—Bueno mañana en la mañana— dijo el pelinegro acomodándose los zapatos en el genkan.—Ya es algo tarde, así que tengo cuidado— Hinata le entrega sonriente una pequeña mochila en donde se encontrarían las ropas de su pequeño hermano para la pillamada a la que estaba apunto de ir —¡Diviértete!
—Claro Hianta-nee— Naoto le devolvió la sonrisa para porfin salir de la casa de los Tachibana e ir a la dichosa pillamada que los chicos de su curso habían organizado ese día.
La casa de Yamamoto no quedaba tan lejos pero tampoco tan cerca, solo a unas 8 cuadras de su casa. Naoto llevaba una pequeña mochila donde llevaba algunos snack, su pillama, productos de higiene y un nuevo cambio de ropa.
El plan era simple, ir, quedarse despiertos a altas horas de la noche (Ose hasta las 23 p.m., por que Naoto era un niño responsable, la hora máxima que se quedó despierto era las 22 p.m. y fue por los ruidoso que hacia Takemichi a la hora de ver una película de terror junto a Hina) y luego irse a dormir como buen niño responsable.
Pero los planes se estaban empezando a distorsionar un poco...
30 jóvenes con pintas de maleantes empezaba a caminar atrás de él, justo cuando estaba pasando por una cuadra donde las luces fallaban y parecía algo tétrico.
—(Ellos seguro no me están siguiendo a mi, solo caminaran en la misma dirección que yo, no hay que ser prejuiciosos)— pensó Naoto siguiendo su camino con la misma velocidad que antes, solo que esta vez más tenso.
—(Bueno... Si camino más rápido seguro que ya no me seguirán)— pensaba Naoto, empezando a caminar más rápido, pero a las 2 cuadras se dio cuenta que los maleantes también aumentaron la velocidad, haciendo esto más sospechoso.
—(Ahora si creo que me están persiguiendo)— Naoto ahora si empezó a correr ccomo nunca ante algo había ello en su vida, ni cuando le calló agua de pescado y todos los gatos de la cuadra lo persiguieron.
—¡Hey!— exclamó uno de los maleantes, Naoto por inercia giro la cabeza y eso hizo que no viera que sus cordones estaban desamarrados y callendo de cara al piso.
—(¡Rayos! ¡Rayos! ¡Rayos!)— ni en sus pensamientos Naoto decía groserías, aún si viera como esos 30 chicos con imagen de delincuentes lo empezaron a rodear —(... Ya perdí).
Tachibana Naoto
Para empezar ya perdí por dos razones. La primera es que no se pelear y segundo es que no tengo ni un solo yen en los bolsillos, y cuando no tienes dinero, el delincuente te golpea por pobre, y te da tu lección (golpe).
—(Ya perdí)— pensé mientras me acomodaba lentamente para estar sentado sobre mis rodillas —(Mejor me pongo así para que me pegue por acá y no me golpeé en la cara)— volví a pensar acomodándome disimuladamente.
—¡Chifuyu!— escuchó como uno de los pandilleros llamó.
—(¿Qué?)— yo volteo y veo al chico enfrente mío —(Yo conosco a este tipo...)— mechas rubias, tatuaje en el cuello y ojos dorados, algo más pequeño que los otros delincuentes pero de igual forma intimidante —(¡¡Pero no se donde!!)— grité con desesperscion en su mente —(¡Ay ay ay!- ¡¡Ya se!! Voy a decirle algo que los identifique a todos pero que sepa que yo lo conozco) Chato*— exclamé, esperando que mi respuesta satisfaga al delincuente —Oh chato ¿Cómo has estado.
*Jerga peruana para referirse a una persona de baja estatua.
—Bien, bien, webon ¿Por qué estás en el suelo?— el tatuado me levantó del suelo y me dio un abrazo con palmada —Oe pensé que estabas con Baji.
—Si, si, hace un rato estaba allí— me rasque la nuca por mero nerviosismo.
—Jajaja ahora estamos llendo al Karaoke ¿Quieres unirte?— me dijo el ojidorado, yo solo negué repetidas veces —¿Cuándo vamos a quemar autos denuevo?— me pregunto emocionado.
—Si, si, ma-mañana quizás— ¡Tengo que salir rápido! —S-se me hace tarde, creo que me tengo que ir— dije para luego dar una reverencia de 90° y caminar "rápido" hacia donde sería la casa de Yamamoto.
—¡Me salvé!— exclamé en un susurró, pero de la nada me detuve en seco en la esquina siguiente cuando me di cuenta de algo —Yo no me llamo Chifuyu, no conozco a ningún Baji... y nunca e quemado autos en mi vida.
En otro lugar
—Sabes que ese no era Chifuyu ¿verdad?— le pregunto Draken a Kazutora, pensando que Kazutora era un pendejo o solo estaba actuando.
—Jajajaja claro— dijo con la típica voz animada de siempre —Pero sus ojos eran lindos.
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One-Shots TR
Fanfiction¿Y por que no? Reuniones de amigos, un par de tragos, fiestas y otras cosas, nada más