desocupada con una sonrisa, pues pensaba que la zombie abriría la puerta
¿Lo hizo? Si.
Emz abrió la puerta fuertemente golpeando al vampiro en la espalda, pues la puerta se abría hacia afuera.

-¿Cómo cres que voy a ir ahí después de lo que pasó? Poco va muy seguido ahí, se pondría todo muy incómodo.

-Emz, Poco no a salido ya de su casa desde que tú no sales, nadie lo había visto,
Ni yo. -Le aseguró mientras sobaba su espalda -

-¿Cómo dices?

-Como lo oyes, mira que quizá él te tiene más miedo a ti que tú a él.

-¿Miedo? ¡Para nada! Quisiera verlo, si, pero no es el momento.

-Como tú digas. ¿Vienes o no?

-¿Por qué no vas mejor con Frank? -Ella se cruzó de brasos-

-Por favor, ¿Con Frank? ¡Ni quiere salir! Ni idea porque, ni que estuviera en cautiverio.

Comenzó a reírse por unos segundos mientras su sobrina lo veía confundida.
Encerio que Mortis se reía de la nada, o eso creía ella.

-En fin, ¿Vienes?

La zombie aceptó, pues pensaba que no tenía de otra, temía encontrarse con el mariachi, pero para su ¿suerte? eso no sería posible. Tomó su bolso, su teléfono y una lata de laca y siguió a Mortis

Ya en el lugar ambos vampiros se sentaron en una mesa, los juegos de vencidas todavía no terminaban, cosa que a Mortis no le interesaba, sólo se sentó ahí viendo lo que ocurría.

-Por cierto, ¿No habías dicho que Frank hizo gelatinas?

-Nah, era pretexto para sacarte del cuarto. -Se recargó en la silla-.

La chica no le dio importancia, en el fondo le daba igual, observó a los que ahí se encontraban y pudo ver a Amber y al Primo riéndose y haciendo bromas mientras estaban bastante cerca de los que estaban compitiendo. Temió por unos momentos pero se dio cuenta de que Poco no se encontraba ahí.
Pero eso no la hizo sentirse mejor, ella encerio quería ver al mariachi, de verdad lo extrañaba.

Por otro lado Amber se acercó al mostrador para comprar una bebida y regresar al lugar donde ya hacían varios brawlers, pero cuando pagó vio a su alrededor, vio a Mortis y a Emz en la misma mesa, se alarmó y volvió con rapidez al lugar donde estaba El Primo.

-¡Primo! ¡¿Dónde dejaste a Poco?!

-No te alteres, Poco está ahí -Señaló a un un chico casi al tamaño de la estatura del esqueleto -

-Una disculpa, pero... Te estás equivocando. -Le dijo un pequeño robot minero al luchador-

Amber se alarmó aún más.

-¡Se supone que vinimos aquí para que se distrajera!

-¿Por qué tanta alteración? No entie-

La traga fuegos le señaló con la mirada a Mortis y a Emz, El Primo fue rápidamente en busca de su amigo. No fue hasta que llegaron a una mesa alejada, era exactamente la misma mesa donde el mariachi había estado junto a Shelly y Colt.

Shelly: ¿Buscaban algo?

El Primo: Verás... ¡Poco se nos perdió!

Colt comenzó a reírse por tal cosa por lo que Shelly le dio un codazo en el estómago dejándolo totalmente callado como si se tratara de una tumba

Shelly: Bueno, Poco se fue hace una hora, estábamos con él pero se puso medio loco viendo una foto.

Amber y El Primo se quedaron en silencio, en cambio Colt trataba de aguantarse la risa.

Amber: ¡Gracias! Ya nos tenemos que ir. ¿Verdad Primo?

El luchador asintió con la cabeza, ambos se fueron avergonzados del lugar después de un rato más.
Cuando esto ocurrió Colt volvió a reírse a carcajadas golpeando la mesa, Mortis y Emz lo veían raro desde su mesa.

-¿Escuchaste eso? -Preguntó Mortis-

-¿Qué cosa? -Respondió la zombie -

- Dijo que Poco se puso loco viendo una foto.

-Si, ¿Y?

-Tú subiste una foto hace rato. -Cruzó los brazos-

-No creo que se trate de eso.

Ella estaba segura que no era eso, pero quería saber que estaba pasando con él.
¿No salía de su casa? Eso le preocupaba, quería buscarlo y arreglar las cosas, escuchar lo que él tenía que decir, está vez lo haría.

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-Poco... ¿Te ha llegado a gustar alguien?

El chico se quedó callado por unos momentos, estaba seguro de la respuesta y seguro de lo que era el amor

-Pues yo... -Sentía dificultad para hablar-

-¿Es complicado verdad?

-Un poco ¿Tú estás enamorada de alguien?

-La verdad es que si, él es un chico muy amable, honesto, agradable, es muchas cosas buenas. -Se puso roja al decir eso frente a él -

-Es un chico con suerte de verdad.

-Poco, necesito decirte algo y hacerte una pregunta.

-Claro, pero, ¿Y eso que tienes ahí? -Señaló la rosa en una de las manos de ella-

-Es justo de lo que quiero hablarte.

-Te escucho.

-Necesito tu "apoyo"

-¡Por supuesto! ¡Dime! -Se sintió emocionado al instante -

La chica solo se puso nerviosa.
Mientras el mariachi la vio directamente a los ojos, lo que enloqueció más a la zombie.

-Es que... -Suspiro- tú me gustas mucho -Tomó la mano del esqueleto -

-¿De verdad lo dices? -se puso rojo de golpe -

-Si, como lo escuchaste,
Tú... ¿Piensas algo? ¿Quiéres estar conmigo?

-Yo... Si. Pienso algo, eres una chica muy especial para mí, eres bastante linda, la mujer indicada.
Y mi respuesta es si, si quiero estar contigo. -Tomó de igual forma la mano de la chica con su típica sonrisa de siempre.

Ella lo abrazó fuertemente, le dio aquella rosa y lo vio a la cara para besarle pero...

Despertó confundido, se talló uno de sus ojos para volver a su realidad, al reflexionar eso se puso rojo rápidamente.
Había sido solo un sueño.

Se desepcionó al instante.

-Si yo hubiera dicho que si... -Suspiro mientras miraba el techo-.