𝙱𝚘𝚍𝚊 𝙴𝚚𝚞𝚒𝚟𝚘𝚌𝚊𝚍𝚊 |𝙲𝚑𝚊𝚗𝚐𝚕𝚒𝚡| (𝙰𝚍𝚊𝚙𝚝𝚊𝚌𝚒𝚘𝚗)

Nuevos Amigos

—Mugre—habló Changbin mientras le daba filo a un cuchillo.

—¡Hyung!—reprochó Felix lanzándole una ramita a la cabeza. Changbin rió en voz baja— No me diga así.

—Sí no quieres que te diga así, entonces báñate—rebatió el chico burlón y sintió otro golpecito en la cabeza provocado por otra rama—. No te has bañado en qué, ¿Dos, tres días? Tienes suerte de que tenga lo suficiente para cepillarnos los dientes.

—¡Usted tampoco!—acusó con el ceño fruncido. Lanzó todas las pequeñas cosas que se encontraba en el suelo al escuchar la risa de Changbin.

—Yo si me he bañado, por las noches. Cuando estás en el quinto sueño.

—¿Y por qué no me dice?—Felix se levantó del suelo y comenzó a golpear ligeramente el brazo de su hyung en forma de reclamo.

—¿Te quieres bañar? Hay un lago al sur. Llegas como en diez minutos.—señaló la dirección pero Felix no se movió ni un centímetro. Elevó ambas cejas en reproche— ¿Qué? ¿No te vas a bañar, mugre? Sino para seguir caminando.

—Venga conmigo—Changbin abrió la boca sorprendido y negó con la cabeza—. ¡Oh vamos! ¿Cómo sé que no es otra trampa para deshacerase de mí?

—No lo es—aseguró mientras una sonrisa aparecía en sus labios, sonrisa que Felix tomó por sarcástica y se cruzó de brazos—. Está bien, vamos.

Felix celebró en voz baja y levantó a Changbin de golpe al tomarlo de la mano por sorpresa. El mayor sintió un cosquilleo al momento del contacto, sin embargo, pasó de largo de esa sensación y se soltó del agarre que el pequeño tenía en él.

—¿Y qué pasará con Chan, hyung?—cuestionó Felix mientras caminaban hombro a hombro hacia el lago—. Digo, ahora ya debe de estar casado.

—Me lo robaré—respondió despreocupado a la vez que se encogía de hombros, era lo que Woojin le había pedido que hiciera desde un principio. Se giró hacia Felix , quien lo veía sorprendido y elevó ambas cejas— ¿Qué?

—¿Cómo hará eso? ¿Puedo ayudarlo?

—Eso es confidencial y no, no puedes ayudarme. Ya suficiente tengo con tu presencia—sinceró. Caminó más rápido para evitar los pequeños golpes en los brazos que varias veces Felix le había proporcionado.

—Hyung...—alargó la palabra mientras lo alcanzaba, le lanzó una piedrecita a la cabeza y Changbin paró en seco, se giró hacia él y lo miró con el ceño fruncido— N-No se enoje, Binnie hyung. Ni siquiera le dolió ¿O... si?

Felix vio cómo Changbin se acercaba a él y no espero ni un segundo más para correr, había aprendido que su hyung no tenía mucha paciencia y estaba muy seguro de que se le estaba acabando y que en cualquier momento sacaría ese lado salvaje con él.

Changbin corrió tras él e inevitablemente una sonrisa bailó en sus rosados labios. Hacía mucho que no sonreía sinceramente tan seguido, la mayoría de sus sonrisas eran sarcásticas y falsas. Felix cambió eso y a Changbin no le terminaba de agradar eso.

—¡Vuelve aquí, mugroso gatito rojo!—le gritó divertido. Escuchó un refunfuño de parte de Felix y soltó una risa, pero luego recordó algo—. ¡A unos metros hay una bajada, no te vayas a caer! ¡Felix hazme caso!

Sin embargo, Felix lo ignoró pensando que solo le tendía una trampa y corrió más rápido.

Changbin maldijo por lo bajo y aceleró para segundos después envolver la cintura del más pequeño con sus brazos. Debido al impacto de sus cuerpos, ambos cayeron por la bajada, sólo que Changbin protegía el cuerpo de Felix con el suyo.