𝗻𝗶 𝗮𝗺𝗶𝗴𝗼𝘀, 𝗻𝗶 𝗲𝗻𝗲𝗺𝗶𝗴𝗼𝘀 ❥ hyunin

↺ Epílogo

➺ + 18

- Mierda - maldecía el menor enterrando sus uñas en la espalda desnuda de su novio.

Sin ningún tipo de cuidado, Hyunjin se encargaba de darle placer al menor y a sí mismo en su sala.

- ¿Me detengo? - preguntó con total burla, sabía perfectamente que su novio lo estaba disfrutando, las reacciones de su cuerpo y sus expresiones lo decían todo.

- Más rápido.

El menor se estaba deshaciendo en gemidos, sentir la hombría de su amado en su interior mientras lo embestía con fuerza y deseo, entraba en el top de las mejores cosas que existían en su pequeño mundo.

Duraron algunos minutos más de esa manera, por supuesto que no estaba entre los planes de Hyunjin dejar de mover sus caderas de atrás hacia delante mientras penetraba al bonito chico que tenía debajo de él.

Después de eso su sillón quedarían horrible, pero qué importaba, cuando Jeongin trataba con todas sus ganas de llenarse de su rubio novio. Y Hwang claramente no perdería la oportunidad de reclamar el cuerpo del contrario.

Sus pieles chocaban, pequeñas lágrimas bajaban por el rostro de Jeongin, pero estas eran totalmente de placer. Besos, mordidas y lamidas eran emitidas por sus bocas en esa guerra sexual que se había creado un jueves por la tarde.

- Me encantas tanto - Hyunjin le decía al momento en el que llegaban a su orgasmo.

- Tú a mí - Jeongin trataba de hablar, pero simplemente no podía, no cuando su chico le estaba dando justo en su punto y él se trataba de apretar lo más que podía para que el miembro dentro de él aún no saliera.

- ¿Quieres otra ronda o qué amor? - el mayor sonreía al sentir cómo se apretaban las paredes de su novio.

- Sí.

Poco a poco Hyunjin se encargó de sacar su miembro bajo los quejidos del menor. Retiró el preservativo y lo cargó hasta la cama de su habitación.

➺ Hasta aquí.

Ya hacía más de 5 meses desde que Hyunjin se había mudado al departamento de su novio. Sonaba loco irte a vivir con tu pareja en tu segundo día de relación, pero considerando que antes parecían hacerlo no hubo problema alguno.

Los 4 primeros días parecían algo tensos, no por estar juntos, sino porque estaban completamente solos y no querían arruinar las cosas. Un día después decidieron bañarse juntos, al final y al cabo ya lo habían hecho antes, desde ese día hasta la fecha lo hacían de manera cotidiana.

Jeongin era el más feliz, ser consentido y por la persona que de verdad quería, no tenía precio alguno.

Hwang se encargaba de cocinar y Yang de mantener su hogar limpio. Lo que no cupo en el departamento del menor fue a dar a la casa de la tía de Hyunjin.

Yeojin era muy feliz al ver a su hermano mayor de esa manera, sinceramente no creía que algún día lograra verlo así de amoroso y sobre todo, amado. Sabía que Jeongin era su chico ideal, lo cuidaba y quería por sobre todas las cosas. De vez en cuando ellos salían juntos a dar la vuelta para finalizar en la cafetería donde trabajaba el mayor.